Sorpresa e incredulidad entre los vecinos
De interés general

Sorpresa e incredulidad entre los vecinos

 

 

14/04/2014 Fuente lanacion. Algunos cuestionaron la viabilidad del proyecto; otros apoyaron la "idea"

 

ntre asombrados y descreídos, varios vecinos de Recoleta opinaron sobre la noticia de la mudanza del centro comunal N°2 al shopping situado en la calle Vicente López, entre Junín y Uriburu. "¿En serio se muda ahí? ¿Habrá que ir al shopping a renovar el registro de conducir? Es rara la idea...; a mí no me disgusta, pero hay que ver si el lugar no se llena de gente. Yo creo que los que van al shopping a pasear no van a estar muy contentos. Ése es un lugar para hacer las compras tranquila", dijo Mariana De Bonis, vecina de Junín y Las Heras.

 

Algunos empleados del lugar también se miraron de reojo cuando se los consultó sobre el tema. "¿El registro civil estará acá adentro? Es una cargada, ¿no?", dijo un empleado de un local de comidas rápidas. Y luego, ante la confirmación del cronista, agregó: "Para mí, mejor, porque tengo el centro comunal a mano para hacer un trámite. Pero seguro que vamos a tener más trabajo. Me imagino que va a venir más gente a comer al shopping, porque todos los que hacen un trámite siempre tienen hambre y siempre están apurados", dijo Ezequiel, cajero de uno de los locales gastronómicos del Recoleta Mall.

 

Nelson Durisotti, presidente de la Asociación Barrio Recoleta, cuestionó la medida y dijo que es, al menos, controvertida. "Las oficinas públicas deben estar diseñadas en concordancia con el rol del Estado. Es decir, tienen que enfocarse en la inclusión, la integración, en el fomento de la diversidad social y las garantías de igualdad y solidaridad. Y la decisión de trasladar las oficinas del centro comunal de Recoleta a un shopping simboliza todo lo contrario, encarna un modelo de ciudad pensada para pocos", aseguró el vecino.

 

Durisotti explicó que "el centro comunal es la cara visible del gobierno porteño en el barrio. Es el primer enlace entre el ciudadano y sus autoridades; es el espacio físico al que la gente acude a ejercer ciudadanía, a cumplir con sus obligaciones, a ejercer sus derechos. Un shopping muestra un costado del progreso, genera inversiones, es fuente de empleo y mueve la economía, pero es un lugar centralizado y ensimismado; es un lugar excluyente, individualista, que niega la diversidad, que segrega y que fragmenta".

 

Además, el presidente de la Asociación Barrio Recoleta agregó que la Ciudad "debería encontrar un lugar neutro para el funcionamiento del CGPC N°2. Mimetizarse con los efectos colaterales adversos de un espejo de concentración comercial, no es lo mejor, es lo peor que nos puede suceder".

 

Para Estela Di Fiore, que vive en Callao y Santa Fe, la iniciativa es muy "positiva". La mujer -contadora pública- aseguró: "Está perfecto que los vecinos puedan hacer un trámite en un lugar más descontracturado y donde la espera no sea tan molesta, como ocurre hoy en cualquiera de los centros comunales y comerciales de la ciudad. Es una muy buena idea. Lo gracioso es que una podrá ir a pagar los impuestos y darse una vuelta por el shopping", dijo..