Dos heridos de bala y 31 detenidos en otra noche de disturbios en Ferg
De interés general

Dos heridos de bala y 31 detenidos en otra noche de disturbios en Ferguson

 

 

19/08/2014 Fuente elpais. El despliegue de la Guardia Nacional no logra aplacar las protestas raciales

 

Dos personas han resultado heridas de bala y otras 31 han sido detenidas en una nueva noche de disturbios (la décima) en protesta en Ferguson (Misuri) por la muerte del joven Michael Brown, de 18 años, a manos de la policía. Ron Johnson, capitán de la policía de tráfico de Misuri, aseguró esta madrugada que la policía no había disparado "ni una sola bala" y que los tiros provenían de los propios manifestantes. Cuatro agentes fueron heridos al ser alcanzados por objetos lanzados por los participantes en las protestas, siempre según Johnson.

 

El fuerte despliegue policial y de la Guardia Nacional no ha logrado apaciguar las protestas. Centenares de manifestantes volvieron a ocupar la Avenida West Florissant de Ferguson, epicentro de las protestas, en una concentración que comenzó pacífica y terminó con enfrentamientos, varios arrestos, algunos heridos de bala y el uso de gases lacrimógenos y bombas de humo para dispersar la protesta, informaron los medios locales.

 

"Los manifestantes pacíficos no son el enemigo, ellos no. Pero hoy hemos tenido disparos. Dos personas han tenido que ser trasladas a un hospital y quienes les dispararon no eran agentes", explicó Johnson. Algunas de las personas que participaron en la protesta aseguraron en las redes sociales haber escuchado el sonido de disparos y la cadena Fox informó de que al menos una persona había resultado herida de arma, en una mano.

 

La tensión escaló a partir de las 22.00 hora local (03.00 GMT), cuando la Policía comenzó a avisar a los manifestantes de que debían despejar la calle si no querían ser arrestados, después de que varias personas lanzaran cócteles molotov, botellas y otros objetos contra los agentes.

 

Casi dos horas después, junto antes de la medianoche en Ferguson, los agentes empezaron a avanzar hacia los manifestantes, ataviados con material antidisturbios y alertando a través de los altavoces de que el área dejaba de ser segura, la gente debía volver a sus casas y los periodistas debían salir de la zona de las protestas.

 

La mayoría de los manifestantes atendieron la orden, aunque un grupo reducido de personas -menos de cien- se resistió y en ese momento se sucedieron los arrestos, que superaron la decena, según los medios locales.