La danza, resistencia del espíritu humano
De interés general

La danza, resistencia del espíritu humano. De interés general

 

 

29/09/2013 Fuente revistaenie. Responsable de Alvin Ailey American Dance Theatre Desde hace dos años, el coreógrafo Robert Batlle habla sobre el programa que la compañía traerá en su primera visita a nuestro país.

 

El coreógrafo y bailarín afro americano Alvin Ailey, nacido en Texas en 1931 y criado en Los Angeles, decía en una entrevista publicada a fines de la década del 80: “La danza no es negra ni verde ni púrpura, simplemente es buena o es mala; si compongo una obra sobre música de Bach, ¿es negra sólo porque la hago yo?”. Ailey manifestaba así su hartazgo por la etiqueta de “étnica” que de una manera simplificada se había aplicado a su obra, por otra parte muy heterogénea: desde piezas totalmente abstractas hasta otras consagradas a personalidades conocidas cuyas vidas concluyeron trágicamente, como la cantante de rock Janis Joplin y el líder de los Doors, Jim Morrison, o coreografías inspiradas en obras teatrales como Fiesta de cenizas , a partir de La casa de Bernarda Alba (1936), del autor español Federico García Lorca.

 

Desde muy joven Alvin Ailey tuvo una intensa carrera como intérprete, pero en 1958 decidió crear una compañía propia, integrada principalmente por bailarines de su mismo origen. Para esta compañía concibió el cuerpo más importante de su repertorio y aquí es ineludible citar Revelations (1960), a la que se considera su obra maestra y una expresión dolorosa, pero también jubilosa, de la experiencia afro americana.

 

Ailey murió por complicaciones derivadas del virus vih en 1989 y la dirección de su compañía fue asumida primero por una de sus bailarinas predilectas, Judith Jamison (Filadelfia, 1943), y luego, en 2011, por el también coreógrafo y ex bailarín Robert Batlle. La Alvin Ailey American Dance Theatre, la compañía de danza que más giras hace por el todo el globo, llega por primera vez a la Argentina y este es un buen motivo para entrevistar a Batlle (Jacksonville, Florida, 1972), su director.

 

CELEBRACION DE LA VIDA

 

Usted es el tercer director de la compañía en los casi sesenta años que lleva de vida. ¿Cuál fue su razón principal para aceptar el puesto?

 

Esta oportunidad no sólo representa un trabajo sino algo mucho más grande: vivir la historia. Nuestra filosofía es la misma que cuando la creó Alvin Ailey: celebrar la vida y la humanidad a través de la danza. Ailey quería una compañía integral, con varios repertorios y muchos coreógrafos distintos, desde los más jóvenes hasta los más experimentados.

 

¿Pudo usted tener alguna relación personal o artística con Alvin Ailey?

 

No lo conocí personalmente. Llegué a Nueva York para estudiar en 1989 y él había muerto un año antes. Mi relación con la compañía comenzó diez años después cuando creé una obra para la Ailey II. Y luego Judith Jamison me invitó en 2003 a hacer mi primera obra para la compañía principal.

 

¿Por qué hay dos compañías? ¿La Ailey II es una compañía más joven?

 

La compañía tiene una escuela que comenzó en los 50. Y como Alvin Ailey quería tener también un espacio que preparara bailarines profesionales, creó una compañía junior , más pequeña. Ella cubre ciudades y teatros a los que nosotros no podemos ir.

 

La Alvin Ailey Dance Theatre continúa teniendo una mayoría de bailarines negros. ¿Es importante para ustedes conservar esta tradición?

 

Alvin Ailey creó la compañía para dar una oportunidad a bailarines y coreógrafos afro americanos. La escuela fue fundada en la época del movimiento por los derechos civiles, un tiempo en el que los bailarines negros no tenían acceso a muchos lugares; sobre el escenario no se veían imágenes que representaran quiénes eran y cuáles eran sus experiencias en los Estados Unidos. Este fue uno de los objetivos de la compañía y así se conserva.

 

En una época los bailarines, para ingresar a la compañía, debían poseer una buena preparación en técnicas de jazz, de danza clásica y de danza moderna, ¿cómo es ahora?

 

Igual. Se precisan muchas técnicas para estar en la compañía, desde danzas africanas hasta danza moderna, ballet y jazz. Tenemos a muchos de los más versátiles bailarines del mundo y algunos espectadores suelen sorprenderse porque vienen con una idea previa. Luego se olvidan de esa idea al ver las muchísimas otras cosas que nuestros bailarines pueden hacer; es que realmente pareciera que hay distintas compañías en un mismo escenario y en un mismo momento. Trato de elegir repertorios versátiles para que el público tenga opciones.

 

¿Cómo decidió el programa que la compañía traerá a Sudamérica?

 

En primer lugar quería mostrar precisamente esta versatilidad de la que le hablaba. Incluí una obra de Garth Fagan, coreógrafo ganador de un Tony. Su título es From Before y en ella Fagan celebra sus orígenes caribeños uniendo la danza moderna con un bello uso del torso, de la columna y del taconeo de los pies sobre el suelo. También llevamos Petite Mort , de Jiri Kylian (nota: coreógrafo checo, uno de los más grandes de las últimas cuatro décadas). Es una obra maravillosa, sumamente poética. A este tipo de cosas me refiero: los bailarines interpretan Petite Mort y después obras tan diferentes como Revelations o Grace , que fue creada por Ron Brown y en la que él utiliza influencias africanas de una manera maravillosa y muy novedosa. Es su forma de agradecerle a Alvin Ailey la creación de esta compañía y a Judith Jamison por continuar la tradición. Es gracias a ellos que coreógrafos como Ron Brown y yo podemos tener una plataforma desde donde contar nuestras historias. De eso trata Grace .

 

UNA DECLARACION POLITICA

 

¿Podría decir algo sobre su propia carrera, sobre su forma de crear?

 

Mi principal motivación es la fascinación que me produce la gente. Todos los días ocurren cosas terribles en el mundo y también, por supuesto, en nuestras vidas personales; y aun así tenemos la audacia de despertar al día siguiente, mirar a alguien a los ojos y decirle “buenos días”. Las obras que creo son un homenaje a la maravillosa resistencia del espíritu humano.

 

Como no podía ser de otra manera, “Revelations” está incluida en el programa que se verá aquí. Alguien ha dicho que esta obra fue llevada al escenario más veces que “El Lago de los Cisnes”, lo que por supuesto es una exageración. Sin embargo, ¿qué encuentra el público y también la compañía en “Revelations” para que sea presentada sin interrupciones desde hace más de cincuenta años?

 

Revelations es en primer lugar una obra maestra. Por otra parte, cuando los bailarines la interpretan, y no importa si ya lo han hecho cientos de veces, es como un ritual. Y una vez que se ingresa al ritual éste comienza a poseerte. Los bailarines están conectados con el pasado, con el presente y con el futuro porque son conscientes de la historia de la obra, de la razón por la que la obra existe y de aquello que trata de expresar: las experiencias de sus madres y sus padres, sus abuelos, sus bisabuelos, sus tatarabuelos. Todas esas personas que tuvieron que soportar el racismo o la esclavitud. Así que no se trata sólo de bailar una danza, sino de hacer una declaración social y política.