La pista clave que ayudó a desbaratar a la banda narco
Droga

La pista clave que ayudó a desbaratar a la banda narco

 

 

06/07/2014 Fuente imneuquen. Un llamado anónimo desde el Oeste neuquino fue determinante para seguir la ruta de la droga.

 

Neuquén

 

El golpe que dio el departamento de Toxicomanía de la Policía del Neuquén, en conjunto con el Juzgado Federal 2, a la banda narco de Allen tuvo su génesis en un llamado anónimo que realizó un vecino del Oeste neuquino.

 

LM Neuquén pudo reconstruir la historia secreta de la investigación que avanza en sede judicial.

 

“Esta era una organización más grande que los Montecinos y que la Alianza narco”, reveló un informante bajo absoluta reserva.

 

La investigación arrancó un año atrás cuando el departamento de Toxicomanía recibió un par de llamados alertando sobre la venta de droga en una casa de dos plantas del sector los Hornos. “Era la casa que más se destaca en esa geografía”, confió la fuente.

 

La brigada de Toxicomanía realizó algunos trabajos de observación en el sector y comprobaron la modalidad de pasamanos y también el breve ingreso al domicilio donde se concretaba la operatoria.

 

Esa información fue brindada al juez Gustavo Villanueva que ordenó recolectar pruebas fílmicas y fotográficas.

 

El trabajo de inteligencia ayudó a establecer que los proveedores eran oriundos de Allen, y estaban involucradas dos familias: los Ayala y los Araneda, esta última a cargo de liderar la banda.

 

Los cargamentos de droga para esa barriada neuquina los trasladaban miembros de la banda o el grupo local viajaba hasta Allen a buscar la droga.

 

 

La organización

Para todas las tareas de inteligencia, el juez ordenó que se conformara una brigada. Fueron seis los efectivos que trabajaron divididos en grupos de dos a lo largo del año que duró la investigación.

 

Los trabajos de campo ayudaron a establecer que los narcos de Allen abastecían un decena de distribuidores en Neuquén, Cipolletti, Allen y Fernández Oro.

 

A su vez, estos distribuidores mantenían una red de kiosquitos de venta de droga al menudeo. “No se pudo establecer la cantidad de kiosquitos pero se estima que eran muchos”, confió la fuente.

 

La brigada de Toxicomanía debió viajar en varias ocasiones desde Neuquén hasta Misiones siguiendo a la banda que se abastecía en la zona de la frontera.

 

“Allá tenés una particularidad, el brazo del río Paraná se hace más angosto a lo largo de 80 kilómetros. Esto permite que desde Paraguay crucen en bote la marihuana al país”, detalló el informante.

 

La operatoria en la zona ribereña del Paraná es muy rentable para los narcos argentinos. El kilo de marihuana en la costa tiene un valor de 300 pesos argentinos.

 

De todas formas, la banda narco de Allen compraba la sustancia a 60 kilómetros de la costa en un camping en la zona de El Dorado.

 

El precio que abonaban por ese mismo kilo de marihuana era de 600 pesos. De ahí, en autos o en un motorhome, como ocurrió la última vez, emprendía el regreso a la región por La Pampa.

 

En el Alto Valle el kilo de marihuana lo comercializaban a 6.000 pesos y en la zona cordillerana su costo asciende a 8.000 pesos.

 

“Ni bien pasas la frontera a Chile la marihuana te la compran a 10.000 pesos y mientras más avanzas en el territorio, su precio aumenta superando los 15.000 pesos”, confió la fuente reservada a LM Neuquén.