Envío de droga por encomiendas es el nuevo boom del contrabando hormiga
02/12/2014 Fuente territoriodigital. La modalidad va en aumento por la alta posibilidad de que el envío llegue a destino. En lo que va del año se incautaron unas 20 encomiendas con marihuana. El mes pasado fue detenido un matrimonio posadeño
POSADAS. Made in Paraguay decía la inscripción en los paquetes de marihuana que estaban dentro de tres cajas de una encomienda. En total pesaban casi 61 kilos y habían sido despachados en esta ciudad, con destino a Buenos Aires.
Los remitentes, un matrimonio posadeño que por su modo de vida nadie siquiera sospechaba que estaría ligado al narcotráfico; el destinatario, una mujer oriunda de Buenos Aires que fue arrestada junto a su hija, a quien pidió que la acompañe al correo.
Hasta ahora nadie de los cuatro detenidos rompió el silencio. Tienen miedo porque accedieron a una organización narco para llevar adelante la tarea más riesgosa del negocio: trasladar la droga hasta los lugares de venta y consumo.
El caso ocurrió hace pocas semanas y es uno de los tantos que demuestran que el envío de droga desde esta provincia hacia a las principales ciudades del país mediante encomiendas, está en pleno crecimiento debido a la cantidad de controles terrestres que existen. Es riesgoso pero pocas veces descubierto, aunque los datos a los que accedió El Territorio indican que en lo que va del año y mediante largas investigaciones, las autoridades han logrado decomisar unas 20 encomiendas con diversas cantidades de marihuana e incluso cocaína de alta pureza.
“Es una modalidad que creció muchísimo y cada vez nos encontramos con más y más casos”, confió un investigador local para quien el fenómeno tiene que ver con que el método permite mandar droga de a poco, pero constantemente y tiene menos riesgos que contratar a una persona para el transporte.
“No hay que pagar pasaje ni darle la comisión a nadie. Además las personas hablan, los pueden delatar y los paquetes no, ya que mayormente contienen datos falsos. Es la nueva modalidad del contrabando hormiga que se impone,” concluyó una fuente consultada.
Los números cierran por donde se lo mire. El margen de ganancia es tan grande que aún si la mitad de los cargamentos enviados fuesen interceptados, el rédito económico continúa siendo asombroso y si gana el narcotráfico, también gana el que completa el envío.
Con datos falsos
Según la información obtenida por El Territorio, la mayoría de los envíos se hacen con documentos falsos, a veces pertenecientes a personas fallecidas y las direcciones también son irreales, por lo que para lograr alguna detención debe haber una investigación previa y atraparlos cuando despachan el paquete o bien, cuando lo retiran.
En cuanto al destinatario, las direcciones suelen ser reales, pero lo que no existe es la persona o está ausente a propósito al momento de la entrega. De esa forma el narco se asegura que la Policía no lo esté vigilando y evita el arresto cuando recibe el paquete en el domicilio.
Al no estar presente o no existir el destinatario, la empresa de correo lleva la encomienda al depósito central y pocos días después, se presenta la persona con todos los documentos para retirar el envío.
Las incautaciones hechas hasta el momento indican que las cantidades más pequeñas suelen ser enviadas por correo común, en tanto que las más importantes (de hasta 60 kilos) se camuflan en encomiendas con algún tipo de contenidos y en cajas debidamente precintadas. A la hora de escribir los destinos, la mayoría lo hace a máquina.
Posadeños procesados
El último antecedente de este tipo que involucró a dos posadeños data de principios del mes pasado y fueron descubiertos porque los detectives de Prefectura Naval, durante varios meses, siguieron de cerca los pasos de las mujeres a quienes iba dirigido el envío.
Con el dato concreto de que por lo menos desde hace dos años recibían droga por encomiendas, se inició el operativo apenas llegaron las últimas tres cajas a la sucursal de OCA en Quilmes y al cabo de una semana, madre e hija fueron a retirarlas.
No tenían idea de que sus movimientos eran seguidos y al salir del local supieron que su plan quedó al descubierto. Dentro de tres cajas de jabón en polvo los prefecturianos secuestraron 61 kilos de marihuana e inmediatamente las damas fueron detenidas.
Mientras eso ocurría en Buenos Aires, en esta ciudad se allanó la vivienda del remitente con una orden del juez federal de Lomas de Zamora, Alberto Santa Marina. Fue detenido un hombre mayor de edad, identificado como Samuel R. (39) y su pareja, Marisa G. (37).
Junto a las prueba recolectadas en el allanamiento a su propiedad, el matrimonio fue trasladado a la Capital del país donde, junto a las mujeres que recibieron en envío, fueron procesados con prisión preventiva por el delito de “transporte de estupefacientes agravado.
De acuerdo al magistrado interviniente, no era la primera vez que el cuarteto delictivo utilizaba el correo privado para introducir la droga en otra ciudad. Coordinaron cada uno de los envíos y el despacho de las encomiendas desde Posadas.
Unos meses antes, la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip), a través de la Aduana, secuestró una encomienda que en su interior contenía más de 40 kilogramos de marihuana. La droga estaba oculta en una caja de madera sellada con silicona y cerrada con tornillos.
Fue el Juzgado Federal de esta ciudad el que autorizó la apertura del paquete, en cuyo interior los agentes encontraron 50 ladrillos del estupefaciente embalado con cinta. Posteriormente se produjo la detención de la persona que debía recibir la droga, mediante la modalidad de entrega vigilada en Buenos Aires.