La difusión del patrimonio cultural, no sólo es un deber institucional
Bienes arqueológicos, paleontológicos

La difusión del patrimonio cultural, no sólo es un deber institucional sino un compromiso con todos los mexicanos: Teresa Franco

 

 

12/12/2013 Fuente inah. *** Su alcance en la divulgación del conocimiento hace de la revista Arqueología Mexicana casi tan importante como la arqueología misma: Rafael Tovar, presidente del Conaculta

 

 

*** Arqueología Mexicana se ha mantenido durante dos décadas gracias a una relación “virtuosa de voluntades”, señaló María Nieves Noriega

 

 *** La revista ha recibido 15 premios, entre ellos, sobresale la Medalla Unesco, otorgada en 2012

 

 

“La revista Arqueología Mexicana nació con la idea de lanzar una palabra que rompiera la frontera entre los especialistas y el público lector. Este nuevo discurso fue posible gracias a la alianza entre la academia, la administración pública y el sector privado”, dijo Teresa Franco, directora general del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) al recordar el advenimiento de una publicación que está celebrando dos décadas de existencia.

 

 En la celebración del 20° aniversario de Arqueología Mexicana, que tuvo lugar la víspera en el Museo Nacional de Antropología (MNA), la directora general del INAH señaló que desde sus primeros números, la revista empezó a gustar no sólo a los propios arqueólogos y a otros especialistas de las ciencias antropológicas, sino al gran público, al que estaba dirigida. Allí radicó el secreto de su éxito y su permanencia en los quioscos, bibliotecas y librerías.

 

 Teresa Franco recordó a los arqueólogos que impulsaron el proyecto editorial desde su fundación: Guadalupe Mastache, Joaquín García-Bárcena, Enrique Nalda y Alejandro Martínez, ya fallecidos. Asimismo, mencionó el trabajo de Mónica del Villar, editora por una década, y a Jaime Bali, quien era Coordinador Nacional de Difusión del INAH cuando surgió la publicación; anunció que para 2014 estará disponible la versión digital de Arqueología Mexicana en la Web para iniciar la conquista de las nuevas generaciones.

 

 La titular del INAH subrayó el valor crucial y trascendente de la difusión en las tareas del INAH, pues consideró, sólo así puede fructificar la investigación y la conservación tiene razón de ser. “Por eso en el aniversario de Arqueología Mexicana, que se celebra justo en el preludio de los 75 años del INAH, quiero dejar patente que seguiremos dando a las tareas de difusión del patrimonio de nuestra nación todo el impulso y todo el respaldo que sea necesario; es no sólo un deber institucional, sino un compromiso con todos los mexicanos”.

 

 

 

Arqueología Mexicana importante por su alcance en la divulgación del conocimiento

 Rafael Tovar y de Teresa, presidente del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), explicó por su parte que si en un principio el modelo de colaboración entre el sector público y el sector privado causó cierta preocupación en círculos oficiales, ahora el tiempo ha demostrado que se tienen que fortalecer este tipo de proyectos.

 

 El titular del Conaculta destacó que Arqueología Mexicana es una “revista de arqueología, casi tan importante como la arqueología misma” porque es un proyecto cultural de difusión del patrimonio arqueológico de México y de otras partes de mundo, de gran alcance en la divulgación del conocimiento; también porque en ella han participado más de 900 especialistas tanto nacionales como extranjeros, no sólo del INAH sino de múltiples instituciones.”

 

 

 

Dos décadas gracias a una relación “virtuosa de voluntades”

María Nieves Noriega de Autrey, directora de Arqueología Mexicana, explicó por su parte que desde su concepción, la revista tuvo una noción muy clara de su misión: divulgar a través de una publicación de alto tiraje el conocimiento científico sobre el pasado prehispánico, directamente de la pluma de los investigadores, con un lenguaje accesible para el gran público, con la mejor calidad y el menor precio posible.

 

 La directora agregó que la revista se ha mantenido durante dos décadas gracias a una relación “virtuosa de voluntades”, como la de los autores, de traducir los temas más profundos y complejos; la institucional, tanto de directores de museos y zonas arqueológicas y de Centros INAH en todo el territorio nacional, quienes mostraron disposición para trabajar con los editores; así como la empresarial de la Editorial Raíces, por mantener la viabilidad económica del proyecto y su eficiente distribución.

 

 María Nieves Noriega recordó que en un principio los textos parecían informes técnicos. El equipo comenzó a trabajar en la edición de los artículos para hacerlos accesibles a un lector que no es especialista; en esta labor —menciona Noriega— es necesario volver al autor continuamente, preguntarle qué quiere decir, así, de la mano de los investigadores fuimos aprendiendo a traducir el lenguaje especializado, a uno para todo público.

 

“Arqueología Mexicana no es una publicación científica pero tiene una virtud muy grande: está hecha por los especialistas”, dice por su parte Enrique Vela, arqueólogo de formación, quien trabaja en la revista desde su primer número y actualmente es su editor. La calidad de los contenidos se debe a que los autores son reconocidos investigadores en las ramas de la arqueología, la historia y la etnología, como Miguel León-Portilla, Alfredo López Austin, Eduardo Matos Moctezuma, Roberto García Moll, Leonardo López Luján y Johanna Broda.

 

 En 20 años, Arqueología Mexicana ha publicado 124 números bimestrales y 53 ediciones especiales; la suma de todos los ejemplares acumulan la cifra de seis millones, mismos que si se colocaran uno seguido de otro cubrirían una ruta cercana a los 35 kilómetros; las páginas han sido nutridas por más de 900 autores procedentes de todas las instituciones que hacen investigación del pasado prehispánico, tanto en México como en otros países.

 

 Entre dichas instituciones se cuentan: la UNAM, los colegios de México y de Michoacán, el Centro de Investigación y Estudios Superiores en Antropología Social, las Universidades Iberoamericana y de las Américas, así como de Arizona, Brown, Princeton, Michigan, Tulane, Harvard, Pennsylvania y Colorado, el Instituto Tecnológico de Massachusetts y la Smithsonian Institution, de Estados Unidos; en tanto que de Europa, el Museo Etnológico de Berlín, la Universidad Complutense de Madrid, la Sorbona, la de Tolouse, la de Leiden y el Centro Nacional para la Investigación Científica de Francia.

 

 Por el trabajo realizado, la revista ha recibido 15 premios, entre los que sobresale la Medalla Unesco, otorgada en 2012.

 

 En el presídium también estuvieron Alfredo López Austin, destacado antropólogo de la UNAM; Eduardo Matos Moctezuma, profesor emérito del INAH; César Moheno, secretario técnico del INAH; Antonio Saborit, director del Museo Nacional de Antropología; Bernardo García Martínez, representante del Comité Científico Editorial de la revista; el fotógrafo Guillermo Aldana y Enrique Vela, el editor de Arqueología Mexicana.