Que trafiquen con la droga, no con el fútbol
Droga

Que trafiquen con la droga, no con el fútbol

 

 

05/06/2015 Fuente lanacion. oda esta explosión que está pasando en la FIFA es, en verdad, algo que se conocía desde hacía mucho tiempo. Es muy difícil que funcione un organismo administrado como una multinacional e integrado por un montón de representantes que han creado un enorme deterioro en la historia del fútbol. El fútbol entendido como un hecho cultural, como representación y lugar de apasionamiento, no el fútbol del gran negocio para pocos, algo que manejaron siempre con una impunidad asombrosa.

 

Lamentablemente, para que saltara esto tuvo que pasar por algún país que tiene muy poco que ver con el fútbol, como lo es Estados Unidos. A mí me hubiese gustado mucho más que esto fuera provocado por dirigentes argentinos, brasileños, uruguayos, ingleses, alemanes o italianos, lugares donde están los grandes escenarios del fútbol. De todas formas, yo creo que concentrar la culpa en Joseph Blatter es una mentira. Uno ve que están los que están a favor y los que están en contra de Blatter, pero no escuché ningún debate más que la discusión de si fue soborno lo de Qatar o Rusia. Me parece que el debate debe ser mucho más profundo, serio y claro.

 

Todo el mundo dice que no tiene que estar más Blatter, pero aparece enfrente gente que también pertenece a la misma organización, donde se han hecho favores, donde se decide quién juega y quién no juega. El príncipe Alí no se sabe muy bien a quién representa. Y a Platini no lo veo ahora siendo presidente de la FIFA, a lo mejor sí dentro de cuatro años.

 

La renuncia de Blatter podría tener una importancia en la construcción de un futuro mejor si quienes lo aspiran a suceder definieran qué van a hacer con el fútbol, cuál es el motivo como para que se presenten. Y entonces vamos a ver quiénes son capaces de hacer una revolución. Porque si van a pelear por un cargo para seguir pensando que el fútbol es solamente un gran negocio, estamos perdidos. O se hace una revolución o es otra mentira. Como decía el "Che" Guevara, en las revoluciones se gana o se muere.

 

Hay que ver si realmente hay una intención de hacer una revolución seria y profunda en la que haya un respeto por lo que significa el espectáculo del fútbol.

 

Va a ser difícil si, por ejemplo, la Conmebol sigue siendo lo mismo, si la van a seguir representando las mismas personas. Pienso que tiene que haber una participación de los futbolistas y de todos los sectores. El fútbol necesita dirigentes que se la jueguen de verdad. Y si pierden, pierden. Tenemos que defender un poco la dignidad de la pelota. El fútbol, como dijo Xavi, es una pelota y amigos. No puede ser que la representatividad y un montón de ilusiones