Los chicos y la ecología
Medio Ambiente

Los chicos y la ecología

 

 

29/07/2014 Fuente lanacion. Si hay algo que representa el porvenir de nuestro planeta y el anhelo de una vida mejor son los niños. Por eso resulta tan trascendental que los más pequeños reciban una educación adecuada, ya que no sólo están más abiertos y propensos a aprender, porque lo hacen como un juego, sino que muchas veces resultan los mejores maestros. ¿Quién se atreve a no cerrar una canilla, a no apagar la luz, a no dejar de fumar cuando un hijo o un nieto lo piden? Nos incomodan porque sabemos que nos hablan desde la sabiduría.

 

Las nuevas generaciones tienen más conciencia del cuidado de nuestro planeta debido a los programas de educación ambiental que reciben en las escuelas, algo que habría evitado muchos daños si los hubiéramos recibido quienes hoy somos responsables de las actividades que impactan en la Tierra. Se está educando a los chicos en una materia que para muchos adultos resulta novedosa: son principios y actividades que se enseñan en los primeros grados, que contienen los conceptos básicos que establecen la relación del ser humano con el planeta, sobre el reciclaje, la gestión de residuos, la conservación del ambiente. En esa etapa de la vida, las enseñanzas se incorporan definitivamente, adquieren trascendencia y, paradójicamente, hacen que los niños se transformen en verdaderos maestros. Así se transforman en el mejor instrumento para instalar hábitos saludables dentro de una familia: la palabra o la simple mirada de un niño pueden tener más impacto en una conducta de los padres que a la inversa.

 

Es una enseñanza ética que proviene de la más esencial de las necesidades: cuidar el sitio donde vivimos y prepararlo para recibir muchas más personas en él. Acciones como no derrochar el agua, no dejar equipos eléctricos encendidos o reciclar son determinantes en cuanto a la adquisición de una cultura. Es cierto que muchas de las pequeñas acciones que se realizan o promueven en la escuela o en la casa pueden carecer de un impacto profundo en el ambiente; sin embargo, lo tienen en la formación de esas personas que más adelante estarán a cargo de administrar los recursos y las bellezas del planeta.

 

Por eso resulta fundamental que los niños enriquezcan sus vivencias y tengan contacto con áreas verdes, el campo, las montañas, los ríos, y todo lo que engloba la naturaleza. Apreciar el mundo natural y actuar en correspondencia con estos sentimientos contribuirá a su cuidado y preservación. Resulta muy positivo que las escuelas incorporen programas de educación ambiental que desarrollen valores en cuanto al cuidado del medio ambiente: es tan importante pensar en el planeta que les dejamos a las futuras generaciones como pensar en las generaciones futuras que le dejamos a nuestro planeta..