"La familia está ausente y el chico encuentra en la droga una salida fácil"

22/04/2015 Fuente elliberal. El "cura villero" sostiene que por "una falla muy grande de toda la sociedad", Hay "cada vez más chicos que se drogan".

E l padre José ?Pepe? Di Paola, se mostró muy dolido por la realidad del consumo de drogas en nuestra provincia, y en referencia a lal declaraciones de la directora de Alcoholismo y Drogodependencia de la provincia, profesora Claudia Tarchini, respecto de la existencia de chicos de diez años que están bajo tratamiento para recuperarse de las adicciones, consideró que eso ?habla de una disgregación social muy grande?.

 En diálogo exclusivo con EL LIBERAL poco antes de emprender su regreso a Buenos Aires luego de permanecer el fin de semana en Campo Gallo, lamentó que ?cada vez haya más chicos que se drogan?, de lo cual responsabilizó a toda la sociedad y dijo que deben trabajar para revertirlo desde el Estado, hasta las instituciones civiles de la comunidad.

 ?El tema de la droga en la Argentina está cada vez peor. Vengo de Campo Gallo hablando con gente de poblaciones muy pequeñas y aseguran que la situación es cada vez más seria, imaginate lo que pasa en los grandes cordones urbanos. Rosario, el gran Buenos Aires, son lugares muy problemáticos, hay muchos chicos que no estudian, que no trabajan y que la esquina termina siendo lugar de encuentro. No hay escuela que los contenga, no hay parroquia o no hay club, y la familia quizás está ausente, entonces el chico encuentra en la droga una salida fácil, y quizás, lamentablemente, una propuesta de vida?, analizó ?Pepe?.

 Se mostró muy dolido al opinar que ?si un chico de seis años llega a drogarse es porque la familia también tiene problemas similares, muy probablemente. O hablamos de chicos en situación de calle donde hay una familia que los abandona; o sea hay una realidad que rodea a ese chico que también es un problema, y esto se da cada vez más en las grandes ciudades?.

 ?Hoy en día, lo que se veía como algo muy lejano está llegando a las grandes ciudades y los pequeños pueblos también lo van viendo como algo que está en crecimiento. En Campo Gallo hay una gran preocupación del cura, de los profesores, de la gente grande que quiere ver bien a sus hijos y a sus nietos. Y no solamente en Campo Gallo; en Monte Quemado, en Añatuya, la situación los ha sobrepasado. El problema está y hay que saber hablarlo?, dijo.

Falla social

 En referencia a las responsabilidades en torno de esta problemática, fue categórico al asegurar que ?hay una falla grande en toda la sociedad argentina?, porque ?nos falta asumir nuestro compromiso?.

 ?Por un lado, el Estado debe asumir un rol más protagónico, en todo sentido, no hablo sólo de la Sedronar, hablo de organismos nacionales, municipales, de la sociedad que no desarrolla las entidades que tengan que ver con el desarrollo de los tiempos de hoy. La escuela, la parroquia, el club, tienen que ser diferentes a lo que eran hace 50 años?, se explayó.

 Y mencionó a la familia como el eslabón principal, ya que en su seno se debe ?distinguir lo que está bien de lo que está mal?, porque ?no puede ser que vean que vender droga sea lo mismo que no vender; hay principios que se van rompiendo, el narcomenudeo destruye la vida social, de solidaridad de los barrios?.

 ?Entonces se da una situación en la que el gran problema del narcotráfico no ha sido resuelto en la Argentina por otro lado está el narcomenudeo que va destruyendo la vida de los chicos; y las instituciones que no supimos dar una respuesta seria. O hay respuestas a medias, porque hay parroquias que hacen trabajos con niños, con jóvenes; clubes que trabajan bien y escuelas que trabajan bien, pero hace falta un trabajo coordinado y sostenido en el tiempo?, analizó.