Rusia afirma que halló drogas en el barco de Greenpeace capturado
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Rusia afirma que halló drogas en el barco de Greenpeace capturado

 

 

10/10/2013 Fuente lanacion. Es el buque Arctic Sunrise, que tripulaban los activistas detenidos desde septiembre y entre los que hay dos argentinos cuya acusación podría agravarse; la ONG denunció una maniobra en su contra

 

Todo cambió de repente. Y se complica mucho. La situación de los 30 activistas de Greenpeace detenidos en Rusia, entre los que se encuentran dos argentinos, Camila Speziale y Hernán Pérez Orsi, viró de manera imprevista cuando los investigadores rusos informaron ayer que encontraron drogas en el barco Arctic Sunrise en el cual se movían los miembros de esta organización ambientalista.

 

La versión oficial de las autoridades rusas fue desmentida por la ONG, que, inmediatamente, habló de una maniobra para implicar a los activistas en delitos más graves que el de "piratería" para comprometerlos en hechos con penas más severas.

 

"Durante la inspección del barco se encontraron sustancias narcóticas, presuntamente opiáceas y morfina. Se estudia el origen de estas sustancias y qué uso se les daba", señaló Vladimir Markin, vocero del Comité de Instrucción de Rusia.

 

Además, agregó que también se encontraron equipamientos tecnológicos sospechosos que, según afirmó, tenían un "doble propósito" -civil y militar- y que podrían haber sido utilizados "no sólo para fines ecológicos". Según Markin, de acuerdo con los datos obtenidos en el curso de la investigación "se prevé corregir los cargos ya presentados" contra los activistas , que ya están acusados por piratería, lo cual puede llevarlos a cumplir penas de entre 10 y 15 años de cárcel. "Para los investigadores es evidente que a varios de los imputados se les presentarán acusaciones por delitos más graves", subrayó.

 

Desde hace 15 días, los 30 ecologistas están detenidos en Murmansk, luego de haber participado de una protesta pacífica a bordo del Arctic Sunrise contra una plataforma petrolera ártica de Gazprom en defensa del medio ambiente en una de las zonas críticas del planeta.

 

Los detenidos fueron acusados en principio de "piratería" a la espera de que el 24 de noviembre próximo se definiera su situación procesal. Ahora, el nuevo escenario podría transformarse en una verdadera pesadilla para Speziale y Pérez Orsi, que permanecen detenidos en Rusia.

 

El abogado de Greenpeace en Rusia, Mikhail Kreindlin, deslizó que las autoridades rusas podrían haber armado la escena. "El barco se encuentra desde hace mucho tiempo sin tripulación... y bajo control de gente desconocida", dijo. "No quiero acusar a nadie, pero allí se podría encontrar cualquier cosa", agregó, en alusión a que alguien podía haber colocado las sustancias.

 

Además, Greenpeace Rusia se preguntó a través de su cuenta de Twitter "qué más pudieron haber colocado en el barco", ya que el rompehielos se encuentra sin sus tripulantes desde el 24 de septiembre pasado, cuando los activistas fueron trasladados a tierra y detenidos.

 

"Nuestras normas internas prohíben cualquier uso de sustancias narcóticas", dijo el abogado de la ONG a la agencia Interfax. "Cualquier reclamo sobre la aparición de drogas ilegales es una mentira, pura y simple", señaló la ONG a través de un comunicado difundido desde Holanda y agregó que supone que "las autoridades rusas hacen referencia a los suministros médicos" que sus barcos llevan en virtud de la legislación marítima.

 

Es que el comité investigativo informó haber hallado a bordo del Arctic Sunrise sustancias estupefacientes, presumiblemente morfina y semillas de opio, y equipamiento con tecnologías "duales", o sea civiles y militares. En este contexto confuso y muy delicado para los activistas, el director ejecutivo de Greenpeace Internacional, Kumi Naidoo, pidió un encuentro urgente con el presidente Vladimir Putin y ofreció permanecer en Rusia como garante de buena conducta si los activistas son liberados bajo fianza. Naidoo envió una carta donde además expresó: "También le pido respetuosamente que los dos periodistas independientes, que no son miembros de Greenpeace, sean liberados en forma inmediata".

 

El Kremlin respondió que no recibió la misiva, mientras que entre los analistas circula la hipótesis de que lo afirmado por Putin ("no son piratas aunque violan la ley internacional") no necesariamente prenuncia una resolución rápida y positiva del caso. Algunos analistas sugieren que Rusia quiere enviar un mensaje internacional respecto de las acciones ambientalistas en la zona del Ártico y que Putin podría aprovechar la ocasión para demostrar a Occidente que la justicia rusa es independiente.

 

Mientras tanto, en la Argentina, la historia de Speziale y Pérez Orsi movilizó a parte de la opinión pública y al Senado en particular, que reclamó ayer la "pronta liberación" de los ambientalistas. En una declaración aprobada por unanimidad y sin debate, la Cámara alta manifestó su "preocupación" por la detención. El presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores y Culto, Daniel Filmus (FPV), junto con su par Marcelo Guinle (FPV), recibió a los familiares de Speziale y Pérez Orsi, que sólo anteayer pudieron hablar telefónicamente con los activistas detenidos.

 

De la pasión a la pesadilla

 

Los argentinos que están detenidos en Murmansk

 

 

Camila Speziale // Activista Fotógrafa

Tiene 21 años, vive en el barrio porteño de Caballito y es voluntaria de la entidad ambientalista desde hace 4 años. Cumplía en el barco Arctic Sunrise su primera misión y su especialidad es la fotografía. La joven estaba muy emocionada con su participación en una misión como la de Rusia, dado que la campaña "Salvá el Ártico" cuenta con la adhesión de más de 4 millones de firmas en todo el mundo

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Hernán Pérez Orsi // Activista y Marino Mercante

Es marplatense, tiene 40 años, es socio de Greenpeace y había participado de otro tipo de misiones. Es marino mercante y también es jurado de la Asociación Internacional de Surf. Su mujer, Margarita Malig, planea viajar con la hija de ambos, de apenas un año, a Rusia para acompañar a su marido."En ningún momento me imaginé que esto iba a terminar así", expresó Malig. Una de sus misiones anteriores había sido a bordo del barco Esperanza, que en Canadá se ocupa de interceptar embarcaciones petroleras