Juez advierte "notable avance del narcotráfico"
Droga

Juez advierte "notable avance del narcotráfico"

 

 

El camarista Claudio Gutiérrez de la Cárcova dice que, si la droga entra a financiar la política, "sería el fin de la República"

 

14/12/2013 Fuente rionegro. BUENOS AIRES (ABA)- El juez federal, Claudio Gutiérrez de la Cárcova, afirmó que si se concretaba el magnicidio del gobernador socialista de Santa Fe, Antonio Bonfatti (en octubre pasado) la Argentina hubiese entrado a transitar "un camino muy triste y delicado" en el contexto del avance del narcotráfico.

 

Presidente del Tribunal Oral en lo Penal Económico 2 (TOPE 2), De la Cárcova trazó un panorama sombrío al sostener que "si esa actividad ilícita se vuelca al financiamiento de la política, sería el fin de la República".

 

El magistrado advirtió que la liberación del consumo de marihuana en Uruguay le va a causar a ese país un "grave problema regional".

 

Dijo que Estados Unidos "dio por muerta a una generación y decidió salvar a los jóvenes", mientras estos últimos están en riesgo en nuestro territorio porque un tratamiento cuesta alrededor de 14.000 pesos.

 

Señaló que de las 600 pistas clandestinas que había en la Argentina en los 90, hay actualmente unas 1.500. Detalló cuatro episodios en Buenos Aires donde se evidenció la mano de los sicarios.

 

–¿Cuál fue el punto de inflexión en que el narcotráfico comienza a ser un problema de estado en la Argentina?

 

–En julio de 1988 cuando empezaron a incursionar grupos colombianos.

 

–¿Qué situación fueron encontrando las bandas narcos en nuestro país?

 

–Mucha facilidad para actuar. En cambio, por el año 2000 Estados Unidos puso 2.100 millones de dólares en el plan Colombia para ayudar a combatirlas.

 

–En Perú estaba Sendero Luminoso...

 

–Sí, la situación allí fue mejorando. Actualmente en Paraguay hay un grupo insurgente bastante complicado.

 

– ¿EEUU fracasó fronteras adentro?

 

–Ellos dieron por muerta una generación y se pusieron a trabajar en los chicos; tienen un muy buen programa de prevención de adicciones desde etapa preescolar. Esta es una batalla, dicen que legalizando como en Uruguay los narcos van a sembrar papas, plantar limones y criar ganado; error, los criminales no van a dejar de vender.

 

– La apuesta de Uruguay es liberar el consumo.

 

– Uruguay va a tener un grave problema regional, parecido a lo que ocurre en Holanda con el narcoturismo, venta de heroína en los coffee shop. Estamos haciendo el camino de Holanda e Italia 20 años después, Suiza tenía un parque donde camiones levantaban a los heroinómanos que se morían los fines de semana de sobredosis.

 

– ¿Qué pasa con los organismos nacionales en nuestro país?

 

– Pareciera que hay una reacción, cubrieron el cargo en el Sedronar, se hacen procedimientos. El secretario de Seguridad, Sergio Berni, es muy activo, hay preocupación, pero no alcanza. En los 90 había 600 pistas clandestinas en el país, hoy son 1.500; aviones Cessna transportan 500 kilos de cocaína como nada. En los 70 se detenía a bolivianos con valijas de doble fondo, actualmente se manejan con mil kilos; el avión de los Julia con una tonelada; un velero abandonado por los serbios otra, etc.

 

– ¿Cómo está el control del espacio aéreo?

 

– La presidenta Cristina Kirchner encargó tres radares 3 D, es un aparato destinado al control del Norte y Litoral, son caros pero hace falta esa tecnología es un tema que también tiene 25 años. Hacen falta también otros elementos, mejorar los controles migratorios, la inteligencia...

 

– En la crisis policial de la semana pasada en Córdoba hay versiones que la adjudican a que se descabezó la cúpula y se cortó el negocio.

 

– Hace muchos años hay filmaciones de la Bonaerense levantando recaudación. La droga corrompe policías, jueces, políticos, pasó en México y Colombia, no se si en Córdoba tuvo que ver, pero si no me equivoco el arma que tiró contra el gobernador de Santa Fe, Antonio Bonfatti era de un oficial de la Policía de Santa Fe que está detenido.

 

– ¿El atentado contra Bonfatti fue el máximo punto de la escalada?

 

– Estuvimos cerca de asistir a un magnicidio con el ataque a Bonfatti. Si ocurría iba a ser una página muy triste, se trata de un gobernador en actividad en una provincia donde los muertos por peleas entre bandas narcos llegan a doscientos.

 

– ¿A Bonfatti lo quisieron asesinar o dar un mensaje?

 

– Hubo muchos tiros y estaba sentado, si una bala le pegaba en la cabeza y lo mataba hubiera sido muy delicado para el país; Santa Fe junto con Salta son visualizados como los lugares más problemáticos.

 

– ¿Cómo reacciona la sociedad?

 

– Esto explotó por la gran tolerancia de mucha gente al consumo. La gente piensa que la marihuana es como la Coca Cola (cuando en Paraguay alteraron la genética y se ha vuelto muy peligrosa), existe una oferta monumental de metanfetamina. En 2001 el encargado de drogas de Alemania en perfecto español me indicó: "la venganza de Europa por toda la cocaína que nos mandan va a ser la droga de diseño"; hay mucho éxtasis en los boliches. Hará siete años tuvimos el alerta sobre la llegada de efedrina, los mexicanos se nos vinieron.

 

 

Al límite

 

 

– ¿Estamos en una situación cercana a un Narcoestado?

 

– No estamos como en la peor época de México y Colombia, pero hubo señales del accionar de sicarios: el triple crimen de Forza, Ferrón y Bina, el de dos colombianos asesinados en Unicenter; el del colombiano que compraba un yate en San Fernando y otro en Recoleta. La efedrina se metió rápido. En esa actividad arrancaron 50 laboratorios y hay 5, limpiaron la competencia y se quedaron con un monumental negocio, el registro de precursores químicos, es decir el control, disponía de dos personas. Con el juez Luis Losada estuvimos en la selva del Chapade, en Bolivia. Casi todos los productos químicos eran argentinos, después del 2001 empezó el Paco.

 

– En el triple crimen que Ud. refirió se deslizó que parte del dinero de esos grupos fue para la campaña electoral.

 

– Hubo una donación a la campaña... el financiamiento de la política con esta gente sería el fin de la República.

 

– ¿Hay zonas tomadas por los narcos?

 

– Hay barrios muy comprometidos, en la ciudad de Buenos Aires hace unos años comprobamos que a una zona de Flores no entran el SAME, ni los bomberos, ni la policía, ni el correo. Ocurre en varios lados del territorio nacional.

 

– ¿Aquí también estamos ante el riesgo de perder una generación?

 

– Si, porque no todo chico tiene una prepaga; los tratamientos de recuperación van de 5.000 a 14.000 pesos.

 

– ¿Qué piensa del derribo de aviones?, ¿no atenta contra los derechos humanos?

 

– No se puede decir que es una pena de muerte, en el caso de implementarse hay un protocolo a seguir con seis pasos (advertencias, alertas, etc) hay que debatirlo en el Congreso, lo tienen muchos países de la región, Perú, en Brasil actúan 10.000 hombres en la frontera; en Colombia se cubre con la radarización. Hay que discutir de vuelta la ley de seguridad interior, el narcoterrorismo es hipótesis de seguridad nacional.

 

– ¿Se trabaja en conjunto con otros países?

 

– Se está avanzando en convenios de 'entrega vigilada' en base a confianza, siguiendo el recorrido de dos o tres toneladas para cortar la organización. Uruguay estaría rompiendo esa posibilidad con la ley permisiva.

 

– Desde una visión liberal se sostiene que la represión fracasa porque la tentación de lo prohibido es lo que sube el precio y por la corrupción de los agentes estatales.

 

– Son liberales naif que creen que los narcos van a sembrar soja, o criar vacas, pero andan con fusiles. La corrupción se puede controlar con la ley.

 

– ¿Cuántos detenidos hay por narcotráfico en el país?

 

– Unos 800 en casi todas las jurisdicciones.

 

– ¿Es una solución la ley del arrepentido?

 

– Se aplica, hemos reducido condenas y sacado gente, pero hay que protegerlos. A un detenido que me quería entregar una banda de éxtasis le expliqué que esto no es una película americana donde te dan casa, autos, tele; era una persona humilde con cinco hijos, acá te ofrecen un plan jefes, le avisé: "hay que manejarse con cuidado no quiero llorar tu muerte, esto es la Argentina".