Glosario de bonos: estos son los títulos que ganan 30% en el año y esp
Comercio Exterior

Glosario de bonos: estos son los títulos que ganan 30% en el año y esperan el resultado de la pelea con los "buitres"

 

 

12-06-2014 Fuente iprofesional. Los rendimientos que muestran los papeles resultan más que atractivos a ojos de cualquier inversor externo y ahorristas locales. Los hay de todo tipo y para todos los gustos. Están los nominados en pesos y aquellos en dólares. Ranking de subas y el "top five"

 

En lo que va del año el conjunto de los títulos emitidos por el Gobierno registra un avance en sus cotizaciones del orden del 30%.

 

Es decir, supera ampliamente a la inflación acumulada, que rondaría el 14%, y a la suba del dólar blue que -tras sus idas y vueltas- ha sido del 12% en lo que va del 2014.

 

El menú de bonos se divide en dos grupos:

• Los dolarizados.

• Los nominados en pesos.

 

A su vez, la primera categoría (dolarizados) se la puede dividir en dos subgrupos, según la normativa a la que responda en su emisión:

• Legislación nacional.

• Ley de la Ciudad de Nueva York.

 

En tanto, dentro del grupo de los papeles nominados en pesos, se ubican aquellos que pagan según la evolución de los precios al consumidor (índice CER) y los que lo hacen en función de la tasa Badlar.

 

También se coexiste una tercera categoría conformada por los que alguna vez fueron las estrellas del mercado: los cupones atados al PBI, que rinden en función del crecimiento de la actividad económica del país, a partir de un determinado piso de referencia. La no inclusión de estos últimos en los grupos anteriormente detallados responde a que se trata de una especie de "rara avis", que los hace diferentes al resto. Y esto no sólo se debe a las condiciones de emisión, sino también a su evolución.

 

En el campo de los bonos, los grandes ganadores del 2014 hasta la fecha vienen siendo los emitidos en pesos que, en el mejor de los casos, acumulan un alza del 45%, como se ha dado con el Par 2010.

 

A este le pisa los talones el Discount original (44%) y, por debajo, se encolumnan el Discount 2010 y el PR13 (34%).

 

Finalmente, cierra el ranking de los "top five" el Bogar 2020, con la nada despreciable alza de casi el 27%.

 

Las "especies" en color verde dólar

Los bonos emitidos en dólares también muestran importantes ganancias.

 

Los Discount 2010 con legislación del Estado de Nueva York, son los que encabezan el ranking con un crecimiento del 36,6%. Su versión original -es decir la emitida en el canje del año 2005- avanzan una cifra muy similar, algo menos del 35,7%.

 

Más abajo se encolumnan las dos versiones del bono Par (la original de 2005 y la de 2010), con alzas de casi el 30% y del 26% respectivamente. La lista la cierra la lista el Bonar X, con el 24,6%.

 

Hoy día, dada la proximidad de su vencimiento y las condiciones de repago, el que más despierta el interés del mercado y forma parte de los que más se opera es el Boden 2015, que evidencia un repunte del 17% sólo en lo que va de 2014.

 

Claro está que su atracción la da el breve lapso que media hasta su cancelación definitiva en octubre del próximo año, cuando se restituirá el 100% del capital en billetes verdes y el hecho de que dicho vencimiento se da en una fecha previa al recambio presidencial, lo que reduce el riesgo a ojos de inversores.

 

A la espera de los "buitres"

Existe consenso entre los analistas consultados por iProfesional respecto a que la decisión que emane de la Corte Suprema de los Estados Unidos en relación con el pleito que enfrenta al Gobierno con los fondos buitre será decisiva para el futuro de los bonos, tanto los nominados en dólares como aquellos en pesos.

 

Al respecto, el economista Christian Reos, gerente de research de Allaria Ledesma, considera que "la decisión del Máximo Tribunal estadounidense será un tema clave para el riesgo país argentino, por lo que tomar posiciones en títulos públicos ahora no resulta recomendable".

 

El especialista sugiere que "quienes quieran tomar riesgo local deberían comprar bonos en dólares bajo legislación nacional".

 

En aquellos en dólares, "para los emitidos con ley argentina es probable que se observe el mismo movimiento que los de ley Nueva York, tanto para arriba como para abajo, si bien no de una forma tan volátil", agrega el ejecutivo de Allaria Ledesma.

 

En definitiva, para estos bonos el resultado será mucho más marcado según lo que se resuelva en los Estados Unidos: serán los que más van a subir si el fallo es favorable o si se estira en el tiempo una definición. Y serán los que más de desplomen si lo que se decide ese país resulta adverso para la Argentina".

 

En opinión de Juan Pablo Vera, jefe de Análisis Financiero de Tavelli y Cia, "más allá del tema de los holdouts -que puede cambiarán las expectativas de corto plazo- las carteras de los inversores fueron a una dolarización casi total".

 

Respecto a los títulos en pesos que ajustan tanto por Badlar (el tipo de interés que los bancos pagan por depósitos mayoristas, superiores al millón de pesos) como los que lo hacen por índice CER, desde la firma Allaria Ledesma afirman que, no tienen tanta demanda en estos momentos.

 

Estos últimos vienen exhibiendo una tendencia decreciente, producto de que se calculan en base al Índice de Precios Nacional (IPC), que viene bajando en forma sistemática.

 

"En cuanto a los bonos que ajustan por tasa Badlar, su demanda se vio afectada porque el Gobierno apunta a bajar un poco la tasa de interés para reactivar la economía en el segundo semestre", agrega Reos, de Allaria Ledesma.

 

En cuanto a los plazos, los analistas hacen referencia a los bajos rendimientos que muestran los bonos con vencimientos más cortos (por una cuestión lógica de estar atados a un menor riesgo) por lo que sugieren volcarse por aquellos títulos con horizonte de vida a tres años.

 

"Para tomar riesgo argentino, hoy es recomendable posicionarse como mínimo en aquellos que tengan vencimiento de 2017 en adelante", apunta Reos, quien sugiere volcarse al Bonar 2024, al Discount y el Par.

 

En el caso particular de los títulos que rigen bajo la ley estadounidense, la opinión generalizada es que su suerte estará un 100% ligada a la decisión que se tome en los Estados Unidos.

 

En opinión de Vera, el Bonar 2015 es muy interesante. En particular para el pequeño ahorrista, ya que rinde casi lo mismo que un bono más largo -como el Bonar X- que vence dos años más tarde.

 

En cuanto al Bonar 24, los analistas consideran que tiene un muy buen panorama para seguir subiendo.

 

"Si el tema de los holdouts se resuelve de modo favorable para la Argentina, subirá sustancialmente el atractivo de aquellos títulos emitidos a más largo plazo, como Par y Discount", pronostica Vera.

 

El analista considera que aquellos atados a la ley extranjera son los que tienen mayor potencial. Pero, en caso de un fallo adverso, serán los que más bajarán en el corto plazo.

 

En cuanto a aquellos que se mueven en función de la inflación, "hoy están planchados y con movimientos bastante acotados", agrega el analista de Tavelli.

 

Además, considera que los ajustados por Badlar siguen siendo bastante demandados, ya que los inversores consideran que tienen un marcado potencial de crecimiento. "La tasa de interés ahora está más cerca del piso que del techo", añade.

 

En este contexto, Vera pronostica que el Pro 15 y Bocan 17 son los que muestran mejores chances de evolución.

 

Rancho aparte: cupones atados al PBI

Los cupones atados al PBI nacieron a raíz del canje de deuda de 2005.

 

El atractivo principal radica en que pagan una renta en función del crecimiento de la economía (PBI), siempre y cuando supere un porcentaje establecido de antemano como piso.

 

A partir de las famosas y ahora cuestionadas "tasas chinas", fueron la delicia de los inversores, ya que abonaron rentas en pesos -y sobre todo en dólares- difíciles de superar.

 

Pero ahora sufren los embates del freno en la actividad económica, la escasez de dólares que agobia al Banco Central, y la decisión del Gobierno de no pagar u$s3.500 millones, tras los cambios en las mediciones estadísticas oficiales.

 

Tal es así que mientras que los denominados en dólares ganan apenas menos del 8%, los cotizados en pesos retroceden un 30 por ciento.