Nadie se conoce 5. Quinta entrega
Fuente artelope. Autor Lope de Vega
2005
Oiga.
VELISA
No me diga nada.
FABIO
¿Asperilla se me muestra
de labradora a esta parte?
VELISA
Pues si me quiere más tierna,
vaya a buscarme a la Corte.
FABIO
2010
Bien dice, que allá profesan
blandura para pedir,
y en agarrando, aspereza.
Jornada III
FILENO, CLARINO y BATO, villanos.
BATO
Que la mujer de Felino
parió una niña.
CLARINO
Tan bella,
2015
que pudiera ser estrella
en la frente de algún sino.
FILENO
A la fe que fue dichosa
en parir donde está preso
un príncipe.
BATO
Yo os confieso,
2020
que hay más de alguna envidiosa,
pues el Rey si viene acá
algo le dará también.
FILENO
Felino es hombre de bien.
BATO
Está rico.
CLARINO
Rico está,
2025
que le han dado muchas cosas
después que está en el castillo.
BATO
El es un gentil novillo.
FILENO
¿Qué palabras?
CLARINO
Envidiosas.
BATO
Nunca tuve envidia al bien
2030
que por mal camino viene.
FILENO
Pues ¿qué mal camino tiene
que alguna cosa le den?
BATO
No sé a quién oí decir,
que tener bella mujer
2035
era demanda tener
destas de andar a pedir.
Todos en efeto dan,
porque no hay hombre que vea
visita en casa de fea.
CLARINO
2040
Malicias no faltarán.
Cuando la vuestra era moza
alguno también la vía.
BATO
Era su primo, y podía.
CLARINO
Lindamente se reboza
2045
con un pariente un delito.
FILENO
Anda que no os conocéis,
que lo que en los otros veis
tenéis en la frente escrito.
BATO
Yo he visto alguna mañana
2050
al Príncipe hablar con ella,
y es casada, y no es doncella.
FILENO
Falta ponéis en Diana
por envidias, y intereses.
BATO
Una no, que más han sido,
2055
nueve faltas ha tenido,
pues que pare a nueve meses.
CLARINO
¿Y las vuestras no las veis?
BATO
Pues, ¿cuándo estuve preñado?
CLARINO
Cortesano habéis hablado,
2060
hacéis burla, y ofendéis.
Son muy bellacas costumbres
tirar cañas por los aires,
y en son de decir donaires,
deshonrar con pesadumbres.
2065
Mas dejad faltas ajenas;
¿cuándo el bautismo ha de ser?
FILENO
Hoy, y dicen que ha de haber
colación a manos llenas.
BATO
¿Qué darán al sacristán?
CLARINO
2070
Conforme fuere el padrino.
FILENO
Bueno será.
BATO
Denle vino,
que él perdona el mazapán.
FILENO
Callad, que yo sé algún día
que jugastes al rentoy,
2075
¿qué estuvistes?
BATO
Bueno estoy.
FILENO
Conoceos.
BATO
Harto querría.
CLARINO
El Rey.
BATO
¿Pues vino?
CLARINO
Ya vino.
(Salen el REY y ALBANO.)
REY
Al punto que me avisaste,
y del caso me informaste,
2080
me puse Albano en camino.
Labradores hay aquí.
CLARINO
¿Huese Bato?
REY
Vuelve acá.
¿El Príncipe dónde está?
BATO
Con la parida le vi
2085
debe de haber media hora,
porque está ya levantada
con la muchacha abrazada.
REY
¿Pues tan presto?
BATO
Es labradora
que no son tan melindrosas
2090
como allá las cortesanas,
son fuertes como villanas,
como pobres animosas.
Aún apenas han parido,
cuando, si es menester,
2095
se levantan a poner
la olla de su marido.
REY
Vete.
BATO
Viva su mercé.
Mas que un pleito sin favor,
nunca se le atreva humor,
2100
ni aun una gota en el pie,
ni se le atreva algún día
por los excesos mayores
el Fiscal de los señores,
que llaman aplopejía.
(Vase.)
REY
2105
En fin, ¿mi hijo está como me adviertes
enamorado desta labradora?
ALBANO
Señor a mi lealtad, y a tu servicio
fue justo darte aviso del indicio
que deste amor me ha dado el verlos juntos,
2110
reírse, hablarse, y si verdad te digo,
dar lugar el villano a que la mano
le tome alguna vez.
REY
En fin, villano,
¿será bueno matarle?
ALBANO
¿A qué propósito?
REY
Si Lisardo la habla, me parece
2115
llegado a ejecución este deseo,
que si es verdad, por imposible veo
mi pretensión.
ALBANO
Señor, es ya posible,
respeto de que el parto se acercaba.
y el amor de los dos me ha parecido,
2120
que fue mayor después de haber parido.
Ella estaba en la cama con su hija
hermosa como el sol, mal dije.
REY
¿Cómo?
ALBANO
Y él entraba contento a visitarla,
sentábase a las nueve, y a las doce,
2125
llamándole a la mesa no salía,
pasaba claro el sol del mediodía;
y el Príncipe en la silla sin moverse,
daban las dos, y entraban a atreverse,
Fabio tal vez, tal vez un maestresala,
2130
y a entrambos enviaba noramala.
REY
¿Que eso, Albano, pasó? Mi mal es cierto,
pluguiera a Dios, que nunca yo intentara
prender a Celia.
ALBANO
¿Quién imaginara
que había de amar aquesta labradora,
2135
y por ella olvidar tan gran señora?
REY
¿Quién vio que yo la amaba y conquistaba
con la plata que ves, perlas, y oro,
perdiendo a cuanto soy honra, y decoro?
Yo sabré la verdad.
ALBANO
¿De qué manera?
REY
2140
Agora lo verás, pues viene a verme.
(Salen el príncipe LISARDO y FABIO.)
LISARDO
Aquí tienes, señor, tu humilde hechura.
REY
Levántate Lisardo, que obligado
de tu humildad, ya quiero que estés libre,
y que luego te vayas a la Corte.
LISARDO
2145
Recibo la merced, que el amor tuyo
a mi obediencia intenta, mas no quiero
darte ocasión, para pensar que a Celia
estimo como piensas, porque estimo
tu gusto más, y quiero que le tengas
2150
en casarme, señor, y en darle al Reino.
Ya no me reñirás, ya es acabado
aquel amor, que sólo me ha quedado
tal arrepentimiento, que no creo
que fue jamás tan grande mi deseo.
2155
Entra a verla parida, pues te he visto
por lo que tú la quieres, y le debo,
que en aquesta prisión me ha regalado,
y hoy quiere bautizar su bella hija,
y es justo que yo acuda a darla gusto,
2160
pues siendo cosa que amas, es tan justo.
(Vase.)
REY
¡Fabio, Fabio!
FABIO
¿Qué me mandas?
REY
¿Qué es esto?
FABIO
La obligación
a cosas que tuyas son.
REY
Bueno, en disparates andas,
2165
¿Lisardo tiene juicio?
¿A la Corte no verá,
que por él tan triste está?
FABIO
Pienso que el piadoso oficio
de hallarse presente a ver
2170
hacer aqueste bautismo
le detiene, o que tú mismo
señor, le vienes a hacer.
Es de un hijo discreción
estimar, y siempre es justo
2175
lo que a su padre da gusto.
REY
Pues tiénesme en opinión,
¿qué había de querer más
que gustar de ver agora
una simple labradora?
FABIO
2180
Y tú en opinión estás,
¿qué Lisardo ha de querer
más que reír y burlar
con mujer que va a labrar
al campo?
REY
Y se echa de ver
2185
en lo que labra y cultiva.
FABIO
Deste bautismo me han hecho
mayordomo, y ya sospecho
que quieren que se aperciba.
Voy a poner en razón
2190
las fuentes y el mazapán,
prevenir el sacristán,
porque no haya excomunión,
que sin ocasión ninguna
son sus condiciones tales,
2195
que por deuda de dos reales
me echará de la tribuna.
(Vase.)
REY
Albano, esto va perdido,
parte a la Corte y dirás
al duque Arnaldo que vas
2200
por lo que has visto y oído
por Celia a traerla aquí,
di que le dé libertad.
ALBANO
¿Qué dices?
REY
Fue crüeldad
prenderla y tratarla así.
ALBANO
2205
¿Qué dirá el Príncipe?
REY
En viendo
cosa que tanto ha querido,
pondrá a Diana en olvido;
ya con Celia me defiendo
a quien tanto aborrecí.
ALBANO
2210
¿No quieres consejo?
REY
No,
que desde que me faltó
razón, no hay consejo en mí.
ALBANO
No he visto rey sin consejo.
REY
Ni yo más necio criado.
ALBANO
2215
Siempre es necio el que es honrado.
(Aparte.)
Mal me va después que dejo
lisonjas y adulaciones,
que no se puede medrar
sin mentir, y sin tratar
2220
deslealtades y traiciones.
(Vase.)
REY
Qué fácil es reprehender el daño
que está fuera de sí, por mí lo siento;
yerro en lo mismo que reñir intento,
y viendo la verdad, amo el engaño.
2225
Ciego a mi propio error miro el estraño,
y en vez de tener del conocimiento
lo que niego a mi mismo pensamiento,
quiero que en otros tenga desengaño.
En el espejo donde puedo verme,
2230
miro el ajeno error, que así destierra
amor a la razón que ha de valerme.
Burlo del que cayó, y estoy en tierra,
y conozco por mí sin conocerme,
que nadie se conoce cuando yerra.
(Sale CELIA de parida, con tocado, cinta por la frente; y VELISA.)
CELIA
2235
Sea vuestra Majestad
bienvenido.
REY
Oh mi Diana,
¿con tal salud, y hermosura
de la cama te levantas?
CELIA
A tu servicio, señor,
2240
como tu hechura, y tu esclava,
con una criada más,
que te sirva, y que has de honrarla
hoy con sacarla de pila;
pues cuando los Reyes andan
2245
con humildes labradores
por las riberas a caza,
ya parece que con ellos
se truecan, si no se igualan;
que allá en las Cortes son otros
2250
entre las doradas salas,
donde tiene la grandeza
la silla de su arrogancia,
digo de su ostentación.
REY
¿Quién te dijo esa palabra?
2255
Que esa palabra no es
de las menos cortesanas.
CELIA
Ya lo soy yo desde el día
que su Majestad Cesárea
vino a hacer Corte el aldea,
2260
y palacios las cabañas.
REY
Tu ingenio es tal, que lo creo.
Ya me parece que hablas
de otra suerte.
CELIA
Sí señor,
siempre habla mejor quien gana;
2265
ando de dicha, y así
parece que digo gracias,
porque todas lo parecen
a los que están de ganancia.
A la mujer no hay más dicha
2270
que tener marido, y casa
a su gusto, y en su estado
cuatro cosas necesarias.
Salud que esto es lo primero,
hijos, regalos, y galas.
REY
2275
¿Y todo lo tienes?
CELIA
Todo
si no se me desbarata;
mas ya no hará, si Dios quiere.
REY
En fin, Diana, ¿te agrada
tu marido?
CELIA
Sumamente.
REY
2280
¿Sumamente?
CELIA
Bien reparas,
pues si sumamente dije,
he puesto suma en sus gracias,
siendo sus gracias sin suma.
REY
Sólo en eso eres villana,
2285
pues te pagas de un villano.
CELIA
Después que entraste en su casa
la ennobleciste de suerte,
que con los Reyes se iguala.
¿Qué le falta para rey?
REY
2290
¿A quién?
CELIA
¿Mas por qué dilatas
el hacerme esta merced?
REY
Que tú gustes dello basta,
que me debes más que piensas.
CELIA
Señor, si esta niña sacas
2295
de pila, que lo merece
por la inocencia, y la cara,
seremos parientes luego.
REY
¡Qué discreción! ¿Quién pensara
que ésta supiera decir
2300
con tan fáciles palabras,
que será mía después
que aquesta merced le haga?
Ahora bien, pues ya estás buena,
quiero que a la Corte vayas,
2305
daré un oficio a tu esposo.
CELIA
Dame tu mano.
REY
Levanta.
Voy a esperar a la Iglesia,
di que el Rey en ella aguarda
la niña, de quien tú quieres
2310
que sea padrino.
(Vase.)
CELIA
Reparta
todos sus bienes el cielo
en las paces, y en las armas,
en tu sucesión, señor,
de suerte que en Alemania
2315
tengan las tuyas por orla
las Águilas coronadas.
¿Qué te parece, Velisa?
(Salen el PRÍNCIPE y FABIO.)
VELISA
Que ya tus trabajos paran,
que ya se acercan tus dichas,
2320
y logran tus esperanzas.
LISARDO
No sé si estamos seguros.
CELIA
¿De qué suerte, mi señor?
LISARDO
No tiene palabra amor.
FABIO
Hace amor muchos perjuros.
LISARDO
2325
Al Rey le ha pesado ya
de la prisión de Dorista,
que como en fin te conquista,
celoso de verme está.
Y de manera le veo
2330
proseguir en este error,
que ha de sentir nuestro amor
la fuerza de su deseo.
CELIA
No hará, porque quiere agora
que vaya a la Corte yo.
LISARDO
2335
¿Y eso ha de ser?
CELIA
¿Por qué no?
LISARDO
¿Pues cómo si el Rey te adora?
CELIA
Yo me sabré defender.
LISARDO
Ese es engaño animoso;
contra un hombre poderoso
2340
no hay resistencia en mujer.
FABIO
La justicia dicen que es
como la tela de araña,
que una mosca se enmaraña
adonde muere después.
2345
Pero un valiente animal
la tela rompe y traspasa;
lo mismo en defensa pasa
de una mujer principal.
El pobre quédase aparte,
2350
pero el rico, y el señor
rompen la puerta al honor,
y pasan de la otra parte.
LISARDO
Bien dice, no hay resistencia,
ni quien sus gustos impida,
2355
porque quitarán la vida
a quien faltare paciencia.
FABIO
¿Sabes cómo han enviado
por Dorista, para hacer
que la vuelvas a querer?
LISARDO
2360
Qué pesadumbre me has dado;
pero Celia está segura
de que es Celia, y que es mi vida,
que esotra Celia es fingida.
CELIA
¿Puede haber mayor locura?
2365
Por quien pretendió quitarte,
por quien tanto te ha reñido,
por quien dice que ha tenido
la culpa de no casarte,
¡por esa envía!
LISARDO
¿Qué importa,
2370
si eres tú la verdadera?
CELIA
Lo que tu lealtad espera,
mi amor me vence, y reporta.
Bien sé yo que no la quieres.
LISARDO
Palabra te da mi amor
2375
de no hablarla.
CELIA
Eso es rigor.
LISARDO
Pues óyeme, y no te alteres.
Primero que mi amor, Celia divina,
olvide obligaciones tan notables,
los polos de los cielos variables
2380
vendrán al suelo con fatal ruina.
Primero el mar adonde el sol declina
le verá amanecer, y sus mudables
ondas sin movimiento favorables,
al pecho que romperlas determina.
2385
Primero se verá roto y deshecho
el primer movimiento, en que está asida
la ardiente esfera del supremo techo;
y de tinieblas se verá vestida.
que dejes tú de ser alma en mi pecho,
2390
luz en mis ojos, y en mi aliento vida.
CELIA
Primero, mi Lisardo, habrá firmeza
en la mudable rueda de Fortuna,
y no se quejarán de envidia alguna
la virtud, el ingenio, y la nobleza.
2395
No tendrá lisonjeros la grandeza,
ni la vida mortal muerte ninguna,
no pedirá su luz al sol la luna,
ni será desdichada la belleza.
Primero se verá que se concluya
2400
mi amor inmenso, el monte más pequeño
al impíreo arrimar la frente suya.
Y el agravio tendrá seguro sueño,
que deje yo de ser esclava tuya,
ni tengan estos ojos otro dueño.
(Salen los labradores que pudieren, con fuentes y aguamaniles; los músicos de villanos bailando. ALBANO y el REY detrás del que trae la niña.)
[TODOS]
2405
(Cantan.)
Que si linda era la parida,
por mi fe que la niña es linda.
La parida linda era,
pero la niña no hallara
belleza que la igualara,
2410
si tal madre no tuviera.
Bien lo dijo la partera
en viéndole la barriga,
por mi fe [que la niña es linda.]
BATO
Famosamente lo ha hecho
2415
la muchacha.
FELISA
Con qué risa
estaba mirando al Cura
puesta de pies en la pila.
BATO
¿Sabéis qué noté?
CLARINO
¿Qué fue?
BATO
Que cuando el Rey la tenía
2420
sobre la pila desnuda
más agua dejó que había.
FELICIANO
¿Qué sería la ocasión?
BATO
Miedo que del Rey tendría.
Que da gran temor un rey.
CLARINO
2425
¿Temor en aquella niña?
BATO
¿Por qué pensáis que al llegar
a los hombres la justicia
no dice que es alguacil?
Porque nadie se tendría,
2430
mas dice: téngase al Rey,
y luego el temor obliga
a respetar aquel nombre,
no porque el otro lo diga.
FELICIANO
¿Vistes qué de sal le puso
2435
el Cura?
CLARINO
Bien se entendía
la ceremonia.
FELICIANO
A la fe
que si algunas cuando chicas
las salasen, que después,
quizá no se dañarían.
REY
2440
Aquí está el Príncipe.
ALBANO
Aquí
está también la parida.
REY
¿Siempre juntos? ¡Caso estraño!
CELIA
Mercedes tan infinitas,
¿quién las pagará, señor?
REY
2445
Diana, quien las reciba
con ánimo de pagarlas.
CELIA
Soy yo la pobreza misma.
ALBANO
Donde está tu esposo.
FELICIANO
Aquí
con el alma agradecida
2450
de lo que por todos haces.
REY
Doy desde agora a la niña
dos mil ducados de renta,
para que podáis vestirla,
y palabra de tratarla
2455
como a mi nieta podría
si la tuviese.
FELICIANO
Bien puede
hacerlo su Señoría,
pues ya somos sus parientes.
REY
Haced muchas alegrías,
2460
y llevalda a descansar.
BATO
Par Dios que en toda la villa
se han de poner luminarias.
FELICIANO
¿No habrá mañana sortija?
BATO
Y como yo salgo a ella,
2465
porque tengo una pollina
que corre como un corchete.
CLARINO
Toca, Pascual, y relincha.
[TODOS]
(Cantan.)
Que si linda era la parida,
por mi fe que la niña es linda.
(Vanse todos. Y queda el REY con ALBANO.
REY
2470
¿Cómo tarda Celia, Albano?
ALBANO
Espántome de que sea
tan breve el camino, y vea
el Duque, si está en su mano,
lo que esto importa a tu gusto,
2475
y que se detenga allá;
pero ya a la puerta está.
REY
Llego a templar mi disgusto.
Aquí me quiero esconder,
tú llama al Príncipe luego.
(Salen el duque ARNALDO y DORISTA, y el REY se esconde.)
DORISTA
2480
Alegre, y sin gusto llego.
ARNALDO
¿Eso cómo puede ser?
DORISTA
Porque nace mi alegría
de que al Príncipe veré,
mi pena, de que no sé
2485
si el Rey a llamar me envía
para mayores agravios.
ARNALDO
Si el Rey vengarse quisiera,
con otro término fuera
como lo intentan los sabios.
2490
Pero yo sé que te estima,
y que te quiere casar.
ALBANO
La mano me puedes dar.
DORISTA
El verte humilde me anima:
¿vengo a morir o vivir?