Faifer: “El tema de las drogas requiere una actitud definida de la com
Droga

Faifer: “El tema de las drogas requiere una actitud definida de la comunidad”

 

 

09/12/2013 Fuente ellitoral. En la Catedral de Goya, monseñor Ricardo Faifer presidió la misa en la que se rezo, a pedido del episcopado argentino, por quienes sufren el flagelo de las drogas y para erradicar el narcotráfico.

 

 “La gravedad del tema requiere una actitud definida de toda la comunidad”, expresó el prelado.

 

 En adhesión a la Jornada de Oración y de Ayuno ante “El drama de la droga y el narcotráfico”, el sábado en la Catedral se expuso el Santísimo Sacramento durante todo el día y además hubo grupos de oración.

 

Participaron de la misa presidida por el Obispo goyano, integrantes del grupo de capacitación y de evangelización de la Diócesis de Quilmes, quienes desde el viernes y hasta el domingo, realizaron un taller de capacitación sobre las adicciones en la parroquia San José Obrero. Luego marcharon por las calles con la imagen de la Virgen de Itatí, con carteles, pancartas y banderas con frases alusivas.

 

Al inicio de la celebración eucarística, el padre Ariel Giménez, explicó brevemente las actividades desarrolladas durante el fin de semana, en adhesión a la convocatoria de los obispos argentinos.

 

En su homilía, monseñor Faifer expresó que “nadie se puede hacer al distraído porque es una problemática que afecta a todos, por eso es tan importante este acto que hacemos en presencia de Dios”.

 

Ante un templo colmado de fieles, subrayó que “nos quedamos sin palabras ante el dolor de quienes lloran la pérdida de un hijo por sobredosis o hechos de violencia vinculados al narcotráfico”, haciendo propio los conceptos de la reciente declaración del Episcopado argentino. Después reclamó “una decisión clara y definida para erradicar el flagelo del narcotráfico” y también para “prevenir y acompañar a las familias que han sido víctimas”.

 

Faifer remarcó que “es terrible el negocio de la droga en nuestra patria querida", enfatizando luego que “perseguir el delito es tarea exclusiva e irrenunciable del Estado”.

 

“No dejemos que nos roben la esperanza, ni que se la arrebaten a nuestros jóvenes. Cuidémonos los unos a los otros. Estemos particularmente cerca de los más frágiles y pequeños. Trabajemos por una cultura del encuentro y la solidaridad como base de una revolución moral que sostenga una vida más digna”, dijo monseñor, aludiendo palabras del papa Francisco.