Una de las caras de la conexión narco local
Droga

Una de las caras de la conexión narco local

 

 

26/06/2014 Fuente eldiariodetandil. Raúl Alejandro Díaz Esteve es el hombre que está detenido y deberá prestar declaración en la causa de la narco banda marplatense que operaba en Tandil. Presentamos aquí el cuasi prontuario de un contador, también sospechado de prestamista encubierto, y ahora sindicado como el nexo local que comercializaba cocaína en la noche serrana.

 

Muy conocido en la Justicia, para empezar. Sobre todo porque fue el contador de un variopinto grupo empresarial que no hace mucho tiempo tuvo a su cargo la concesión de Antonino Bar y –antes- el restobar que funcionaba con el nombre de “Uni” en el Centro Cultural Universitario. Se presume que esa sociedad que compartió con los concesionarios de Antonino estaba formada, entre otros, por ciertos funcionarios del ámbito judicial, de los que no guardarán por el contador el mejor de los recuerdos. Como tampoco el juez que tuvo a su cargo la causa del club Ferrocarril Sud, en los tiempos que Díaz Esteve fue Interventor, efímero cargo del que salió eyectado entre gallos y mediasnoches.

 

Raúl Alejandro Díaz Esteve es contador, pero además se lo conocía en el mundo de la usura como una suerte de prestamista ligeramente encubierto.  La noche lo registraba como un asiduo visitante a Paca y también son varios los testimonios que lo asocian como una presencia recurrente al Casino local. “Más que un currículum “el Chanchi” tiene un prontuario social”, calificó una fuente a este portal de noticias, señalando otros aspectos de la personalidad del profesional detenido, tales como su abrumadora banalidad, ciertos destratos con el sexo opuesto, su pasión por el juego y la cocaína.

 

También, ahora, el rol que cumplía en la banda narco oriunda de Mar del Plata que fue desbaratada en Tandil durante los cuatro allanamientos del jueves. Voces extraoficiales estiman que en la vivienda de Caseros al 600, donde vive Díaz Esteve, se habría hallado alrededor de 250 gramos de cocaína, cinco gramos de marihuana, cuatro teléfonos celulares, una computadora portátil, una balanza de precisión, elementos de fraccionamiento, documentación de interés para la causa y algo más de 6000 pesos en efectivo. Parte de la droga se repartía en las escuelas de la ciudad, y otra parte en ciertos ámbitos de la tandilidad nocturna. Se estima que en tales recintos de esparcimiento habría operado el “contador narco” tandilense, como se lo empezó a llamar en la víspera, cuando su nombre entró a sonar como un fuerte trascendido en los febriles mentideros del empedrado.

 

Hoy sábado, Díaz Esteve –que es uno de los cuatro detenidos- prestará declaración ante el fiscal interviniente.