La industria automotriz se prepara para el impacto de la caída del consumo en Brasil
19/03/2015 Fuente cronista. Estiman un mercado de 600.000 a 650.000 unidades para este año. Pero la gran incertidumbre pasa por la situación de Brasil, destino del 85% de las exportaciones locales
Para que la industria automotriz vuelva a los niveles de patentamiento de cero kilómetros (0 Km) registrados en 2013 que fue récord con 955.000 unidades deberán pasar varios años. Esas cifras no se repetirán por lo menos hasta 2018 ó 2019, según expresó ayer la titular de Asociación de Fábricas de Automotores (Adefa) y presidente de General Motors para Argentina, Uruguay y Paraguay.
"Este año empezó muy débil, en enero y febrero; pero la expectativa es que tengamos una recuperación. Gran parte de la caída fue por la falta de divisas para operar y no tener previsibilidad para darle a nuestros concesionarios. Va a ser un año con una industria más débil, pero dependerá mucho de lo que pase en la economía, la disponibilidad de dólares y lo que pasa en Brasil", explicó Costantini en el seminario sobre el sector automotriz organizado por El Cronista y Apertura en la Exposición EFI (Economía, Finanzas e Inversiones). La directiva estimó que el mercado interno podría alcanzar entre 600.000 y 650.000 unidades patentadas en 2015, un número menor a las 684.000 del año pasado.
Las fábricas de autos tienen una demanda aproximada de u$s 250 millones mensuales para adquirir autopartes, pero el Gobierno les autorizaba un cupo de u$s 100 millones, que ahora se estiró a u$s 154 millones (más u$s 70 millones para las que están realizando inversiones). "Para los que nos gustaría tener no alcanza. Pero hay que entender la dificultad para tener divisas. Era crítico tener previsibilidad", aseguró la ejecutiva.
La situación económica y política de Brasil, con devaluación del real y protestas en las calles, impactará fuertemente en el sector durante este año. Brasil es el destino del 85% de los autos fabricados en la Argentina. "Ya teníamos una situación compleja sin Brasil y ahora lo es más. Nuestros productos están muy caros en el mercado brasileño y se agrava nuestra posibilidad de exportar a los mismos niveles. Sin hablar de competir con otros mercados y no ser tan dependientes de Brasil", advirtió Costantini.
De acuerdo con Hernán Dietrich, CEO de la concesionaria Dietrich, la caída en el mercado interno no está ligada sólo a la demanda sino también a la oferta. Por eso, el techo de ventas también está fijado por la disponibilidad de automóviles: si los autos estuviesen, podríamos estar en los niveles de 2014. En 2013 hubo un adelantamiento de compras, fue un buen año pero también traumático desde el punto de vista de la logística y la eficiencia porque el crecimiento fue muy abrupto", señaló Dietrich. Y apuntó a otro factor que impactó fuerte en las ventas: el impuesto interno que grava el precio de los vehículos. "Distorsiona todo. Para una terminal es muy difícil definir el precio con un impuesto que hace que un auto valga 50% o 60% más", opinó.
El tipo de cambio es otro de los temas que preocupa al sector. Norberto Taranto, presidente de la autopartista Grupo Taranto, manifestó que hoy la rentabilidad no existe. "El tipo de cambio está más atrasado que en 2001 con respecto a la generalidad de los precios internos", indicó el empresario, que exporta el 80% de su producción a Brasil.
Al final de la charla, los tres panelistas coincidieron en pedir "previsibilidad" al próximo Gobierno. Y demandaron obras de infraestructura (puertos y trenes para reducir costos logísticos), sinceramiento de las variables económicas y la modificación del impuesto interno a los autos en el corto plazo. "Que haya un poco más de libertad en las variables económicas y que todo no sea tan dirigido; sin caer en el engaño de dejar todo liberado y que no haya protección para la industria", concluyó Taranto.