Hacían uniformes policiales para bandas que cometían entraderas
06/03/2015 Fuente lanacion. En el taller de confección había, además, 40 kilos de marihuana, fusiles y pistolas; fue detenida la cuidadora del lugar
En taller textil clandestino que confeccionaba prendas similares a las usadas por la policía fue desarticulado ayer en un allanamiento realizado en una casa ubicada en José C. Paz, donde además fueron secuestrados 40 kilogramos de marihuana, un fusil de asalto, pistolas, municiones y chalecos antibalas.
El operativo fue llevado a cabo por la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de San Isidro, con el apoyo de grupos tácticos especiales de la policía bonaerense.
Según se informó, el allanamiento fue la derivación de una causa en la que se investiga el asesinato de un hombre durante un robo en San Isidro, el 29 de enero pasado, por el cual fueron detenidos cinco hombres.
"En ese crimen, los delincuentes usaron ropa similar a la de la policía, que se habría confeccionado en este taller", dijo uno de los jefes policiales que participó del procedimiento de ayer, en el que los uniformados se incautaron de 40 kilos de marihuana que estaban ocultos en una caja llena de prendas.
La policía secuestró varias armas de fuego, entre ellas, un fusil de asalto, un chaleco antibalas, municiones, máquinas textiles y prendas de vestir, muchas de ellas, similares a las que usan las policías.
En el allanamiento fue detenida una mujer, que era la encargada de custodiar el lugar. Según se informó, sigue la pesquisa para dar con el resto de esta organización.
El caso del que se derivó este descubrimiento -en el que interviene la fiscalía descentralizada de Martínez- fue el homicidio de Sebastián Cid, de 37 años, que murió al tirotearse con un numeroso grupo de delincuentes que intentó irrumpir en su casa en Martínez, de San Isidro. Por lo menos cuatro delincuentes habían intentado ingresar en la propiedad mientras se hacían trabajos de reparaciones en la vivienda. La víctima se resistió no sólo para defender su propiedad, sino a sus pequeñas hijas, presentes en el lugar.
Tras el tiroteo en el que murió el dueño de la casa, los delincuentes escaparon hacia la villa Melo, de Vicente López. En ese lugar se enfrentaron con la policía. Lograron huir, pero fueron perseguidos por los patrulleros hasta la villa La Rana, en San Martín, donde finalmente fueron arrestados tres sospechosos. Uno de los delincuentes murió durante uno de los enfrentamientos.
El grupo criminal contaba con armas de guerra y pistolas calibre 9 milímetros como las encontradas ayer en el allanamiento al taller clandestino de José C. Paz..