La Iglesia, contra la violencia y la muerte
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La Iglesia, contra la violencia y la muerte

 

 

02/04/2014 Fuente lanacion. La Mesa del Diálogo de Santa Fe, encabezada por el obispo Arancedo y el gobernador Bonfatti, rechazó los linchamientos, condenó la marginalidad y el narcotráfico; advirtió que no es posible acostumbrarse a convivir con el delito

 

ANTA FE.- La Mesa del Diálogo santafecina, que integran, entre otros, el gobernador, Antonio Bonfatti ; el arzobispo local y presidente de la Conferencia Episcopal Argentina, monseñor José María Arancedo,  sostuvo en un comunicado : "No podemos acostumbrarnos a convivir con el delito, la violencia, la inseguridad y la muerte, ya que es posible y nos merecemos una Santa Fe distinta", con relación a la creciente ola de violencia, con asesinatos en robos, narcotráfico, un presunto ladrón muerto por una paliza de vecinos de Rosario y otros intentos de justicia por mano propia.

 

En el documento se cuestionó, además, la violencia de aquellos que buscaron tomar venganza rápida contra los potenciales delincuentes: "Rechazamos las respuestas de justicia de mano propia, porque lejos de resolver los problemas, los agudiza".

 

La Mesa del Diálogo santafecino está integrada, además de por la Iglesia y el gobierno provincial, por la DAIA, el Consejo de Pastores Evangélicos, la Bolsa de Comercio local, la Unión Industrial, el Centro Comercial, la Asociación Dirigentes de Empresas, la Sociedad Rural y universidades pública y privadas.

 

Los referentes políticos y sociales, encabezados por Arancedo, señalaron al narcotráfico como una de las razones principales del incremento de la violencia en las calles.

 

"Sabemos que son muchas las causas que concurren a esta realidad que nos empobrece y paraliza. Señalamos entre ellas la marginalidad, el narcotráfico, la ausencia de una cultura de valores que dé sentido a la vida y sostenga el nivel de nuestras relaciones, como así también la de una deuda de la dirigencia política como responsable del bien común de todos los ciudadanos", sostuvo la declaración suscripta al término de una reunión que la mesa celebró en la Bolsa de Comercio local.

 

Más allá de los crímenes en aumento, con Rosario estableciéndose como la ciudad argentina con mayor tasa de homicidios, superior a 22 cada 100.000 habitantes, Santa Fe fue conmovida en los últimos días por la muerte de un joven de 18 años señalado como delincuente por vecinos, que lo golpearon el sábado 22 de marzo (su fallecimiento tuvo lugar pocos días después). Ese muchacho habría participado como motochorro en el robo a una mujer y fue interceptado por habitantes del barrio Azcuénaga, que prácticamente lo lincharon.

 

Tras ese episodio, en Santa Fe se sucedieron palizas a delincuentes atrapados por vecinos, situación que encendió mayores alarmas en las autoridades provinciales. Frente a ese nuevo problema, la Mesa del Diálogo emitió su comunicado.

 

En el documento que fue difundido ayer por el arzobispado santafecino se indicó : "Sentimos la necesidad de elevar nuestra voz de denuncia ante los poderes públicos como de asumir el compromiso de trabajar juntos para crear las condiciones de una sociedad donde los valores de la vida y la paz, del trabajo y de la justicia, de la honestidad y la ejemplaridad sean la fuente de una sociedad más humana, justa y solidaria".

 

También se reclamó "con urgencia" una cultura "del encuentro, del diálogo y de la solidaridad", en el marco del Estado de Derecho y como base de una sociedad "libre, justa y fraterna".

 

Y se agregó un pedido de asistencia a la justicia federal, fuero en el que deben tramitarse las investigaciones sobre narcotráfico: "Esto requiere la presencia de todos los poderes del Estado, que, en el ejercicio de sus funciones y la aplicación de la ley en el marco de la Constitución, consolide la vida de la democracia. En particular, en razón de la naturaleza de los delitos, el concurso de la justicia federal".

 

En el momento de rechazar los últimos actos de violencia por parte de los vecinos, los referentes santafecinos llamaron a valorar la transmisión de una cultura de valores, proyectos de vida y de amistad social, "a la familia, la escuela, el trabajo, los medios de comunicación social y todas las instituciones comprometidas con el bien público de la sociedad".

 

En un claro reconocimiento a la necesidad de ejecutar acciones que posibiliten mejorar el escenario de inseguridad que domina Santa Fe, especialmente en Rosario, expresaron: "Sabemos que no podemos esperar soluciones mágicas, pero tampoco quedarnos como espectadores de un drama que envilece la condición humana, quiebra los lazos de pertenencia y disminuye la necesaria confianza ciudadana, comprometiendo el futuro, del que nos sentimos responsables. El bien tiene más fuerzas que el mal, pero el bien necesita de protagonistas".