Sujeto en cuestión
De interés general

Sujeto en cuestión. De interés general

 

 

19/07/2013 Fuente lanacion. La socióloga Leonor Arfuch encuentra en la relación entre recuerdo, relato y experiencia una clave para la comprensión de lo biográfico, sobre todo en sucesos traumáticos

 

"Pienso, luego existo." La formulación cartesiana, de apariencia tan simple, impuso una revolución inédita sobre cada una de las fibras del pensamiento occidental: la justificación -teológica, ética, política- debía partir ahora del propio sujeto. Casi cuatro siglos más tarde, esta primera evidencia de las Meditaciones metafísicas de René Descartes pervive de manera heterodoxa. Memoria y autobiografía, de Leonor Arfuch, llega para mostrar en qué medida la relación entre memoria, relato y experiencia -particularmente de aquellos sucesos considerados "traumáticos"- implica una lectura alternativa de lo biográfico. Ya no se trata de la presentación de un yo encapsulado sino de enfrentar los desafíos de sus fracturas: las marcadas por la historia pero también por identidades complejas.

 

A lo largo de siete capítulos, Arfuch -socióloga, profesora e investigadora de la Universidad de Buenos Aires- despliega su análisis sobre el modo en que lo testimonial se ha alterado radicalmente. Y lo hace a través de un recorrido que la lleva a detenerse en las estrategias con las que el arte sostiene y a la vez disloca esa centralidad de la primera persona. Libros de W. G. Sebald e intervenciones artísticas como las de Christian Boltanski se cruzan aquí con discusiones locales como la desplegada alrededor del papel de la lucha armada durante la década del 70.

 

Uno de los capítulos clave del volumen es el dedicado a contrastar la manera en que dos textos centrales sobre la historia reciente argentina evidencian no sólo el papel de lo biográfico en la reconstrucción del pasado, sino también cómo se ejecuta la perspectiva de género. Se trata de Ese infierno. Conversaciones con cinco mujeres sobrevivientes de la ESMA, de Munú Actis, Cristina Aldini, Liliana Gardella, Miriam Lewin y Elisa Tokar, y de Poder y desaparición, de Pilar Calveiro. Nos enfrentamos aquí, argumenta Arfuch, a dos posiciones enunciativas contrapuestas: una primera persona colectiva en el primer caso y una tercera persona austeramente académica en el volumen de Calveiro. Estas narrativas de mujeres que sufrieron en carne propia desaparición y tortura durante la última dictadura refieren de distintas maneras a un sujeto fracturado.

 

Esa misma diversidad es la que recorre el análisis de Los anillos de Saturno y Sobre la historia natural de la destrucción del escritor W. G. Sebald. Es, otra vez, la subjetividad atravesada por temporalidades plurales y poco complacientes de la lectura literal del principio cartesiano. Hay allí interrelaciones, afectos, rutinas donde la biografía interpela exigiendo modos activos de percepción artística.

 

Ya en El espacio biográfico (2002) Arfuch se había ocupado de mostrar la transformación sufrida por la subjetividad contemporánea. Aquí, once años después, vuelca su mirada sobre casos específicos vinculados a la representación de acontecimientos extremos. El pasado para Arfuch es, esencialmente, abierto y subjetivo. No hay firmeza como en la piedra de toque que reclamaba Descartes, sino incertidumbre. Configuradora de las experiencias del presente y también configurada por ellas, la reconstrucción del pasado no obliga a ocultar la subjetividad como falla sino a exponerla frontalmente en el debate público. Es, en definitiva, asumir con todas sus consecuencias que los llamados usos políticos de la historia no sólo son legítimos, sino que resultan -guste o no- la única forma significativa de testimoniar sobre los pasados.

 

 

Memoria y autobiografía

Leonor Arfuch