Soneto de amor XXV
de William Shakespeare

Soneto de amor XXV

 

 

Autor: William Shakespeare

 

Que los favorecidos por los astros

de honores y de títulos se ufanen;

yo, que la suerte priva de esos triunfos,

hallo mi dicha en lo que más venero.

Los favoritos de los grandes príncipes

abren al sol sus hojas cual caléndulas,

y su orgullo sepultan en sí mismos

pues los abate un ceño que se frunce.

 

El célebre guerrero laborioso,

derrocado una vez tras mil victorias,

es del libro de honores suprimido

 

y de su gesta lo demás se olvida.

Feliz de mí, que amando soy amado,

y ni cambiar ni ser cambiado puedo.