Mi planta de Naranja Lima
de José Mauro de Vasconcelos

MI PLANTA DE NARANJA LIMA. DE INTERÉS GENERAL

 

 

Fuente Wikipedia. Mi planta de naranja-lima (O Meu Pé de Laranja Lima) es una novela de José Mauro de Vasconcelos, y una de las más leídas de la nueva literatura brasileña. El autor continúa la historia en Vamos a calentar el sol. Está narrada en primera persona y posee un altísimo nivel autobiográfico.

 

Encabezó la lista de best-sellers en 1968, año de su primera edición. Posteriormente, fue traducida a 32 idiomas y publicada en 19 países. Ha sido adoptado como texto lectura a nivel de enseñanza primaria.

 

Tres telenovelas se han realizado en base a esta obra: en 1970 para la Rede Tupi, y en 1980 y 1998 para la Rede Bandeirantes. La novela de 1998 ha sido emitida también en Ecuador por Ecuador TV y en Venezuela por Tves. También se realizaron varias adaptaciones al cine, televisión y teatro, siendo la dirigida por Aurelio Teixeira en 1970 la primera para el cine. En 2011 se presenta su segunda versión cinematográfica.

 

Resumen

 

Narra la historia de un niño extraño llamado Zezé, que a sus cinco años siente lo que significa ser pobre. Él y su familia se mudan de vivienda por motivos económicos y cerca de esa casa, en una zanja encuentra un pequeño árbol de naranjo y lo bautiza como "Minguito" o "Xururuca" y con él comparte sus experiencias y lo hace su amigo imaginario. En su imaginación, Xururuca es un ser fantástico que puede imitar a varios personajes de cine, hablar, correr e incluso transformarse en pony y cabalgar.

 

Zezé vive con su papá, que está sin empleo, su mamá es "hija de indios", trabaja en una fábrica, y sus hermanos: Jandira, Antonio o "Totoca" y Gloria, que lo defiende de los maltratos que recibe por parte de sus padres y demás hermanos, y su hermano menor "El rey Luis" como él lo llama y otros dos hermanos muertos. También está la abuela Dindinha y el tío Edmundo quien le enseña muchas cosas culturales y que siempre se refiere a Zezé como un "niño precoz", pues aprendió a los cinco años a leer sin ayuda alguna. Dicho motivo es excusa para llevarlo al colegio aumentándole falazmente la edad a seis. Ahí conoce a Cecilia Paim su maestra.

 

Él y otros niños juegan el "murciélago", que consiste en trepar en la parte trasera de un coche y pasear gratis por la ciudad; nadie se anima a trepar en el carro de Manuel Valadares un gordito de carácter fuerte. Zezé se atreve pero es sorprendido y castigado por éste. Al pasar los días Zezé, por querer coger guayaberas cae en una zanja y se corta el pie con un vidrio y es auxiliado por Gloria. Al día siguiente, cuando va al colegio es visto por Manuel y se compadece de la herida del niño, lo lleva a la farmacia y lo hace curar, ése será el inicio de una tierna amistad y el amor filial crecerá entre ambos, pero esa amistad será interrumpida por el El Mangaratiba, ferrocarril de la ciudad. Con la muerte de "Portuga", así le llamaban a Manuel, y de Minguito, Zezé maduro precozmente.

 

 

Fuente taringa.net. Primera parte:

 

 

 

1) El descubridor de las cosas: Zezé, hijo de una familia pobre, camina con su hermano Totoca, quién le enseña cosas, como a cruzar la carretera Río-San Pablo. Ambos van a ver la casa donde, próximamente, se van a mudar, ya que su padre está sin empleo y no han pagado el alquiler de la casa vieja. Zezé aprende a leer con sólo cinco años y sin que nadie le enseñe, por esta razón su tío Edmundo le regala un caballo de juguete que él le había pedido.

 

2) Una cierta planta de naranja-lima: en la familia de Zezé, cada hermano mayor cuidaba de uno menor. Zezé cuidaba a Luis y jugaban mucho tiempo en el patio. Toda la familia fue a visitar la casa nueva, en ella los hermanos de Zezé escogieron un árbol para apropiarse de él, pero Zezé tuvo que conformarse con una pequeña planta de naranja-lima. De pronto, Zezé, comienza a hablar con su planta y se hacen muy amigos.

 

3) Los flacos dedos de la pobreza:  Zezé se entera que vendrá al pueblo un camión lleno de juguetes para repartir y le pide a su hermana Gloria que lo acompañe. Al otro día Zezé prepara a su hermanito Luis para ir al reparto de juguetes, Gloria no iba a poder acompañarlos, y por eso se van con el cartero. Éste los deja antes de destino y los dos hermanos siguen caminando solos. Van muy lento a causa del cansancio y cuando llegan, el camión ya se había ido. Están a un solo día de navidad, y Zezé decide regalarle su caballo de juguete a Luis. Al otro día Zezé descubre que no había recibido regalos y dice: “¡Qué desgracia es tener un padre pobre!”, delante de su papá, y este se enoja y se va. Zezé trabaja todo el día, y con lo que recauda le compra un paquete de cigarrillos a su padre, y con esto se reconcilian.

 

4) El pajarito, la escuela y la flor: la familia de Zezé se termina de cambiar de casa. Zezé se porta muy bien, hasta que asusta a una mujer haciéndole creer que una media vieja es una cobra. Zezé recibe una paliza cuando lo descubren. Zezé luego de una charla con su tío Edmundo, se da cuenta de que ya no necesita el “pajarito” de su interior (que le había ayudado a descubrir las cosas) y por eso, lo libera. Zezé comienza la escuela y le lleva flores a su maestra, hasta que ella se da cuenta que esas flores son robadas, por eso le dice a Zezé que no traiga más flores, que cada vez que mirara el florero, se imaginaría que tenía hermosas flores.

 

5 )En una celda he de verte morir: Zezé consigue cera de velas de velas y encera los escalones de la entrada del casino y una señora se resbala y se cae, afortunadamente (para Zezé) la noticia no llega a su casa. Zezé deja de ir los martes a la escuela y se encuentra con Ariovaldo, con quien canta y vende folletos a la gente. Ariovaldo se enoja con una señora porque ésta le dijo que era un explotador y entonces él la amenaza con un cuchillo.

 

 

Segunda parte:

 

 

1) El “murciélago”: cada mañana que Zezé va a la escuela se cuelga de los autos por la parte trasera y viaja oculto. Él intenta viajar de “murciélago” (porque así le llamaban) en el auto lujoso del “Portugués”. Cuando se cuelga y el coche arranca, Zezé se cae y el “Portugués” lo descubre y le da una palmada de castigo. Luego Zezé pelea con uno de los compañeros de Totoca (ya que él no se animaba) y sale muy herido.

 

2) La conquista: Zezé realiza otra travesura: se mete en el patio de la vecina y ésta lo descubre, con el susto Zezé se clava un vidrio en el pie. Gloria lo cura y no le dice a nadie más lo sucedido. Al otro día Zezé va a la escuela y en el camino se encuentra con el Portugués y éste al verlo lo lleva a que lo curen y le regala galletas y figuritas. Zezé se hace amigo del Portugués y olvida lo sucedido anteriormente.

 

3) Conversaciones de aquí y allá: Zezé comienza a juntarse con el Portugués y se hacen los mejores amigos. Conversan sobre sus vidas y el Portugués le dice a Zezé que puede hacer el “murciélago” en su auto y Zezé lo hace.

 

4) Dos palizas memorables: Totoca le enseña a Zezé a hacer un globo, a Zezé le gusta la idea y consigue plata para comprar el material necesario. Cuando estaba haciendo el globo, su hermana Jandira, lo llama a comer pero Zezé se niega a ir hasta que no acabe con su globo. Jandira se enoja mucho y lo trae a la fuerza rompiéndole su globo. Zezé insulta a su hermana y ésta lo golpea, luego Totoca también lo golpea hasta que entra Gloria y defiende a Zezé. Luego lo recuesta y éste se mejora. Poco después, Zezé encuentra a su padre muy triste y le canta una canción para animarlo. El padre se cree que le está faltando el respeto y lo golpea muchas veces. Otra vez entra Gloria a defenderlo y el papá de Zezé se arrepiente y hecha a llorar. Zezé le dice a su madre: “Mamá, yo no debía de haber nacido”.

 

5) Suave y extraño pedido: Zezé luego de reponerse de la golpiza va a ver a su mejor amigo, el Portugués (a quien le decía Portuga), y le cuenta lo ocurrido. Zezé estaba muy triste y le dice que se va a tirar debajo del tren “Mangaratiba”, pero el Portuga lo convence de que no lo haga. Al otro día los dos se van a pescar, Zezé le había contado al Portuga todas las desgracias que afrontaba su familia y le pide que lo adopte como a un hijo. El Portuga le explica que no puede hacer eso y le dice que de ahora en más, lo tratará como a un hijo.

 

6) De pedazos y pedazos se forma la ternura: Zezé sigue viendo al Portuga y contándole todo a “Minguito” (su planta de naranja-lima). Mientras Zezé está hablando con su planta Totoca se le acerca para pedirle plata prestada y le cuenta que van a ensanchar la calle y por esa razón van a cortar a su planta de naranja-lima. Zezé se pone muy triste y hecha a llorar.

 

7) El “mangaratiba”: Zezé está en la escuela y se entera por uno de sus compañeros que el tren mangaratiba (así se llamaba) había atropellado al coche del Portugués con él adentro. Zezé se asustó tanto que salió de la escuela corriendo para ver si era verdad. Cuando estaba por llegar, don Ladislao (el dueño de un negocio), lo frena y le dice que no vaya a ver lo sucedido. Zezé se queda deambulando por las calles y llorando, hasta que lo encuentra Totoca y se lo lleva a la casa. La familia de Zezé trata de consolarlo creyendo que estaba triste porque iban a cortar su planta de naranja-lima. Zezé durante mucho tiempo permanece en cama, recibiendo visitas de los vecinos y sus conocidos para darle fuerza para que viva. Zezé quería morir, para encontrarse en el cielo con el Portuga, pero de apoco se va recuperando. Zezé recibe una flor blanca que había dado su planta, y se da cuenta que es el adiós de Minguito (su planta de naranja-lima), ya que iba a crecer y no podría volver a hablar jamás.

 

8) Son tantos lo viejos árboles: El padre de Zezé consuela a éste que seguía triste, y le cuenta que consiguió trabajo y que ya nunca le iban a faltar Le regalos en navidad. Le dice que van a tener una casa grande con muchos árboles sólo para él y que cuando corten a minguito van a estar muy lejos, pero Zezé le responde: “Ya la cortaron, papá, hace más de una semana que cortaron mi planta de naranja-lima”.

 

9) La confesión final: En este capítulo, Zezé ya tiene cuarenta y ocho años y le agradece al Portuga todo el cariño, amor y las cosas que en vida le brindó. También le dice que le contaron las cosas demasiado pronto, y se despide.

 

 

Fuente diarioinca. Relata la historia de Zezé, un niño mestizo que habita una favela o barrio de gran pobreza en el Brasil y que un día, de pronto, descubre el dolor y se hace adulto tempranamente.

 

 En la primera parte de la obra se presentan los personajes más importantes, que son la familia y vecinos más próximos; en especial, se resalta el papel de los hermanos mayor y menor en la familia y también la función de la mujer en esa sociedad que refleja el nivel de pobreza que se vive en algunas partes de Latinoamérica.

 

 Zezé, el protagonista, se muda con su familia a una nueva casa y cada hermano escoge un árbol del jardín, salvo Zezé, que no puede hacer otra cosa sino resignarse a recibir la que nadie quiere, una planta de naranja – lima con la que acaba encariñándose porque en su intensa imaginación es la única planta del mundo que puede hablar.

 

 A partir de ahí se relatan una serie de travesuras y errores en que el niño incurre, no por maldad, sino justamente por su gran inocencia. En muchas ocasiones, sin embargo, sus acciones son interpretadas de la peor manera por sus parientes, especialmente por el padre, quien continuamente le propina grandes golpizas ante las menores faltas. – que en la realidad no son tales - de Zezé.

 

 

 El padre reacciona casi impulsado por la cólera que le provoca el estar sin empleo y sentirse un inútil, un estorbo. A la dureza de la vida llena de maltratos, Zezé opone una activa fantasía: su planta de naranja-lima se convierte en su confidente, su mejor amigo y compañero de juegos.

 

 Gracias a su imaginación, Minguito o Xururuca –que son los nombres que cariñosamente el protagonista otorga a la planta– se convierte en el medio de escape de su dura realidad.

 

 Un jiro importante en la vida de Zezé es su encuentro con el dueño del mejor coche de la ciudad, el Portuga. De él se hará muy amigo, y el Portuga se verá profundamente enternecido por la forma de ser de este niño.

Su amistad crecerá día a día, tronándose en cariño, en amor verdadero, en amor de un padre a un hijo.

 

 Incluso después de una terrible golpiza, el Portuga conversa con Zezé acerca de la posibilidad de adoptarlo, lo que genera en este toda una corriente de ilusiones.

 

 Llega el momento en que la familia de Zezé piensa en cortar su planta de naranja-lima, que cada vez es mas grande de tamaño, pero mas pequeña en su corazón, pues crece en él cada vez más el amor por Portuga; al día siguiente, en clase, Zezé se entera de qué el mangaratiba, el tren de la ciudad, acaba de arrollar a Portuga.

 

 A raíz de esto enferma casi de muerte por un periodo de unas tres semanas, después de las cuales se recupera para vivir lleno de tristeza la nueva situación económica de su casa: su padre a sido empleado en una nueva empresa de la ciudad con un buen cargo, por lo que el tiempo de pobreza parece haber llegado a su fin.

 

 La obra acaba con una carta de Zezé a Manuel Valladares, confesando todos los sentimientos que a tenido a lo largo de su vida, y cómo tuvo que crecer precozmente.