LE-26556-2009-PLN
Apruébase la
Convención sobre la Protección del Patrimonio Cultural Subacuático.
Sancionada:
Noviembre 18 de 2009
Promulgada:
Diciembre 15 de 2009
El Senado y Cámara de Diputados de la Nación Argentina
reunidos en Congreso, etc. sancionan con fuerza de Ley:
ARTICULO 1º — Apruébase la CONVENCION SOBRE LA PROTECCION DEL PATRIMONIO CULTURAL
SUBACUATICO, adoptada por la Trigésima Primera Conferencia General de la
ORGANIZACION DE LAS NACIONES UNIDAS PARA LA EDUCACION, LA CIENCIA Y LA CULTURA
—UNESCO—, celebrada en París —REPUBLICA FRANCESA— el 2 de noviembre de 2001,
que consta de TREINTA Y CINCO (35) artículos y UN (1) anexo, cuyas fotocopias
autenticadas forman parte de la presente ley.
ARTICULO 2º — Comuníquese al Poder Ejecutivo nacional.
— REGISTRADO BAJO EL Nº 26.556 —
DADA EN LA SALA DE SESIONES DEL CONGRESO ARGENTINO, EN BUENOS AIRES, A
LOS DIECIOCHO DIAS DEL MES DE NOVIEMBRE DEL AÑO DOS MIL NUEVE.
JOSE J. B. PAMPURO. — EDUARDO A. FELLNER. — Enrique Hidalgo. — Juan H.
Estrada.
CONVENCION SOBRE LA PROTECCION DEL PATRIMONIO CULTURAL SUBACUATICO
UNESCO
París, 2 de noviembre de 2001
La Conferencia General de la Organización de las Naciones Unidas para la
Educación, la Ciencia y la Cultura, en su 31ª reunión, celebrada en París del
15 de octubre al 3 de noviembre de 2001.
Reconociendo la importancia del patrimonio cultural subacuático como parte integrante
del patrimonio cultural de la humanidad y elemento de particular importancia en
la historia de los pueblos, las naciones y sus relaciones mutuas en lo
concerniente a su patrimonio común,
Consciente de la importancia de proteger y preservar ese patrimonio cultural
subacuático y de que la responsabilidad de esa tarea incumbe a todos los
Estados,
Observando el creciente interés y aprecio del público por el patrimonio cultural
subacuático,
Convencida de la importancia que la investigación, la información y la educación
tienen para la protección y preservación del patrimonio cultural subacuático,
Convencida de que el público tiene derecho a gozar de los beneficios educativos y
recreativos que depara un acceso responsable y no perjudicial al patrimonio
cultural subacuático in situ y de que la educación del público contribuye a un
mejor conocimiento, aprecio y protección de ese patrimonio,
Consciente de que el patrimonio cultural subacuático se ve amenazado por actividades
no autorizadas dirigidas a dicho patrimonio y de la necesidad de medidas más
rigurosas para impedir esas actividades,
Consciente de la necesidad de dar una respuesta adecuada al posible impacto
negativo en el patrimonio cultural subacuático de actividades legítimas que
puedan afectarlo de manera fortuita,
Profundamente preocupada por la creciente explotación comercial del patrimonio
cultural subacuático y, especialmente, por ciertas actividades que tienen por
objetivo la venta, la adquisición o el trueque de patrimonio cultural
subacuático,
Consciente de la disponibilidad de tecnología de punta que facilita el
descubrimiento del patrimonio cultural subacuático y el acceso al mismo,
Convencida de que la cooperación entre los Estados, organizaciones internacionales,
instituciones científicas; organizaciones profesionales, arqueólogos, buzos,
otras partes interesadas y el público en general es esencial para proteger el
patrimonio cultural subacuático,
Considerando que la prospección, extracción y protección del patrimonio cultural
subacuático, además de un alto grado de especialización profesional, requiere
un acceso a métodos científicos especiales y la aplicación de éstos, así como
el empleo de técnicas y equipos adecuados, para todo lo cual se necesitan criterios
rectores uniformes,
Consciente de la necesidad de codificar y desarrollar progresivamente normas
relativas a la protección y la preservación del patrimonio cultural subacuático
conformes con el derecho y la práctica internacionales, comprendidas la Convención
sobre las Medidas que Deben Adoptarse para Prohibir e Impedir la Importación,
la Exportación y la Transferencia de Propiedad Ilícitas de Bienes Culturales,
aprobada por la UNESCO el 14 de noviembre de 1970, la Convención para la
Protección del Patrimonio Mundial, Cultural y Natural, aprobada por la UNESCO
el 16 de noviembre de 1972 y la Convención de las Naciones Unidas sobre el
Derecho del Mar, de 10 de diciembre de 1982.
Resuelta a mejorar la eficacia de las medidas adoptadas en el ámbito internacional,
regional y nacional con objeto de preservar in situ el patrimonio cultural
subacuático o, de ser necesario para fines científicos o para su protección, de
proceder cuidadosamente a la recuperación del mismo,
Habiendo decidido, en su 29ª reunión, que esta cuestión sería objeto de una convención
internacional, Aprueba el día 2 de noviembre de 2001, la presente
Convención.
Artículo 1 - Definiciones
A los efectos de la presente Convención:
1. a) Por "patrimonio cultural subacuático" se entiende todos
los rastros de existencia humana que tengan un carácter cultural, histórico o
arqueológico, que hayan estado bajo el agua, parcial o totalmente, de forma
periódica o continua, por lo menos durante 100 años, tales como:
i) los sitios, estructuras, edificios, objetos y restos humanos, junto
con su contexto arqueológico y natural;
ii) los buques, aeronaves, otros medios de transporte cualquier parte de
ellos, su cargamento u otro contenido, junto con su contexto arqueológico y
natural; y
iii) los objetos de carácter prehistórico.
b) No se considerará patrimonio cultural subacuático a los cables y
tuberías tendidos en el fondo del mar.
c) No se considerará patrimonio cultural subacuático a las instalaciones
distintas de los cables y tuberías colocadas en el fondo del mar y todavía en
uso.
2. a) Por "Estados Partes" se entiende los Estados que hayan
consentido en obligarse por esta Convención y respecto de los cuales esta
Convención esté en vigor.
b) Esta Convención se aplicará mutatis mutandis a los territorios
mencionados en el apartado b) del párrafo 2 del Articulo 26 que lleguen a ser
Partes en esta Convención de conformidad con los requisitos definidos en ese
párrafo; en esa medida, el término "Estados Partes" se refiere a esos
territorios.
3. Por "UNESCO" se entiende la Organización de las Naciones
Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura.
4. Por "Director General" se entiende el Director General de
la UNESCO.
5. Por "Zona" se entiende los fondos marinos y oceánicos y su
subsuelo fuera de los límites de la jurisdicción nacional.
6. Por "actividades dirigidas al patrimonio cultural
subacuático" se entiende las actividades cuyo objeto primordial sea el
patrimonio cultural subacuático y que puedan, directa o indirectamente,
alterarlo materialmente o causarle cualquier otro daño.
7. Por "actividades que afectan de manera fortuita al patrimonio
cultural subacuático" se entiende las actividades que, a pesar de no tener
al patrimonio cultural subacuático como objeto primordial o secundario puedan
alterarlo materialmente o causarle cualquier otro daño.
8. Por "buques y aeronaves de Estado" se entiende los buques
de guerra y otros navíos o aeronaves pertenecientes a un Estado o utilizados
por él y que, en el momento de su hundimiento, fueran utilizados únicamente
para un servicio público no comercial, que sean identificados como tales y que
correspondan a la definición de patrimonio cultural subacuático.
9. Por "Normas" se entiende las Normas relativas a las
actividades dirigidas al patrimonio cultural subacuático, tal y como se
mencionan en el Artículo 33 de la presente Convención.
Artículo 2 - Objetivos y principios generales
1. La presente Convención tiene por objeto garantizar y fortalecer la
protección del patrimonio cultural subacuático.
2. Los Estados Partes cooperarán en la protección del patrimonio
cultural subacuático.
3. Los Estados Partes preservarán el patrimonio cultural subacuático en
beneficio de la humanidad, de conformidad con lo dispuesto en esta Convención.
4. Los Estados Partes, individual o conjuntamente, según proceda,
adoptarán todas las medidas adecuadas conformes con esta Convención y con el
derecho internacional que sean necesarias para proteger el patrimonio cultural
subacuático, utilizando a esos efectos, en función de sus capacidades, los
medios más idóneos de que dispongan.
5. La preservación in situ del patrimonio cultural subacuático
deberá considerarse la opción prioritaria antes de autorizar o emprender
actividades dirigidas a ese patrimonio.
6. El patrimonio cultural subacuático recuperado se depositará, guardará
y gestionará de tal forma que se asegure su preservación a largo plazo.
7. El patrimonio cultural subacuático no será objeto de explotación
comercial.
8. De conformidad con la práctica de los Estados y con el derecho
internacional, incluida la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho
del Mar, nada de lo dispuesto en esta Convención se interpretará en el sentido
de modificar las normas de derecho internacional y la práctica de los Estados
relativas a las inmunidades soberanas o cualquiera de los derechos de un Estado
respecto de sus buques y aeronaves de Estado.
9. Los Estados Partes velarán por que se respeten debidamente los restos
humanos situados en las aguas marítimas.
10. Un acceso responsable y no perjudicial del público al patrimonio
cultural subacuático in situ, con fines de observación o documentación,
deberá ser alentado para favorecer la sensibilización del público a ese
patrimonio así como el reconocimiento y la protección de éste, salvo en caso de
que ese acceso sea incompatible con su protección y gestión.
11. Ningún acto o actividad realizado en virtud de la presente
Convención servirá de fundamento para alegar, oponerse o cuestionar cualquier
reivindicación de soberanía o jurisdicción nacional.
Artículo 3 - Relación entre la presente Convención y la Convención de
las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar
Nada de lo dispuesto en esta Convención menoscabará los derechos, la jurisdicción
ni las obligaciones que incumben a los Estados en virtud del derecho
internacional, incluida la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho
del Mar. La presente Convención se interpretará y aplicará en el contexto de
las disposiciones del derecho internacional, incluida la Convención de las
Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar, y de conformidad con ellas.
Artículo 4 - Relación con las normas sobre salvamento y hallazgos
Ninguna actividad relacionada con el patrimonio cultural subacuático a
la que se aplica la presente Convención estará sujeta a las normas sobre
salvamento y hallazgos, a no ser que:
a) esté autorizada por las autoridades competentes, y
b) esté en plena conformidad con la presente Convención, y
c) asegure que toda operación de recuperación de patrimonio cultural
subacuático se realice con la máxima protección de éste.
Artículo 5 - Actividades que afectan de manera fortuita al patrimonio
cultural subacuático
Cada Estado Parte empleará los medios más viables de que disponga para
evitar o atenuar cualquier posible repercusión negativa de actividades bajo su
jurisdicción que afecten de manera fortuita al patrimonio cultural subacuático.
Artículo 6 - Acuerdos bilaterales, regionales u otros acuerdos
multilaterales
1. Se alentará a los Estados Partes a celebrar acuerdos bilaterales,
regionales u otros acuerdos multilaterales, o a perfeccionar los acuerdos
existentes, con objeto de preservar el patrimonio cultural subacuático. Todos
esos acuerdos deberán estar en plena conformidad con las disposiciones de la
presente Convención y no menoscabar el carácter universal de ésta. En el marco
de esos acuerdos, los Estados Partes podrán adoptar normas y reglamentos que
aseguren una mejor protección del patrimonio cultural subacuático que los
adoptados en virtud de la presente Convención.
2. Las Partes en esos acuerdos bilaterales, regionales u otros acuerdos
multilaterales podrán invitar a adherirse a esos acuerdos a los Estados que
tengan un vínculo verificable, en especial de índole cultural, histórica o
arqueológica, con el patrimonio cultural subacuático de que se trate.
3. La presente Convención no modificará los derechos ni las obligaciones
en materia de protección de buques sumergidos que incumban a los Estados Partes
en virtud de otros acuerdos bilaterales, regionales u otros acuerdos
multilaterales, concertados antes de la aprobación de la presente Convención,
máxime si están en conformidad con los objetivos de ésta.
Artículo 7 - Patrimonio cultural subacuático en aguas interiores, aguas
archipelágicas y mar territorial
1. En el ejercicio de su soberanía, los Estados Partes tienen el derecho
exclusivo de reglamentar y autorizar las actividades dirigidas al patrimonio
cultural subacuático en sus aguas interiores, aguas archipelágicas y mar
territorial.
2. Sin perjuicio de otros acuerdos internacionales y normas de derecho
internacional aplicables a la protección del patrimonio cultural subacuático,
los Estados Partes exigirán que las Normas se apliquen a las actividades
dirigidas al patrimonio cultural subacuático situado en sus aguas interiores,
aguas archipelágicas y mar territorial.
3. En sus aguas archipelágicas y mar territorial en el ejercicio de su
soberanía y de conformidad con la práctica general observada entre los Estados,
con miras a cooperar sobre los mejores métodos de protección de los buques y
aeronaves de Estado, los Estados Partes deberían informar al Estado del
pabellón Parte en la presente Convención y, si procede, a los demás Estados con
un vínculo verificable, en especial de índole cultural, histórica o
arqueológica, del descubrimiento de tales buques y aeronaves de Estado que sean
identificables.
Artículo 8 - Patrimonio cultural subacuático en la zona contigua
Sin perjuicio de lo dispuesto en los Artículos 9 y 10 y con carácter
adicional a lo dispuesto en los mismos y de conformidad con el párrafo 2 del
Artículo 303 de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar,
los Estados Partes podrán reglamentar y autorizar las actividades dirigidas al
patrimonio cultural subacuático en su zona contigua. Al hacerlo, exigirán que
se apliquen las Normas.
Artículo 9 - Información y notificación en la zona económica exclusiva y
en la plataforma continental
1. Todos los Estados Partes tienen la responsabilidad de proteger el
patrimonio cultural subacuático en la zona económica exclusiva y en la
plataforma continental de conformidad con la presente Convención.
En consecuencia:
a) Un Estado Parte exigirá que cuando uno de sus nacionales o un buque
que enarbole su pabellón descubra patrimonio cultural subacuático situado en su
zona económica exclusiva o en su plataforma continental o tenga la intención de
efectuar una actividad dirigida a dicho patrimonio, el nacional o el capitán
del buque le informe de ese descubrimiento o actividad.
b) En la zona económica exclusiva o en la plataforma continental de otro
Estado Parte:
i) los Estados Partes exigirán que el nacional o el capitán del buque
les informe e informe al otro Estado Parte de ese descubrimiento o actividad;
ii) alternativamente un Estado Parte exigirá que el nacional o el
capitán del buque le informe de ese descubrimiento o actividad y asegurará la
transmisión rápida y eficaz de esa información a todos los demás Estados
Partes.
2. Al depositar su instrumento de ratificación, aceptación, aprobación o
adhesión, un Estado Parte declarará la forma en que transmitirá la información
prevista en el apartado b) del párrafo 1 del presente artículo.
3. Un Estado Parte notificará al Director General los descubrimientos o
actividades dirigidas al patrimonio cultural subacuático que sean puestos en su
conocimiento en virtud del párrafo 1 del presente artículo.
4. El Director General comunicará sin demora a todos los Estados Partes
cualquier información que le sea notificada en virtud del párrafo 3 del
presente artículo.
5. Todo Estado Parte podrá declarar al Estado Parte en cuya zona
económica exclusiva o en cuya plataforma continental esté situado el patrimonio
cultural subacuático, su interés en ser consultado sobre cómo asegurar la
protección efectiva de ese patrimonio. Esa declaración deberá fundarse en un
vínculo verificable, en especial de índole cultural, histórica o arqueológica,
con el patrimonio cultural subacuático de que se trate.
Artículo 10 - Protección del patrimonio cultural subacuático en la zona
económica exclusiva y en la plataforma continental
1. No se concederá autorización alguna para una actividad dirigida al
patrimonio cultural subacuático situado en la zona económica exclusiva o en la
plataforma continental, salvo lo dispuesto en el presente artículo.
2. Un Estado Parte en cuya zona económica exclusiva o en cuya plataforma
continental esté situado el patrimonio cultural subacuático tiene derecho a
prohibir o a autorizar cualquier actividad dirigida a este patrimonio para
impedir cualquier intromisión en sus derechos soberanos o su jurisdicción
reconocidos por el derecho internacional, incluida la Convención de las
Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar.
3. Cuando tenga lugar un descubrimiento de patrimonio cultural
subacuático situado en la zona económica exclusiva o en la plataforma
continental de un Estado Parte, o se tenga la intención de efectuar una
actividad dirigida a dicho patrimonio cultural subacuático, ese Estado Parte:
a) consultará a todos los demás Estados Partes que hayan declarado un
interés en virtud del párrafo 5 del Artículo 9 sobre la mejor manera de
proteger el patrimonio cultural subacuático;
b) coordinará esas consultas como "Estado Coordinador", a
menos que declare expresamente que no desea hacerlo, caso en el cual los
Estados Partes que hayan declarado un interés en virtud del párrafo 5 del
Artículo 9 designarán a un Estado Coordinador.
4. Sin perjuicio de la obligación de todos los Estados Partes de
proteger el patrimonio cultural subacuático mediante la adopción de todas las
medidas viables conformes al derecho internacional, con el fin de impedir todo
peligro inmediato para el patrimonio cultural subacuático, incluido el saqueo,
el Estado Coordinador podrá adoptar todas las medidas viables y/o conceder
cualquier autorización que resulte necesaria de conformidad con la presente
Convención y, de ser necesario, con anterioridad a las consultas, con el fin de
impedir cualquier peligro inmediato para el patrimonio cultural subacuático, ya
sea ocasionado por la actividad humana o por cualquier otra causa, incluido el
saqueo. Al adoptar tales medidas se podrá solicitar la asistencia de otros
Estados Partes.
5. El Estado Coordinador:
a) pondrá en práctica las medidas de protección que hayan sido acordadas
por los Estados que participen en la consulta, que incluyen al Estado
Coordinador, a menos que los Estados que participen en la consulta, que
incluyen al Estado Coordinador, acuerden que otro Estado Parte pondrá en
práctica esas medidas;
b) expedirá todas las autorizaciones necesarias con respecto a las
medidas así acordadas de conformidad con las Normas, a menos que los Estados
que participen en la consulta, que incluyen al Estado Coordinador, acuerden que
otro Estado Parte expedirá esas autorizaciones;
c) podrá realizar toda investigación preliminar que resulte necesaria en
el patrimonio cultural subacuático y expedirá todas las autorizaciones
necesarias a tal fin, y transmitirá sin demora los resultados de tal
investigación al Director General quien, a su vez, comunicará esas
informaciones sin demora a los demás Estados Partes.
6. Al coordinar las consultas, adoptar medidas, realizar una
investigación preliminar y/o expedir autorizaciones en virtud del presente
artículo, el Estado Coordinador actuará en nombre de los Estados Partes en su
conjunto y no en su interés propio. Esta acción en sí no podrá ser invocada
para reivindicar derecho preferente o jurisdiccional alguno que no esté
reconocido por el derecho internacional, incluida la Convención de las Naciones
Unidas sobre el Derecho del Mar.
7. A reserva de lo dispuesto en los párrafos 2 y 4 del presente
artículo, no se efectuará ninguna actividad dirigida a un buque o aeronave de
Estado sin el acuerdo del Estado del pabellón y la colaboración del Estado
Coordinador.
Artículo 11 - Información y notificación en la Zona
1. Todos los Estados Partes tienen la responsabilidad de proteger el
patrimonio cultural subacuático en la Zona, de conformidad con la presente
Convención y con el Artículo 149 de la Convención de las Naciones Unidas sobre
el Derecho del Mar. En consecuencia, cuando un nacional de un Estado Parte o un
buque que enarbole su pabellón descubra patrimonio cultural subacuático situado
en la Zona, o tenga la intención de efectuar una actividad dirigida a dicho
patrimonio ese Estado Parte exigirá que su nacional o el capitán del buque le
informe de ese descubrimiento o de esa actividad.
2. Los Estados Partes notificarán al Director General y al Secretario
General de la Autoridad Internacional de los Fondos Marinos los descubrimientos
o actividades dirigidas al patrimonio cultural subacuático de que hayan sido
informados.
3. El Director General comunicará sin demora a todos los Estados Partes
cualquier información de este tipo suministrada por los Estados Partes.
4. Un Estado Parte podrá declarar al Director General su interés en ser
consultado sobre cómo asegurar la protección efectiva de ese patrimonio
cultural subacuático. Dicha declaración deberá fundarse en un vínculo
verificable con ese patrimonio cultural subacuático; habida cuenta en
particular de los derechos preferentes de los Estados de origen cultural,
histórico o arqueológico.
Artículo 12 - Protección del patrimonio cultural subacuático en la Zona
1. No se concederá autorización alguna para una actividad dirigida al
patrimonio cultural subacuático situado en la Zona, salvo lo dispuesto en el
presente artículo.
2. El Director General invitará a todos los Estados Partes que hayan
declarado un interés en virtud del párrafo 4 del Artículo 11 a efectuar
consultas sobre la mejor manera de proteger el patrimonio cultural subacuático,
y a designar un Estado Parte para coordinar esas consultas como "Estado
Coordinador". El Director General invitará asimismo a la Autoridad
Internacional de dos Fondos Marinos a participar en esas consultas.
3. Todos los Estados Partes podrán adoptar todas las medidas viables
conforme a la presente Convención, de ser necesario, antes de efectuar
consultas, con el fin de impedir todo peligro inmediato para el patrimonio
cultural subacuático, ya sea ocasionado por la actividad humana o por cualquier
otra causa, incluido el saqueo.
4. El Estado Coordinador:
a) pondrá en práctica las medidas de protección que hayan sido acordadas
por los Estados que participen en la consulta, que incluyen al Estado
Coordinador, a menos que los Estados que participen en la consulta, que
incluyen al Estado Coordinador, acuerden que otro Estado Parte pondrá en
práctica dichas medidas; y
b) expedirá todas las autorizaciones necesarias con respecto a las
medidas así acordadas de conformidad con la presente Convención, a menos que
los Estados que participen en la consulta, que incluyen al Estado Coordinador,
acuerden que otro Estado Parte expedirá dichas autorizaciones.
5. El Estado Coordinador podrá realizar toda investigación preliminar
que resulte necesaria en el patrimonio cultural subacuático y expedirá todas
las autorizaciones necesarias a tal fin, y transmitirá sin demora los
resultados de tal investigación al Director General quien, a su vez, comunicará
esas informaciones a los demás Estados Partes.
6. Al coordinar las consultas, adoptar medidas, realizar una
investigación preliminar y/o expedir autorizaciones en virtud del presente
artículo, el Estado Coordinador actuará en beneficio de toda la humanidad, en
nombre de todos los Estados Partes. Se prestará especial atención a los
derechos preferentes de los Estados de origen cultural, histórico o
arqueológico con respecto al patrimonio cultural subacuático de que se trate.
7. Ningún Estado Parte emprenderá ni autorizará actividades dirigidas a
un buque o aeronave de Estado en la Zona sin el consentimiento del Estado del
pabellón.
Artículo 13 - Inmunidad soberana
Los buques de guerra y otros buques gubernamentales o aeronaves
militares que gocen de inmunidad soberana y sean utilizados, con fines no
comerciales, en el curso normal de sus operaciones, y que no participen en
actividades dirigidas al patrimonio cultural subacuático no estarán obligados a
comunicar descubrimientos de patrimonio cultural subacuático en virtud de los
Artículos 9, 10, 11 y 12 de la presente Convención. Sin embargo, al adoptar
medidas apropiadas que no obstaculicen las operaciones o la capacidad de
operación de sus buques de guerra u otros buques gubernamentales o aeronaves
militares que gocen de inmunidad soberana y que se utilicen con fines no
comerciales, los Estados Partes velarán por que tales buques procedan, en
cuanto sea razonable y posible, de manera compatible con lo dispuesto en los
Artículos 9, 10, 11 y 12 de la presente Convención.
Artículo 14 - Control de entrada en el territorio, comercio y posesión
Los Estados Partes tomarán medidas para impedir la entrada en su
territorio, el comercio y la posesión de patrimonio cultural subacuático
exportado ilícitamente y/o recuperado, cuando tal recuperación sea contraria a
la presente Convención.
Artículo 15 - No utilización de las zonas bajo jurisdicción de los
Estados Partes
Los Estados Partes adoptarán medidas para prohibir la utilización de su
territorio, incluidos sus puertos Marítimos y sus islas artificiales,
instalaciones y estructuras bajo su jurisdicción o control exclusivos, en apoyo
de cualquier actividad dirigida al patrimonio cultural subacuático que no esté
de conformidad con la presente Convención.
Artículo 16 - Medidas referentes a los nacionales y los buques
Los Estados Partes adoptarán todas las medidas viables para asegurar que
sus nacionales y los buques que enarbolan su pabellón no procedan a ninguna
actividad dirigida al patrimonio cultural subacuático que no esté de
conformidad con la presente Convención.
Artículo 17 - Sanciones
1. Cada Estado Parte impondrá sanciones respecto de las infracciones de
las medidas que haya adoptado para poner en práctica la presente Convención.
2. Las sanciones aplicables respecto de las infracciones deberán ser
suficientemente severas para hacer efectivo el cumplimiento de la presente
Convención y desalentar la comisión de infracciones cualquiera que sea el
lugar, y deberán privar a los infractores de los beneficios derivados de sus
actividades ilícitas.
3. Los Estados Partes cooperarán para asegurar el cumplimiento de las
sanciones impuestas en virtud del presente artículo.
Artículo 18 - Incautación y disposición de patrimonio cultural
subacuático
1. Cada Estado Parte adoptará medidas destinadas a la incautación de
elementos de patrimonio cultural subacuático situado en su territorio, que haya
sido recuperado de una manera no conforme con la presente Convención.
2. Cada Estado Parte registrará, protegerá y tomará todas las medidas
que resulten razonables para la estabilización de patrimonio cultural
subacuático incautado en virtud de la presente Convención.
3. Cada Estado Parte notificará toda incautación de patrimonio cultural
subacuático realizada en virtud de la presente Convención al Director General
de la UNESCO y a cualquier otro Estado que tenga un vínculo verificable, en
especial de índole cultural, histórica o arqueológica con el patrimonio
cultural subacuático de que se trate.
4. Un Estado Parte que haya incautado patrimonio cultural subacuático
velará por darle una disposición acorde con el bien general, tomando en
consideración los imperativos de conservación e investigación, la necesidad de
reunir las colecciones dispersas, así como la necesidad del acceso, la
exposición y educación públicos y los intereses de cualquier Estado que tenga
un vínculo verificable, en especial de índole cultural, histórica o
arqueológica con el patrimonio cultural subacuático de que se trate.
Artículo 19 - Cooperación y utilización compartida de la información
1. Los Estados Partes deberán cooperar entre sí y prestarse asistencia para
velar por la protección y gestión del patrimonio cultural subacuático en virtud
de la presente Convención, incluyendo cuando sea posible, la colaboración en la
exploración, la excavación, la documentación, la conservación, el estudio y la
presentación de ese patrimonio.
2. En la medida en que sea compatible con los objetivos de esta
Convención, cada Estado Parte se compromete a compartir con otros Estados
Partes información en relación con el patrimonio cultural subacuático, incluída
la referente al descubrimiento de ese patrimonio, su localización, el
patrimonio extraído o recuperado de manera contraria a esta Convención o que
viole otras disposiciones del derecho internacional, la metodología y las
técnicas científicas pertinentes y la evolución del derecho aplicable al
patrimonio de que se trate.
3. Toda información compartida entre Estados Partes, o entre la UNESCO y
Estados Partes, relativa al descubrimiento o localización de patrimonio
cultural subacuático se mantendrá con carácter confidencial y se comunicará
exclusivamente a las autoridades competentes de los Estados Partes, en la
medida en que sus respectivas legislaciones nacionales lo permitan, y en tanto
la divulgación de esa información pueda poner en peligro o amenazar de alguna
manera la preservación de ese patrimonio cultural subacuático.
4. Cada Estado Parte adoptará todas las medidas viables, para difundir
información sobre el patrimonio cultural subacuático extraído o recuperado de
manera contraria a esta Convención o en violación de otras disposiciones del
derecho internacional, incluyendo, cuando sea posible, la utilización de bases
de datos internacionales apropiadas.
Artículo 20 - Sensibilización del público
Cada Estado Parte adoptará todas las medidas viables para que el público
tome conciencia del valor y de la relevancia del patrimonio cultural
subacuático, así como de la importancia que tiene su protección en virtud de
esta Convención.
Artículo 21 - Formación en arqueología subacuática
Los Estados Partes cooperarán para impartir una formación en arqueología
subacuática, en las técnicas de preservación del patrimonio cultural
subacuático y, conforme a los términos acordados, en la transferencia de
tecnologías relacionadas con el patrimonio cultural subacuático.
Artículo 22 - Autoridades competentes
1. A fin de velar por la correcta puesta en práctica de esta Convención,
los Estados Partes establecerán autoridades competentes o, en su caso,
reforzarán las ya existentes para que puedan elaborar, mantener y actualizar un
inventario del patrimonio cultural subacuático y garantizar eficazmente la
protección, la conservación, la presentación y la gestión del patrimonio
cultural subacuático, así como la investigación y educación.
2. Los Estados Partes comunicarán al Director General el nombre y la
dirección de sus autoridades competentes en materia de patrimonio cultural
subacuático.
Artículo 23 - Reunión de los Estados Partes
1. El Director General convocará una Reunión de los Estados Partes en el
plazo de un año contado a partir de la entrada en vigor de la presente
Convención y ulteriormente por lo menos una vez cada dos años. A petición de
una mayoría de los Estados Partes, el Director General convocará una Reunión
Extraordinaria de los Estados Partes.
2. La Reunión de los Estados Partes decidirá sobre sus funciones y
responsabilidades.
3. La Reunión de los Estados Partes aprobará su propio Reglamento.
4. La Reunión de los Estados Partes podrá crear un Consejo Consultivo
Científico y Técnico compuesto por expertos designados por los Estados Partes,
con la debida atención al principio de distribución geográfica equitativa y a
la conveniencia de un equilibrio entre los sexos.
5. El Consejo Consultivo Científico y Técnico prestará la asistencia
adecuada a la Reunión de los Estados Partes sobre las cuestiones de índole
científica y técnica relacionadas con la puesta en práctica de las Normas.
Artículo 24 - Secretaría de la Convención
1. El Director General será responsable de la Secretaría de la presente
Convención.
2. Las funciones de la Secretaría incluirán las siguientes tareas:
a) organizar las Reuniones de los Estados Partes previstas en el párrafo
1 del Artículo 23; y
b) prestar asistencia a los Estados Partes en la puesta en práctica de
las decisiones de las Reuniones de los Estados Partes.
Artículo 25 - Solución pacífica de controversias
1. Cualquier controversia entre dos o más Estados Partes acerca de la
interpretación o la aplicación de la presente Convención deberá ser objeto de
negociaciones de buena fe o de otros medios de solución pacífica de su
elección.
2. Si dichas negociaciones no resolvieran la controversia en un plazo
razonable, los Estados Partes de que se trate podrán, de común acuerdo,
someterla a la mediación de la UNESCO.
3. Si no se recurriera a la mediación o si ésta no resolviera las
controversias, las disposiciones relativas a la solución de controversias
enunciadas en la Parte XV de la Convención de las Naciones Unidas sobre el
Derecho del Mar se aplicarán mutatis mutandis a toda controversia entre
Estados Partes en la presente Convención respecto de la interpretación o la
aplicación de esta Convención, independientemente de que sean o no también
Partes en la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar.
4. Todo procedimiento escogido por un Estado Parte en la presente
Convención y en la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar,
en virtud del Artículo 287 de esta última, se aplicará a la solución de
controversias en virtud del presente artículo, a menos que ese Estado Parte, al
ratificar, aceptar o aprobar la presente Convención o al adherirse a ella, o en
cualquier momento ulterior, haya elegido otro procedimiento en virtud del
Artículo 287 para la solución de controversias derivadas de la presente
Convención.
5. Al ratificar, aceptar, aprobar la presente Convención o adherirse a
ella, o en cualquier momento ulterior, un Estado Parte en la presente
Convención que no sea Parte en la Convención de las Naciones Unidas sobre el
Derecho del Mar podrá elegir libremente, mediante una declaración escrita, uno
o varios de los medios enunciados en el párrafo 1 del Artículo 287 de la
Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar para la solución de
las controversias con arreglo al presente artículo. El Artículo 287 se aplicará
a esa declaración así como a toda controversia en la que ese Estado sea Parte y
que no esté amparada por una declaración en vigor. A efectos de conciliación y
arbitraje, de conformidad con los Anexos V y VII de la Convención de las
Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar, ese Estado estará habilitado para
designar conciliadores y árbitros que se incluirán en las listas mencionadas en
el Artículo 2 del Anexo V y en el Artículo 2 del Anexo VII para la solución de
las controversias derivadas de la presente Convención.
Artículo 26 - Ratificación, aceptación, aprobación o adhesión
1. La presente Convención estará sujeta a la ratificación, aceptación o
aprobación de los Estados Miembros de la UNESCO.
2. La presente Convención estará sujeta a la adhesión:
a) de los Estados que no sean miembros de la UNESCO pero que sean
miembros de las Naciones Unidas o de un organismo especializado del sistema de
las Naciones Unidas o del Organismo Internacional de Energía Atómica, así como
de los Estados Partes en el Estatuto de la Corte Internacional de Justicia, y
de cualquier otro Estado al que la Conferencia General de la UNESCO haya
invitado a adherirse a la presente Convención;
b) de los territorios que gocen de plena autonomía interna reconocida
como tal por las Naciones Unidas, pero que no hayan alcanzado la plena
independencia de conformidad con la Resolución 1514 (XV) de la Asamblea
General, y que tengan competencia sobre las materias regidas por esta
Convención, incluida la de celebrar tratados en relación con ellas.
3. Los instrumentos de ratificación, aceptación, aprobación o adhesión
serán depositados ante el Director General.
Artículo 27 - Entrada en vigor
La Convención entrará en vigor tres meses después de la fecha en que
haya sido depositado el instrumento a que se refiere el Artículo 26, pero
únicamente respecto de los veinte Estados o territorios que hayan depositado
sus instrumentos. Entrará en vigor para cualquier otro Estado o territorio tres
meses después de la fecha en que dicho Estado o territorio haya depositado su
instrumento.
Articulo 28 - Declaración relativa a las aguas continentales
Al ratificar, aceptar, aprobar esta Convención o adherirse a ella o en
cualquier momento ulterior, todo Estado o territorio podrá declarar que las
Normas se aplicarán a sus aguas continentales que no sean de carácter marítimo.
Artículo 29 - Limitación del ámbito de aplicación geográfico
Al ratificar, aceptar, aprobar la presente Convención o adherirse a
ella, un Estado o territorio podrá declarar ante el depositario que la presente
Convención no se aplicará a determinadas partes de su territorio, sus aguas
interiores, aguas archipelágicas o mar territorial e indicará en esa
declaración las razones que la motivan. En la medida de lo posible, y tan
pronto como pueda, el Estado deberá reunir las condiciones necesarias para que
la presente Convención se aplique a las zonas especificadas en su declaración a
esos efectos, y en cuanto haya reunido esas condiciones, retirará también total
o parcialmente su declaración.
Artículo 30 - Reservas
Salvo lo dispuesto en el Artículo 29, no se podrán formular reservas a
la presente Convención.
Artículo 31 - Enmiendas
1. Un Estado Parte podrá proponer enmiendas a esta Convención mediante comunicación
dirigida por escrito al Director General. El Director General transmitirá la
comunicación a todos los Estados Partes. Si dentro de los seis meses siguientes
a la fecha de envío de la comunicación, la mitad por lo menos de los Estados
Partes responde favorablemente a esa petición, el Director General presentará
dicha propuesta para examen y posible aprobación de la siguiente Reunión de los
Estados Partes.
2. Las enmiendas serán aprobadas por una mayoría de dos tercios de los
Estados Partes presentes y votantes.
3. Una vez aprobadas, las enmiendas a esta Convención deberán ser objeto
de ratificación, aceptación, aprobación o adhesión por los Estados Partes.
4. La enmienda a esta Convención entrarán en vigor únicamente para los
Estados Partes que las hayan ratificado, aceptado, aprobado o que se hayan
adherido a ellas tres meses después de que dos tercios de los Estados Partes
hayan depositado los instrumentos mencionados en el párrafo 3 del presente
artículo. A partir de esa fecha, la enmienda entrará en vigor para cada Estado
Parte o territorio que la ratifique, acepte, apruebe o se adhiera a ella tres
meses después de la fecha en que esa Parte haya depositado su instrumento de
ratificación, aceptación, aprobación o adhesión.
5. Un Estado o territorio que llegue a ser Parte en esta Convención
después de la entrada en vigor de enmiendas efectuadas de conformidad con el
párrafo 4 del presente artículo y que no manifieste una intención diferente,
será considerado:
a) Parte en esta Convención así enmendada; y
b) Parte en la Convención no enmendada con respecto a todo Estado Parte
que no este obligado por la enmienda.
Artículo 32 - Denuncia
1. Un Estado Parte podrá denunciar esta Convención mediante notificación
dirigida por escrito al Director General.
2. La d enuncia surtirá efecto doce meses después de la fecha de
recepción de la notificación, a menos que en ella se especifique una fecha
ulterior.
3. La denuncia no afectará en modo alguno el deber de los Estados Partes
de cumplir todas las obligaciones contenidas en la presente Convención a las
que estén sometidos en virtud del derecho internacional con independencia de
esta Convención.
Artículo 33 - Las Normas
Las Normas que figuran en el Anexo de esta Convención son parte
integrante de ella y, salvo disposición expresa en contrario, cualquier
referencia a esta Convención constituye asimismo una referencia a las Normas.
Artículo 34 - Registro en las Naciones Unidas
Con arreglo a lo dispuesto en el Artículo 102 de la Carta de las
Naciones Unidas, la presente Convención deberá ser registrada en la Secretaría
de las Naciones Unidas a petición del Director General.
Artículo 35 - Textos auténticos
Esta Convención se ha redactado en árabe, chino, español, francés,
inglés y ruso, siendo los seis textos igualmente auténticos.
Anexo
Normas relativas a las actividades dirigidas al patrimonio cultural
subacuático
I Principios generales
Norma 1. La conservación in situ será considerada la opción prioritaria
para proteger el patrimonio cultural subacuático. En consecuencia, las
actividades dirigidas al patrimonio cultural subacuático se autorizarán
únicamente si se realizan de una manera compatible con su protección y, a
reserva de esa condición, podrán autorizarse cuando constituyan una
contribución significativa a la protección, el conocimiento o el realce de ese
patrimonio.
Norma 2.
La explotación comercial de patrimonio cultural subacuático que tenga por fin
la realización de transacciones, la especulación o su dispersión irremediable
es absolutamente incompatible con una protección y gestión correctas de ese
patrimonio. El patrimonio cultural subacuático no deberá ser objeto de
transacciones ni de operaciones de venta, compra o trueque como bien comercial.
No cabrá interpretar que esta norma prohíba:
a) la prestación de servicios arqueológicos profesionales o de servicios
conexos necesarios cuya índole y finalidad sean plenamente conformes con la
presente Convención, y tengan la autorización de las autoridades competentes;
b) el depósito de patrimonio cultural subacuático recuperado en el marco
de un proyecto de investigación ejecutado de conformidad con esta Convención,
siempre que dicho depósito no vulnere el interés científico o cultural, ni la
integridad del material recuperado, ni dé lugar a su dispersión irremediable,
esté dé conformidad con lo dispuesto en las Normas 33 y 34 y tenga la
autorización de las autoridades competentes.
Norma 3. Las actividades dirigidas al patrimonio cultural subacuático no deberán
perjudicarlo más de lo que sea necesario para los objetivos del proyecto.
Norma 4. Las actividades dirigidas al patrimonio cultural subacuático deberán
servirse de técnicas y métodos de exploración no destructivos, que deberán
preferirse a la recuperación de objetos. Si para llevar a cabo estudios
científicos o proteger de modo definitivo el patrimonio cultural subacuático
fuese necesario realizar operaciones de extracción o recuperación, las técnicas
y los métodos empleados deberán ser lo menos dañinos posible y contribuir a la
preservación de los vestigios.
Norma 5. Las actividades dirigidas al patrimonio cultural subacuático evitarán
perturbar innecesariamente los restos humanos o los sitios venerados.
Norma 6. Las actividades dirigidas al patrimonio cultural subacuático se
reglamentarán estrictamente para que se registre debidamente la información
cultural, histórica y arqueológica.
Norma 7. Se fomentará el acceso del público al patrimonio cultural subacuático in
situ, salvo en los casos en que éste sea incompatible con la protección y
la gestión del sitio.
Norma 8. Se alentará la cooperación internacional en la realización de
actividades dirigidas al patrimonio cultural subacuático con objeto de
propiciar intercambios eficaces de arqueólogos y demás especialistas
competentes y de emplear mejor sus capacidades.
II. Plan del proyecto
Norma 9. Antes de iniciar cualquier actividad dirigida al patrimonio cultural
subacuático se elaborará el proyecto correspondiente, cuyo plan se presentará a
las autoridades competentes para que lo autoricen, previa revisión por los
pares.
Norma 10. El plan del proyecto incluirá:
a) una evaluación de los estudios previos o preliminares;
b) el enunciado y los objetivos del proyecto;
c) la metodología y las técnicas que se utilizarán;
d) el plan de financiación;
e) el calendario previsto para la ejecución del proyecto;
f) la composición del equipo, las calificaciones, las funciones y la
experiencia de cada uno de sus integrantes;
g) planes para los análisis y otras actividades que se realizarán
después del trabajo de campo;
h) un programa de conservación de los objetos y del sitio, en estrecha
colaboración con las autoridades competentes;
i) una política de gestión y mantenimiento del sitio que abarque toda la
duración del proyecto,
j) un programa de documentación;
k) un programa de seguridad;
l) una política relativa al medio ambiente;
m) acuerdos de colaboración con museos y otras instituciones, en
particular de carácter científico;
n) la preparación de informes;
o) el depósito de los materiales y archivos, incluido el patrimonio
cultural subacuático que se haya extraído; y
p) un programa de publicaciones.
Norma 11. Las actividades dirigidas al patrimonio cultural subacuático se
realizarán de conformidad con el plan del proyecto aprobado por las autoridades
competentes.
Norma 12. Si se hiciesen descubrimientos imprevistos o cambiasen las
circunstancias, se revisará y modificará el plan del proyecto con la aprobación
de las autoridades competentes.
Norma 13. En caso de emergencia o de descubrimientos fortuitos, las actividades
dirigidas al patrimonio cultural subacuático, incluyendo medidas o actividades
de conservación por un período breve, en particular de estabilización del
sitio, podrán ser autorizadas en ausencia de un plan de proyecto, a fin de
proteger el patrimonio cultural subacuático.
III. Labor preliminar
Norma 14. La labor preliminar mencionada en la Norma 10 a) incluirá una evaluación
de la importancia del patrimonio cultural subacuático y su entorno natural y de
su vulnerabilidad a posibles perjuicios resultantes del proyecto previsto, así
como de las posibilidades de obtener datos que correspondan a los objetivos del
proyecto.
Norma 15. La evaluación incluirá además estudios previos de los datos históricos y
arqueológicos disponibles, las características arqueológicas y ambientales del
sitio y las consecuencias de cualquier posible intrusión en la estabilidad a
largo plazo del patrimonio cultural subacuático objeto de las actividades.
IV. Objetivos, metodología y técnicas del proyecto
Norma 16. La metodología se deberá ajustar a los objetivos del proyecto y las
técnicas utilizadas deberán ser lo menos perjudiciales posible.
V. Financiación
Norma 17. Salvo en los casos en que la protección del patrimonio cultural
subacuático revista carácter de urgencia, antes de iniciar cualquier actividad
dirigida al mismo se deberá contar con la financiación suficiente para cumplir
todas las fases previstas en el plan del proyecto, incluidas la conservación,
la documentación y la preservación del material recuperado, así como la
preparación y la difusión de los informes.
Norma 18. En el plan del proyecto se demostrará la capacidad de financiar el
proyecto hasta su conclusión, por ejemplo, mediante la obtención de una
garantía.
Norma 19. El plan del proyecto incluirá un plan de emergencia que garantice la
conservación del patrimonio cultural subacuático y la documentación de apoyo en
caso de interrumpirse la financiación prevista.
VI. Duración del proyecto - Calendario
Norma 20. Antes de iniciar cualquier actividad dirigida al patrimonio cultural
subacuático se preparará el calendario correspondiente para garantizar de
antemano el cumplimiento de todas las fases del proyecto, incluídas la
conservación, la documentación y la preservación del patrimonio cultural
subacuático recuperado, así como la preparación y la difusión de los informes.
Norma 21. El plan del proyecto incluirá un plan de emergencia que garantice la
conservación del patrimonio cultural subacuático y la documentación de apoyo en
caso de interrupción o conclusión del proyecto.
VII. Competencia y calificaciones
Norma 22. Sólo se efectuarán actividades dirigidas al patrimonio cultural
subacuático bajo la dirección y el control y con la presencia continuada de un
arqueólogo subacuático cualificado que tenga la competencia científica adecuada
a la índole del proyecto.
Norma 23. Todos los miembros del equipo del proyecto deberán estar cualificados y
haber demostrado una competencia adecuada a la función que desempeñarán en el
proyecto.
VIII. Conservación y gestión del sitio
Norma 24. En el programa de conservación estarán previstos el tratamiento de los
restos arqueológicos durante las actividades dirigidas al patrimonio cultural
subacuático, en el curso de su traslado y a largo plazo. La conservación se
efectuará de conformidad con las normas profesionales vigentes.
Norma 25. En el programa de gestión del sitio estarán previstas la protección y la
gestión in situ del patrimonio cultural subacuático durante el trabajo
de campo y una vez que éste haya concluido. El programa abarcará actividades de
información pública, medidas adecuadas para la estabilización del sitio, su
control sistemático y su protección de las intrusiones.
IX. Documentación
Norma 26. En el marco del programa de documentación, se documentarán
exhaustivamente las actividades dirigidas al patrimonio cultural subacuático
incluyendo un informe sobre la marcha de las actividades, elaborado de conformidad
con las normas profesionales vigentes en materia de documentación arqueológica.
Norma 27. La documentación incluirá como mínimo un inventario detallado del sitio,
con indicación de la procedencia del patrimonio cultural subacuático desplazado
o retirado en el curso de las actividades dirigidas al mismo, apuntes sobre el
trabajo de campo, planos, dibujos, secciones, fotografías o registros en otros
medios.
X. Seguridad
Norma 28. Se preparará un plan de seguridad adecuado para velar por la seguridad y
la salud de los integrantes del equipo y de terceros, que esté en conformidad
con las normativas legales y profesionales en vigor.
XI. Medio ambiente
Norma 29. Se preparará una política relativa al medio ambiente adecuada para velar
por que no se perturben indebidamente los fondos marinos o la vida marina.
XII. Informes
Norma 30. Se presentarán informes sobre el desarrollo de los trabajos, así como
informes finales de conformidad con el calendario establecido en el plan del
proyecto y se depositarán en los registros públicos correspondientes.
Norma 31. Los informes incluirán:
a) una descripción de los objetivos;
b) una descripción de las técnicas y los métodos utilizados,
c) una descripción de los resultados obtenidos;
d) documentación gráfica y fotográfica esencial, sobre todas las fases
de la actividad;
e) recomendaciones relativas a la conservación y preservación del sitio
y del patrimonio cultural subacuático que se haya extraído; y
f) recomendaciones para actividades futuras.
XIII. Conservación de los archivos del proyecto
Norma 32. Las disposiciones sobre la conservación de los archivos del proyecto se
acordarán antes de iniciar cualquier actividad y se harán constar en el plan
del proyecto.
Norma 33. Los archivos del proyecto, incluido cualquier patrimonio cultural
subacuático que se haya extraído y una copia de toda la documentación de apoyo,
se conservarán, en la medida de lo posible, juntos e intactos en forma de
colección, de tal manera que los especialistas y el público en general puedan
tener acceso a ellos y que pueda procederse a la preservación de los archivos.
Ello debería hacerse lo más rápidamente posible y, en cualquier caso, no
después de transcurridos diez años desde la conclusión del proyecto, siempre
que ello sea compatible con la conservación del patrimonio cultural
subacuático.
Norma 34. La gestión de los archivos del proyecto se hará conforme a las normas
profesionales internacionales, y estará sujeta a la autorización de las
autoridades competentes.
XIV. Difusión
Norma 35. En los proyectos se preverán actividades de educación y de difusión al
público de los resultados del proyecto, según proceda.
Norma 36. La síntesis final de cada proyecto:
a) se hará, pública tan pronto como sea posible, habida cuenta de la
complejidad del proyecto y el carácter confidencial o delicado de la
información; y
b) se depositará en los registros públicos correspondientes.