Automotrices se anticiparon al "cerrojo": avanzaron con récord de impo
Comercio Exterior

Automotrices se anticiparon al "cerrojo": avanzaron con récord de importaciones para hacerse de stock

 

 

09-02-2014 Fuente iprofesional. Antes de que el Gobierno avanzara con las últimas restricciones al ingreso de 0Km del exterior, las compañías del sector pisaron el acelerador a fondo. Así, hubo empresas que lograron incrementar sus operaciones en más de un 300 por ciento. Ranking de marcas y modelos

 

Pese a las amenazas oficiales de "cerrar" las fronteras; pese a las quejas de las automotrices de que hubo meses que tuvieron más de 40.000 vehículos varados en el puerto de Zárate; pese a que había una obligación de compensar importaciones con exportaciones por el mismo valor; pese a que el secretario de Comercio Interior era el intimidante Guillermo Moreno y pese a que el Gobierno había asegurado que se cuidarían los dólares para privilegiar la importación de bienes de capital e insumos... 2013 cerró con un récord de importaciones de autos 0Km.

 

En sintonía con la marca histórica de patentamientos lograda el último año, las compañías del sector, contra todos los pronósticos de las consultoras privadas, lograron ingresar más de medio millón de unidades, superando en un 20% la marca alcanzada en 2012.

 

Al fin y al cabo, la necesidad de poder mostrar alguna cifra récord en medio de una economía alicaída terminó sepultando al relato.

 

Claro que esta fiesta de autos importados tuvo un altísimo precio para el Gobierno: en 2013 se resignaron casi u$s7.250 millones, que luego no lograron ser compensados en su totalidad por las exportaciones de autos a Brasil, una pésima noticia para la administración K, considerando que el déficit estructural de esta rama de actividad, hasta 2012, sólo se debía al rojo en el comercio de autopartes y no al de autos, que hasta ese entonces aportaba más dólares que los que aspiraba de la economía.

 

Según la consultora Abeceb, la proyección de balanza comercial trazada a inicios de 2013 estimaba un rojo de u$s9.000 millones por piezas y componentes para fabricar autos y un superávit de u$s1.000 millones por los envíos de unidades a Brasil.

 

"El problema fue que, en los últimos meses, las importaciones de autos se dispararon y esto revirtió la ecuación. Lo que era un superávit pasó a ser un déficit", destacó Gonzalo Dalmaso, economista de la consultora.

 

Así las cosas, el rojo de esta industria, que teóricamente iba a ubicarse en los u$s8.000 millones, cerró en 2013 en casi u$s9.000 millones. Esto equivale al nivel de divisas que, se estima, perderá el Banco Central a lo largo de todo este año.

 

La fiesta que antecede a la tormenta

Enero fue un mes duro para las automotrices: primero, por el conocido "impuestazo" a los bienes suntuarios, que está llevando a que los precios de los 0Km estén dando saltos de hasta el 90%. Luego, por la obligación oficial de que las automotrices reduzcan sus importantes un 20% si fabrican en el país y un 27% si son sólo distribuidoras.

 

La medida, en un principio, se aplicaría sólo durante este primer trimestre del año. Sin embargo, por lo bajo, los rumores que corren en el sector es que la misma se haría extensiva al menos hasta junio próximo.

 

Claro que, antes de que llegara la "tormenta", las automotrices aprovecharon la "ventana" abierta para hacer explotar el ritmo de importaciones.

 

"Basta ver las cifras para entender que fue una verdadera fiesta importadora. Mientras que hubo sectores industriales complicados, con faltantes de piezas e insumos, el ingreso de vehículos de todas las gamas de precios se disparó", aseguró un alto directivo del sector importador que pidió estricto off the record.

 

En este contexto, un informe elaborado por la consultora Market Research & Technology, en exclusiva para iProfesional, revela las fuertes tasas de crecimiento para este tipo de operaciones.

 

De las más de 25 marcas que operan en el mercado, 21 de ellas incrementaron sus compras al mundo, con tasas que se ubicaron entre el 6% y el 325%, lo que le permitió a muchas compañías recomponer stocks y anticiparse al pedido oficial de "achicar las cuentas".

 

Del informe de MRT se desprende que el top 5 de empresas que más aumentaron sus importaciones de 0Km el último año estuvo conformado por Chrysler, Peugeot, Alfa Romeo, Land Rover y Nissan.

 

Las marcas de lujo, a tope

Al analizar la performance que exhibieron las compañías del segmento premium, que son las más afectadas por el nuevo "cerrojo" y por el "impuestazo", se observa que, en general, las importaciones en términos de divisas crecieron por encima de los volúmenes.

 

Esto implica que en 2013 privilegiaron el ingreso y la comercialización de unidades más caras o más equipadas, una estrategia de negocios que, finalmente, terminó moviéndose en sentido totalmente opuesto a lo que los expertos preveían a inicios del año, cuando se estimaba que, "plan 1 a 1" mediante, las compañías iban a tratar de hacerse de más stock de versiones más económicas.

 

A la hora de trazar una radiografía por marca, cabe destacar el caso de BMW, que el año pasado ingresó más de 3.000 unidades al país por cerca de u$s83 millones, un 17% más que en 2012.

 

¿Cuál fue el fuerte de su negocio? Básicamente dos líneas: el Serie 3 -que en sus cinco versiones acapararon más del 50% del volumen importado y succionaron cerca de u$s41 millones-, y la versión 535 de su Serie 5, que le demandó un desembolso de divisas cercano a los u$s5 millones.

 

Este buen ritmo de importaciones se vio reflejado en las ventas: la compañía alemana cerró 2013 con un salto en el nivel de patentamientos del 81%.

 

Sin embargo, todos sus modelos recibieron el impacto directo del impuestazo, lo que obligará a la compañía a realizar una "reingeniería" y replantear su estrategia de negocios en el país.

 

Desde la firma ya confirmaron que el tributo "sin duda afectará nuestro volumen de ventas, tanto de BMW y Mini como del resto de los competidores. Tendremos que trabajar en el sentido de adecuar los equipamientos y ofrecer modelos más accesibles, teniendo en cuenta que el impuesto eleva mucho el precio final del vehículo".

 

Otra firma que deberá replantear su negocio es Mercedes Benz, que cerró el año pasado con una explosiva suba en su nivel de importaciones, que alcanzó los u$s135 millones, lo que implicó un alza del 107%, en tanto que en volúmenes logró nacionalizar cerca de 5.700 vehículos.

 

Esta tasa de crecimiento la posicionó en el séptimo lugar en el ranking general y la ubicó en el primer puesto entre las marcas de lujo.

 

Sin embargo, el "efecto impuestazo" difícilmente no afecte sus niveles de ventas. No es para menos: los modelos más accesibles de la marca, como el A200 y el B200, se encarecieron un 50% y ya superan los u$s60.000, en tanto que en la gama de lujo, el Clase S, que costaba u$s234.000 ya alcanza los u$s400.000 (+70%).

 

En este contexto, la compañía confirmó que para fines de este año lanzará en la Argentina la nueva generación del Clase C, el modelo de tracción trasera más económico del portfolio.

 

En lo que respecta a la marca alemana de los cuatro anillos -que cerró 2013 con 7.500 unidades vendidas, un 19% más que el año anterior-, generó importaciones por casi u$s160 millones, lo que implicó un alza del 10%.

 

El modelo más traído del exterior, en divisas, fue el Q3, en sintonía con el creciente boom que experimentó el segmento de los SUV en la Argentina. Le siguieron el A3 y el exitoso A1. Estas tres líneas explicaron el 50% de todas las importaciones de la marca.

 

Entre las generalistas, también se producirán cambios tras la implementación del nuevo tributo.

 

Tal es el caso de Peugeot, compañía que desembolsó unos u$s376 millones el año pasado para ingresar vehículos al país, lo que representó un salto del 320% respecto a 2012.

 

La marca francesa posee pocos modelos expuestos al impuestazo, que al ser de alta gama tienen una baja participación en su portfolio: El 5008, el 4008 y el RCZ le demandaron importaciones por u$s20 millones, es decir apenas un 6% del total. En volúmenes, fueron 1.472 unidades, un 5% frente a las casi 28.000 que del exterior.

 

En tanto, para Honda, a contramano del grueso de la industria, 2013 no fue su mejor año: sus ventas cayeron 24% y esto se vio reflejado en sus niveles de importaciones, que descendieron un 18%.

 

En concreto, ingresó al país cerca de 11.200 vehículos, casi 200 menos que en el período anterior. Las mayores bajas correspondieron al Fit y a la camioneta CRV, que llega desde México, desde donde importó 1.000 unidades menos debido a la imposición de cupos en el intercambio con este país.

 

Este modelo, junto con el Accord, son los dos vehículos alcanzados por el impuestazo. Ambos sufrieron fuertes subas de precios, cercanas al 95% respecto de los valores vigentes en diciembre, lo que hace prever un nuevo achicamiento en el nivel de importaciones para estos modelos 2014.

Volkswagen, en tanto, fue la segunda marca que más 0Km importó en términos de divisas, con operaciones por unos u$s1.221 millones, un 6% más que en 2012. Lógicamente sus modelos más populares fueron los que se ubicaron al tope del ranking: el Gol y el Voyage, por ejemplo, explicaron el 55% de las compras totales al mundo.

 

En tanto, los vehículos que ingresaron en la categoría de "bienes suntuarios" y que pasaron a estar alcanzados por el tributo, explican una porción menor de sus operaciones.

 

En este listado entraron modelos como Tiguan, Touareg, Sharan, Scirocco y Passat, así como también una versión del Vento, el 2.0 Tsi. Su opción más económica pasó a costar $337.000, casi 30% más que en diciembre pasado.

 

Si bien las importaciones de varios de estos modelos venían en baja, el impuestazo es una mala noticia para el futuro la Touareg, cuyas importaciones se habían disparado un 80% el último año, con cerca de 170 unidades ingresadas al país por un valor de u$s7,2 milllones.

 

Desde Abeceb adelantaron que, tras las marcas récord logradas en 2013, las compañías deberán adaptarse al nuevo escenario, marcado a fuego por las mayores cargas tributarias y por el "efecto devaluación", que está encareciendo con fuerza los valores en pesos.

 

Así las cosas, las grandes perdedoras este año serán las marcas cuyo portfolio depende de los 0Km del exterior, dado que las importaciones podrían caer a un ritmo superior que en el caso de las llamadas "generalistas".

 

Cabe destacar que en 2013, por el "dólar barato", los vehículos nacionales perdieron terreno hasta tocar un share del 38,6%. Frente a esta nueva realidad para el sector automotriz, desde Abeceb estiman que volverán a recuperar el terreno perdido y que su participación este año subirá hasta el 42 por ciento.