Rescatado un náufrago tras 66 días desaparecido en el Atlántico
04/04/2015 Fuente elpais. Un barco alemán le localizó a más de 300 kilómetros de las costas de Carolina del Norte
Louis Jordan fue rescatado este viernes a unos 300 kilómetros de la costa atlántica de Estados Unidos tras 66 días desaparecido. El hombre de 37 años izó las velas de su barco el pasado mes de enero para navegar hacia el norte. Su familia denunció la desaparición una semana después pero tras diez días y varias alertas en todos los puertos de la costa estadounidense, la Guardia Costera había abandonado su búsqueda.
La familia del náufrago habla de un “milagro”. El joven estaba familiarizado con su embarcación, pero según han explicado personas de su entorno, carecía de los conocimientos necesarios para navegar en alta mar. La Guardia Costera le encontró sentado en el casco de la embarcación, de más de 10 metros de eslora. A su regreso, el joven detalló los métodos con los que ha sobrevivido a la intemperie.
El pescado crudo y el agua de lluvia -según Jordan, sabe a coco- habrían servido para mantenerle con vida hasta la llegada del rescate en la costa de Carolina del Norte. “La última vez que recogí agua de lluvia fue con un bidón de 10 litros y fue la más fresca hasta ahora, la más limpia que había tenido hasta el momento, así que me bañé con ella”, declaró el náufrago en una entrevista tras ser rescatado. Según las autoridades de Carolina del Norte, desconocen cuándo se produjo el naufragio.
Jordan les explicó que se mantuvo con vida gracias al racionamiento de la comida que ya llevaba en el barco, junto lo que pescó con una pequeña red. Asegura que enfermó al tomar algas marinas pero que al sacarlas del agua se dio cuenta de que “había pequeños moluscos viviendo en las hojas y tenían muy buen sabor”.
Las autoridades médicas han revelado que el joven sufría una lesión en el hombro y deshidratación en el momento de ser rescatado. A su llegada a la costa, Jordan caminó por su propio pie y sin asistencia hasta un helicóptero que le trasladó a un hospital en Norfolk, (Virginia) donde fue examinado por los médicos.
El joven estadounidense había vivido durante los últimos meses en el mismo barco, un velero de los años 50, amarrado en un puerto de Carolina del Sur, hasta que en enero informó a su familia de que saldría a navegar y pescar. “Ha sido muy difícil no saber nada de él desde entonces”, aseguró su padre al conocer la noticia. “Siento que es la respuesta a todas nuestras plegarias”. Según le había explicado Jordan, éste perdió el control de su velero “Angel” cuando se le partió el mástil.
Su madre, Norma Davis, declaró a la agencia Associated Press que esperaban su regreso a los pocos días, pero su ausencia les hizo pensar que había ocurrido algo. “Para nosotros esto es un milagro, estamos maravillados porque lo hayan encontrado vivo”.
Tras la desaparición de Jordan, la Guardia Costera de EE UU envió alertas a todos los puertos y embarcaciones en la región para que alertaran de cualquier avistamiento. Las autoridades también investigaron cualquier movimiento financiero que delatara la presencia del joven en otros Estados, pero nunca encontraron su rastro. Este jueves, un petrolero alemán avisó de que había visto a un hombre en un barco a la deriva a unos 300 kilómetros del Cabo Hatteras, en la costa de Carolina del Norte.