El real brasileño sigue en caída libre pese a la intervención del Banc
Comercio Exterior

El real brasileño sigue en caída libre pese a la intervención del Banco Central

 

 

23-08-2013 El miércoles el dólar cotizó a 2,451 por unidad. El presidente del Banco Central canceló su viaje a la cumbre global de Jackson Hole por la situación

 

 

 

Ni las declaraciones de los funcionarios de Dilma Rousseff ni los esfuerzos del banco central en el mercado cambiario pudieron ayer contra la convicción de que la Fed está lista para empezar a aminorar el ritmo de estímulo de monetario.

 

Así se desprendió de las minutas divulgadas de su última reunión y si bien aún no resultan claros los tiempos, los inversores del mundo tomaron nota con otra ola de ventas en monedas emergentes.

 

El real brasileño se desplomó otro 2,4% hasta los 2,451 unidades por dólar, su menor cotización desde el 9 de septiembre, cuando el mundo sentía los efectos de la crisis de las hipotecas iniciada en Estados Unidos, que derivó en la estrepitosa quiebra del banco de inversión Lehman Brothers.

 

El banco central de Brasil insistió con su estrategia de venta de swaps cambiarios, que equivale a un inyección de dólares en el mercado de futuros, y volcó unos u$s 1.800 millones a través de esta herramienta. Pero no pudo evitar el mayor declive de la moneda en 20 meses, que amenaza con dar por tierra con el esfuerzo por mantener a raya la inflación.

 

El índice de la inflación de Brasil IPCA-15, difundido el miércoles, fue de 6,15% en los 12 meses a mediados de agosto, debajo del 6,40% del mes previo. Es el segundo mes seguido en el que la inflación se mantiene debajo del 6,5%, el techo del rango oficial.

 

Sin embargo, los analistas no se mostraban demasiado aliviados. La inflación se mantiene en su nivel más bajo del año fundamentalmente debido tanto a factores estacionales como excepcionales, como es el caso de la decisión política de posponer la suba de la tarifa del transporte público tras las protestas masivas.

 

"Este dato, sumado a la depreciación reciente del real, nos lleva a pensar en un ascenso firme de los precios hacia adelante", comentaba ayer la gente de Nomura.

 

Mientras tanto, el presidente del Banco Central de Brasil, Alexandre Tombini, canceló su viaje a Estados Unidos para acompañar de cerca la evolución de los mercados locales. Tombini tenía previsto participar esta semana en un encuentro organizado por la Reserva Federal de Kansas City, en Jackson Hole en Estados Unidos. Pero el derrape de casi 20% del real en los últimos tres meses parece haberlo convencido de la necesidad de quedarse en casa.

 

La entidad monetaria subió la tasa de interés de referencia más que cualquier otra en el mundo este año, con un alza acumulada de 1,25 puntos porcentuales desde el mínimo histórico de 7,25% que alcanzó el costo del dinero en abril.

 

Hoy el mercado descuenta que ese ciclo de endurecimiento monetario se profundizará para evitar que la devaluación se traslade a precios.

 

El martes, Tombini había advertido al mercado que los operadores llevaron demasiado lejos la especulación sobre las tasas, lo que ayudó a descomprimir un poco las expectativas.

 

Así y todo, hay analistas que creen que el Banco Central se verá obligado a subir la Selic hasta niveles cercanos al 10% para contrarrestar los efectos de la estrategia de salida de Estados Unidos en materia monetaria.