La fiscalía reconoce que, pese a los avances, el narcotráfico está enr
Droga

La fiscalía reconoce que, pese a los avances, el narcotráfico está enraizado

 

 

05/10/2015 Lavozdegalicia. Lo explica en las condiciones naturales de la costa pontevedresa y por la vocación marinera de la población

 

«A pesar de los importantes esfuerzos y avances logrados durante los últimos años en la lucha contra el narcotráfico, nos encontramos, un año más, con importantes cifras en la actividad de la Fiscalía en la lucha contra el tráfico de drogas». De este modo, la memoria del ministerio público pontevedrés reconoce que la evolución de esta actividad delictiva en las Rías Baixas «ha desembocado en un cierto enraizamiento».

 

Esta situación se explica, en gran medida, «por las condiciones naturales de las costas de Pontevedra y por la vocación marinera de su población». Tal circunstancia determina que el litoral de la provincia siga siendo «una de las vías de entrada de cocaína en nuestro país que después sería distribuida en otras regiones», de igual modo que, en el caso concreto del hachís, «nuestra provincia se presenta como un receptor más de las partidas introducidas en España a través de otros lugares», señala el fiscal antidroga Luis Uriarte.

 

Las drogas duras Curiosamente, esta realidad explica el hecho de que, de los 123 escritos de acusación formulados el pasado año, 73 hicieran referencia a sustancias estupefacientes que causan grave daño a la salud, las llamadas drogas duras, mientras que el medio centenar restante aludiese a las drogas blandas. «Esta circunstancia, aunque parecería apuntar a un mayor consumo de las primeras, debe más bien ser interpretada como un predominio del tráfico de drogas duras, fundamentalmente cocaína, en el ámbito territorial de esta Fiscalía». La labor de la fuerzas policiales frente a los clanes de la droga se tradujo en el 2014 en la apertura de 271 procedimientos por tráfico de drogas y uno por blanqueo de capitales procedentes del narcotráfico. El estudio de estas investigaciones ha permitido establecer tres áreas distintas en la provincia de actividad delictiva. Por un lado, el entorno de las ciudades de Pontevedra y Vigo, cuyos juzgados acumulan el 69,84% de estos procedimientos, mientras que un segundo grupo lo constituirían las comarcas de O Salnés y Arousa, así como el partido judicial de Tui, por la frontera con Portugal. Por último, «un tercer grupo de poblaciones en las que la influencia del narcotráfico se produce puntualmente».