Zárate, una ciudad copada por los asaltos y las drogas
En ocho meses, los vecinos se movilizaron en 58 marchas contra la ola delictiva que azota esa localidad
22/07/2013 Fuente lanacion. ZÁRATE.- Violentos asaltos, delincuentes con armas de guerra, recursos policiales insuficientes, 64 homicidios en seis años, 58 movilizaciones contra la inseguridad en ocho meses, 14 comisarios sustituidos, vecinos alterados y una ciudad en pleno crecimiento económico. Así se vive hoy en Zárate, a casi 100 kilómetros al norte de la ciudad de Buenos Aires.
Muchos son los habitantes de esta ciudad que añoran los tiempos en los cuales los vecinos se adueñaban de las veredas para charlar, tomar mate y ver jugar a los chicos en la calle. Capital provincial del tango, Zárate es una ciudad-puente al Mercosur, posee estancias turísticas de excelencia y tiene un polo industrial en constante crecimiento. Pero gran parte esa vida está empañada por el aumento de los delitos.
En Zárate, cada día ocurren al menos tres asaltos protagonizados por delincuentes que, según denuncian aquí, están cada día mejor armados y más violentos.
El 90% de los detenidos por delitos en la zona están bajo el efecto de estupefacientes. Según fuentes policiales, ésta sería la razón por la cual los asaltos presentan semejante nivel de agresividad.
"Todos los ladrones aquí están muy armados. No sé de dónde sacarán las armas, pero que las tienen, las tienen", denunció Fabricia González, administradora del grupo Familiares de Víctimas de Zárate.
González decidió crear este grupo en 2007, luego de que su marido, José Luis, fuera asesinado a tiros en una entradera por Oscar Olivera, quien por entonces tenía 16 años.
Hoy, la página del grupo ( https://www.facebook.com/groups/299945993424452/?fref=ts ) se convirtió en un sitio de denuncias, en las que los usuarios relatan, en algunos casos con muchos detalles, cada uno de los episodios de inseguridad que les tocó vivir. Incluso hay algunos testimonios que incluyen materiales fílmicos.
De los 64 homicidios, algunos generaron una gran conmoción dentro de la ciudad, entre ellos el crimen de Rocío Juárez (ver aparte).
Los asentamientos de emergencias son algunos de los lugares señalados por vecinos, comerciantes y fuentes policiales, como los lugares donde suelen ocultarse los delincuentes. Mención aparte merece el barrio conocido como La Ilusión. "Por su estructura, tiene todas las características perfectas para que operen allí bandas criminales. El barrio tiene una sola entrada, detrás hay un descampado; las calles, además de angostas, son de tierra. Es muy difícil salir de allí", explicó un jefe policial.
Como consecuencia de la cantidad de hechos delictivos, en ocho meses ya se llevan realizadas 58 marchas en contra de la inseguridad. En cada una de ellas, la gente se reúne en el Palacio Municipal para luego recorrer menos de 50 metros hasta la comisaría 1a. Allí, el comisario Daniel Manfredi recibe a los vecinos y atiende sus reclamos.
Inseguridad sin fin
En la última marcha, mientras Manfredi dialogaba con los manifestantes, uno de ellos le alcanzó un teléfono celular. Del otro lado de la línea estaba su hija, que en ese momento acababa de sufrir, junto con su marido y sus dos hijas pequeñas, una entradera en su casa.
Poco tiempo antes de esa manifestación, Juan, un remisero, vivió un episodio similar. "Estaba llevando a un pasajero, cerca de las dos de la madrugada del jueves, cuando cinco delincuentes me dispararon con una escopeta Itaka en la puerta del coche (un Renault 19 modelo 2003). No se querían llevar el auto, buscaban el poco dinero que el pasajero y yo teníamos", explicó Juan, mientras exhibía el agujero en la puerta del conductor provocado por el impacto.
A pesar de la difícil situación que viven los vecinos, Manfredi es elogiado por la gente. "Se nota que se trata de una persona con una voluntad de hierro para combatir el crimen. Estamos muy contentos con él", expreso Silvina Baccino, concejal por el Peronismo Federal.
Uno de los mayores problemas que enfrentan las fuerzas policiales de la ciudad es la poca cantidad de hombres que dispone. En total tiene 67 propios, y otros 60 más como refuerzo, que son aportados desde febrero pasado por el gobierno provincial. Ese total debe resguardar a casi 100.000 personas.
La cifra la proporcionan las fuentes policiales, quienes sostienen que el mayor inconveniente para la lucha contra la inseguridad es la falta de oficiales. Un claro indicador de la carencia de policías en esta ciudad es que la sucursal local del Banco Provincia tiene que retrasar diariamente su apertura una hora y media.
Desde el municipio esperan que la recientemente nueva Escuela de Policía en la ciudad vecina de Campana modifique esta situación. "La escuela descentralizada es un logro de nuestra gestión. Hay 20 personas de nuestra jurisdicción inscriptas que dentro de poco van a estar en servicio", explicó el secretario de Gobierno municipal, Ariel Ríos.
No obstante, Ríos admitió la situación actual de la ciudad. "La inseguridad -sostuvo- es una materia nueva para nosotros. El tema figuraba dentro de nuestra plataforma de gobierno, pero hoy la realidad es mucho más fuerte que cuando fuimos elegidos".