Amar, servir y esperar 6. Sexta y última entrega
de Lope de Vega

Amar, servir y esperar 6. Sexta y última entrega

 

Autor: Félix Lope de Vega. Fuente artelope.

 

2145

te dispones a obligarme;

en lo que te pido advierte,

Don Sancho Tello mi tío

me ha dicho agora que quiere

que me despose esta noche

2150

por muchos inconvenientes,

que con discreta prudencia

destas dilaciones teme,

Celia es mi prima, y a quien

mi amor y mi sangre deben

2155

de su remedio deseos;

fuera desto para verte

ninguno más efectivo,

porque si somos parientes

casándote tú con ella

2160

podré hablarte y verte siempre.

Que pues ha sido tu empresa

honestamente quererme,

¿qué puede querer tu amor

para serlo eternamente?

2165

¿Qué estás pensando?

FELICIANO

No sé

como pueda responderte,

que pide tanta crueldad

no, ingrata, palabras breves,

sino lágrimas del alma,

2170

que tus impiedades siente.

Yo te he amado y te he servido,

no lo digo porque pienses,

que de cuatro pobres joyas

hago cargo a tus desdenes.

2175

En todos los elementos

quiso amor que te sirviese,

en la tierra, cuando estabas

atada a un tronco silvestre

expuesta a seis salteadores,

2180

donde tanto honor me debes.

En el agua, cuando el barco

si no llego diligente,

sepulta tus verdes años

en las orillas del Betis.

2185

En el fuego, aquella noche,

que por descuido se emprende

en tu casa, habrá diez días,

de cuyas llamas ardientes

en estos bracos, en estos

2190

siempre a servirte fieles

fuiste Penate de Troya,

que siempre mis penas eres.

Solo en el viento me falta,

y para que no me quede

2195

sin que en él también te sirva,

quiere el amor que me dejes

en el aire, sin que tenga

donde la esperanza asiente

de mi pensamiento el vuelo,

2200

como pájaro celeste.

¿Cuál mujer a un hombre ha dado

de dos maneras la muerte

a un mismo tiempo?, esta noche

dices que casarte quieres,

2205

¿y que yo también me case?

Dorotea, tú que puedes

cásate, que aunque es crueldad,

consiste en ti solamente;

mas no me cases a mí,

2210

que no es bien que me desprecies

tanto, que me des a otra;

porque cuando las mujeres

naturalmente celosas

dan a otras lo que quieren,

2215

o es vestido que desechan,

o persona que aborrecen.

No pudiste imaginar

invención para ponerme

en mayor riesgo la vida,

2220

que cuando casarte quieres,

darme a quien no ha de querer

vestido que tú deseches,

sobre si me tiene amor

con un fingido accidente;

2225

pero porque ya cruel

el ánimo desfallece,

perdona, que en esta silla

descanse, en tanto que duerme

con este desmayo el alma.

(Siéntase y desmáyase.)

DOROTEA

2230

¡Ay triste!

ANDRÉS

¿Qué has hecho?

DOROTEA

En breve

Andrés trae agua.

ANDRÉS

¿Qué has dicho?,

¿qué Feliciano se muere?

DOROTEA

Ve presto.

ANDRÉS

Será desmayo,

dale esas manos crueles.

(Vase y entra DON DIEGO .)

DIEGO

2235

¿Qué es esto que estoy mirando?,

pero bien será esconderme,

ya que mis celos me traen

donde averiguados queden.

(Escóndese.)

DOROTEA

  Llegando a tal ocasión

2240

mi desventura encubierta,

abra el silencio la puerta

al fuego del corazón.

Declárese mi pasión,

porque estando sin sentido

2245

te diga que te he querido

tan desatinadamente,

que no está mi honor presente

cuando está tu amor dormido.

  Ay, Feliciano, yo soy

2250

quien desde el primero día

que debo a tu cortesía

esto que viviendo estoy,

no una, mil almas doy

a los méritos que quiero,

2255

del más noble caballero

y más digno deste pago,

que con la cruz de Santiago

honró la del blanco acero.

  Siempre, mi bien, te he querido

2260

y te querré eternamente,

cuidado fue diligente

fingir en tu amor olvido,

danme un honrado marido

y debo corresponder

2265

a ser tan noble mujer,

por esto callé, señor,

que yo perdiera mi honor,

el suyo no puede ser.

  Y porque más no he de hablarte,

2270

y por ventura no verte,

casarme, será mi muerte,

con esto puedo obligarte.

La palabra quiero darte,

mi bien, mi gloria perdida,

2275

de solo mi honor vencida

de guardarte eterna fe,

y de que jamás tendré

gusto, si tuviere vida.

  Pues no hay aquí quien me vea,

2280

tomo tu mano en señal

de honesto amor natural,

porque con lágrimas sea.

Mi dura estrella me emplea

en don Juan, tú eres testigo

2285

de que solo el cuerpo obligo,

que para tenerte amor,

sin ofensa de su honor,

el alma casó contigo.

(Vase.)

FELICIANO

  ¡Señora, señora mía!

DIEGO

2290

Aquí no hay más que esperar.

(Vase y sale ANDRÉS .)

ANDRÉS

¿Que aún agua no puedo hallar,

en esta casa vacía?

FELICIANO

  Quedo, Andrés, que ya no importa.

ANDRÉS

¿Resucitaste?

FELICIANO

No sé.

ANDRÉS

2295

Mas yo siempre imaginé,

que hacías la gata morta.

FELICIANO

  Toda mi pena remedia

este bien trazado ensayo.

ANDRÉS

Imitación fue el desmayo

2300

de pasito de comedia.

FELICIANO

  Lindo suceso.

ANDRÉS

¿En qué modo?

FELICIANO

En siguiendo a Dorotea,

que me adora y me desea,

pienso decírtelo todo.

(Vase.)

(Entra ESPERANZA con un búcaro en una salvilla y toalla.)

ESPERANZA

2305

  Aquí está el agua.

ANDRÉS

Por Dios

que vienes a lindo tiempo,

¿agua falta en esta casa?,

¿o es porque no la bebemos?

ESPERANZA

El almacigar los barros,

2310

o tazas al uso nuestro,

fue causa de no tener

la llave donde están puestos.

ANDRÉS

La limpieza de Sevilla

miro morena en tu cuello,

2315

que le tienen otras muchas

como corteza de queso.

A ver.

ESPERANZA

Echarete el agua.

(Échasela o quiere.)

ANDRÉS

Jesús, desmáyome, muero,

una silla, tú serás

(Siéntase.)

2320

causa de mi muerte presto.

Ay ingrata, que no miras,

que de los cuatro elementos

no te saqué de ninguno:

del agua, yo no la bebo,

2325

de la tierra no sé nada,

porque no he sido conejo;

del aire, no soy poeta,

del fuego, no soy herrero.

ESPERANZA

Si te has desmayado, bebe.

ANDRÉS

2330

Agua no, que es mal momento,

vino vino.

ESPERANZA

Cómo vino,

si es desmayo.

ANDRÉS

Porque entiendo

que procede de frialdad.

ESPERANZA

¿Cómo si el amor es fuego?

ANDRÉS

2335

Porque las morenas son

frescas y hacen el efeto

del color en el amor,

que el blanco es caliente y seco.

(DON DIEGO y FABIO .)

DIEGO

Con la desdicha en que estoy,

2340

todo es sombras cuanto veo.

¿Qué es esto?

ESPERANZA

Hase desmayado

Andrés, vile haciendo gestos,

y trújele un barro de agua,

que soy piadosa en estremo

2345

de ver hombres desmayados.

DIEGO

¿También Andrés?, bueno es esto.

ESPERANZA

En viendo un diciplinante,

particularmente en viendo

estos de plegada alcorza,

2350

que van con el contoneo

haciendo la zarabanda,

por darles agua me muero

y alguna calabazada.

FABIO

Hola, Andrés.

ANDRÉS

Jesús, ¿qué tengo?,

2355

venga el padre del alma

y deme un remedio.

ESPERANZA

Mira que está aquí don Juan.

ANDRÉS

Señor, perdonad os ruego,

que me dan estos desmayos

2360

en faltándome dinero.

Jesús, ¿qué tengo?

venga el padre del alma

y deme un remedio.

(Vase.)

FABIO

Como están de desposorio,

2365

están alegres.

ESPERANZA

¿Yo llevo

este barro y esta salva

con vuestra licencia adentro?

DIEGO

Id con Dios.

ESPERANZA

Jesús, ¿qué tengo?

venga el padre del alma

2370

y deme un remedio.

(Vase.)

FABIO

De lo que me has referido,

ya, señor, que estos se fueron,

estoy sin seso.

DIEGO

Y yo, Fabio,

¿cómo estaré cuando quedo

2375

puesto en tanta confusión?

FABIO

¿Qué piensas hacer?

DIEGO

Si llego

a decir esto a don Sancho,

todo lo que sabes pierdo,

si me desposo esta noche

2380

a fuerza de mi deseo,

será de mi honor infamia,

aunque estoy bien satisfecho

del respeto que ha tenido

Dorotea al honor nuestro.

2385

¿Pero quién ha de fiarle

poco menos que del viento,

pues hubo sabio que dijo,

que eran las mujeres menos?

FABIO

Celia viene, no prosigas.

(Sale CELIA .)

CELIA

2390

A buscar mi prima vengo,

pensé que estaba con vos.

DIEGO

Decís muy bien, en mi pecho,

porque como es imposible

vivir separado el cuerpo

2395

de aquella divina lumbre

de sus tres potencias dueño,

así yo sin que me anime.

CELIA

No dice el entendimiento

que os desposáis esta noche.

DIEGO

2400

Entonces podré ser necio.

(Vanse los dos.)

CELIA

  Si Feliciano por amor suspira

y es alma de su pecho Dorotea,

¿qué intenta mi esperanza?, ¿qué desea?,

¿que al alba nace y a la noche espira?

2405

En vano creo que mis ojos mira,

si el pensamiento en otra parte emplea,

pues no es razón que los engaños crea,

de donde el conocerlos me retira.

Como el que se ha mirado en un espejo,

2410

no deja de su rostro más despojos,

ni queda en el cristal la imagen dellos;

así no quedo en él, si dél me alejo,

pues luego que me aparto de sus ojos,

huye la imagen que miraba en ellos.

(Salen el CAPITÁN BERNARDO y DON SANCHO .)

SANCHO

2415

  Ha sido felicísima jornada,

y esperada de España sumamente.

CAPITÁN

¿Cuándo no fue la plata deseada?,

¿y más don Sancho en la ocasión presente?

SANCHO

Aquí está Celia.

CAPITÁN

El cielo, mi señora,

2420

os haga tan dichosa como puede.

SANCHO

El señor capitán Bernardo.

CELIA

Agora

con vos honrada nuestra casa quede

en tan alegre día,

que solo este favor faltar podía.

CAPITÁN

2425

Luego que de la mar la planta puse

en tierra, me dispuse

a venir a Sevilla solo a daros

el pésame y en parte consolaros

de la desgracia de don Juan.

SANCHO

No entiendo,

2430

señor Bernardo, lo que vais diciendo.

Mas ya sabréis la muerte de mi hermano,

y cómo está en mi casa Dorotea.

CAPITÁN

Eso ignoraba, al fin el fin humano,

que fue con tanta edad, consuelo sea,

2435

pero la de don Juan, que fue tan poca

con más razón a lástima provoca.

SANCHO

¿Qué muerte de don Juan?

CAPITÁN

El caballero,

que concertado de casar estaba

con Dorotea, a quien sepulcro fiero

2440

dio el mar, cuando pasaba

la canal de Bahama nuestra flota,

así cometa por los aires rota

la luz desaparece,

y se cierra la flor cuando anochece.

SANCHO

2445

Don Juan, señor Bernardo, está en mi casa,

y mañana se casa,

no sé de quién decís.

CAPITÁN

De quien os digo

le vi espirar en brazos de un amigo

y arrojar a la mar, donde quedaron

2450

sus esperanzas y él, cuando cerraron

círculos breves las heridas ondas

del cuerpo que dio en ellas.

SANCHO

Pues señor capitán.

CELIA

No le respondas.

SANCHO

Si os digo, que don Juan está en mi casa,

2455

que el cielo, el viento, el mar y las estrellas

le trujeron a ser de Dorotea,

¿cómo queréis que crea

que es muerto, que le vistes arrojado

al mar y entre sus ondas sepultado?

CAPITÁN

2460

¿Aquí don Juan?

SANCHO

Aquí, ¿de qué os admira?,

alguno os ha contado esa mentira.

CAPITÁN

Mas alguno os engaña

por la distancia desde Lima a España,

y yo palabra os doy de hacerlo cierto,

2465

con que me voy para traer testigos.

(Vase.)

SANCHO

¿Don Juan vivo en mi casa y don Juan muerto?

CELIA

Son fábulas que siembran enemigos,

mal conoces a algunos,

que afirman importunos

2470

las cosas que no vieron,

porque a otros mentirosos las oyeron.

Hay hombres que con lenguas de demonios

viven de testimonios

sembrando en la ciudad lo que desean,

2475

porque sea verdad mientras lo crean.

SANCHO

Confuso estoy, que el capitán no es hombre

que esto afirmara, o le ha engañado el nombre.

(Sale DON DIEGO .)

DIEGO

  Con los ojos en mi engaño

apenas quejarme puedo,

2480

tanta es la fuerza del miedo

y el rigor del desengaño.

  ¿Qué quieres amor cruel?,

¿puedo negar lo que vi?

CELIA

Señor, don Juan está aquí.

(Vase.)

SANCHO

2485

Vete y déjame con él.

  Señor don Juan, no ha un instante,

que un capitán hombre honrado,

y amigo mío me ha dado

una nueva, que es bastante

2490

  a poner en confusión

mi casa y mi honor, de forma,

que si a la verdad conforma

la trágica relación,

  no sé qué ha de ser de mí.

DIEGO

2495

¿Pues qué os ha dicho?

SANCHO

Que vio

muerto a don Juan.

DIEGO

Si soy yo,

y vivo me veis aquí,

  ¿qué puede causaros pena?

SANCHO

El no saber si sois vos.

DIEGO

2500

¿Eso decís?

SANCHO

Sí por Dios,

que es honra y no es honra ajena.

DIEGO

  Buena ha sido la invención

de Feliciano, mas ya

que en tanto peligro está

2505

mi honor y reputación,

  sabed, que con pensamiento

de engañar a Dorotea

vino de Madrid, desea

dilatar mi casamiento,

2510

  y con ese capitán,

los dos han hecho concierto,

pues fingiendo que soy muerto,

mientras que vienen y van

  a Lima para saber

2515

la verdad, podrán seguros

gozar contra mí perjuros

lo que yo vengo a perder.

  Mas yo le pondré en la boca

freno tan presto.

SANCHO

Teneos,

2520

que de sus locos deseos

satisfaceros me toca

  por camino más discreto.

Él viene, dejadme aquí.

DIEGO

Discretamente salí

2525

deste peligroso aprieto,

  pero no podrá durar

mi engaño. Confuso estoy.

(Vase y sale por otra parte FELICIANO y ANDRÉS .)

FELICIANO

Buscando esperanzas voy,

sin cansarme de esperar.

ANDRÉS

2530

  Ejemplos me faltan ya

para templar tu locura.

FELICIANO

Todo es vida mientras dura.

ANDRÉS

Aquí nuestro suegro está.

SANCHO

  Señor Feliciano, el cielo

2535

tan dichoso en todo os haga,

que deis envidia a la dicha

y dicha a quien tanto os ama.

Yo tengo que hablaros.

FELICIANO

Creo

que es de mi amor justa paga

2540

ese favor.

SANCHO

Oíd.

FELICIANO

Decid.

SANCHO

Direlo en breves palabras,

aunque pudiera con muchas.

Bañando su hermosa cara

con lágrimas Dorotea,

2545

vivos afectos del alma,

me ha dicho aquí, que os adora

y que por fuerza se casa

con este indiano don Juan.

Si esto es así, mucho errara

2550

en daros a Celia yo,

pues estaban encontradas

aquí las dos voluntades

y no era justo casarla

con quien quiere a Dorotea,

2555

fuera de casar forzada

con don Juan, a mi sobrina.

¿Qué hay en esto?, porque haga

lo que debo a quien yo soy.

FELICIANO

Señor, las cosas llegadas

2560

a tan estrecho rigor,

será forzoso que salga

en público la verdad,

que tuvo el secreto en guarda

por vos y por Dorotea,

2565

mas pues ella se declara,

¿cómo puedo yo encubrir

lo que ha de dar esperanza

al remedio de los dos?

El camino de la plata

2570

tomé viniendo a Sevilla

siendo un amigo la causa,

que pensaba hallar en él,

y pasando una mañana

la procesión de los montes,

2575

que Sierra Morena llaman,

salió rebozado el sol

y de su dorada cara

paró el ceño, en que a la tarde

anegó la tierra en agua,

2580

retirado a unas encinas,

que me sirvieron de capa,

haciendo fieltro a mis hombros

la defensa de las ramas,

hallé a Dorotea en una

2585

las tiernas manos atadas.

No hay para qué referiros

lo que sabéis, esta causa

fue principio al grande amor,

que justamente me paga.

2590

Bien que de volverla a ver,

quedé con desconfianza,

que el darme el hábito vos

me trujo a saber su casa.

Saquela de otro peligro,

2595

que como el cielo la guarda

para mí, la guardó a ella

en tan justa confianza.

En mis brazos la saqué

entre la tierra y el agua

2600

del Betis, en cuya orilla

me buscaba su desgracia.

Apenas a la ciudad

nos trujo una misma barca,

cuando el indiano de Lima

2605

en vuestra puerta la aguarda.

Él la recibe, yo muero,

él la abraza, ella le engaña,

él la gana, ella me pierde,

él amoroso, ella ingrata,

2610

él adora, ella aborrece,

él con gusto, ella forzada,

él dichoso, los dos tristes,

él con vida y yo sin alma,

de cuyos brazos, si agora

2615

mis esperanzas la sacan,

será más que con los míos

del fuego de vuestra casa.

Mucho os pudiera decir,

mas donde las almas hablan

2620

y escuchan hombres discretos

lo que ellos presumen basta.

SANCHO

Todo lo que aquí os he dicho

ha sido invención trazada

para saber vuestro pecho,

2625

que de cuanto aquí se trata

está Dorotea inocente,

y porque a mí no me espantan

efetos de amor, no digo

más de que solo me agravia,

2630

que para que no se case

hagáis que venga a mi casa

a darme tan malas nuevas

un capitán de la armada,

como decir, que don Juan

2635

es muerto y que a mí me engaña

don Juan con nombre fingido.

FELICIANO

Por aquesta señal santa

que si lo ha dicho ha mentido

y yo le haré con la espada.

SANCHO

2640

No haréis tal, porque no es él,

y pues por fuerza se casa

Dorotea, ella será,

que cuando de veras aman

las mujeres con ingenio

2645

sutil, buscan tales trazas,

que consiguen imposibles.

Dadme aquí vuestra palabra

de no decir a don Juan

ninguna de lo que pasa,

2650

que con una diligencia,

que solamente me falta

os la doy que será vuestra,

porque temo que me engañan.

(Vase DON SANCHO .)

ANDRÉS

¿Qué es esto en que andas señor?

FELICIANO

2655

¿Ves como ya por el alba

se va descubriendo el sol?

ANDRÉS

¡Oh qué engañosa esperanza!

FELICIANO

Nunca venado mató

el montero que se cansa.

2660

¿Qué no alcanza la porfía?,

servir y amar, ¿qué no alcanza?

ANDRÉS

A muchos ha vuelto locos

la porfía.

FELICIANO

¿Quién pensara

tanto amor en Dorotea?

ANDRÉS

2665

Cuando las discretas callan,

más negocian de secreto

que cuando las necias hablan.

¡Oh cuáles son las mujeres!

FELICIANO

Ángeles, Andrés, las llaman,

2670

porque parecen, sin serlo,

intelectivas sustancias.

ANDRÉS

Yo no entiendo esas razones,

mas lo que una vez agarran

difícilmente lo dejan

2675

y fácil cuando se cansan.

Aquí vienen las dos primas

y mi morena Esperanza,

salve Esperanza de Andrés,

sálvete pulga del alma,

2680

confite vivo, sálvete.

(Entran DOROTEA , CELIA y ESPERANZA .)

ESPERANZA

¿Vienes ya diciendo gracias?

FELICIANO

Déjame hablar majadero.

ANDRÉS

Señor, todo amante maja

con favor en perejil

2685

y con celos en mostaza.

FELICIANO

  Ya, gallarda Dorotea,

va descubriendo el deseo

por los celajes que veo,

el fin que el alma desea.

2690

Y no es mucho que le vea,

pues tú por el mar de amar

al puerto quieres llevar

la nave de mi esperanza,

que tan justo premio alcanza

2695

amar, servir y esperar.

  Amé, serví y esperé,

amó, recibió y pagó

quien vio, quien sintió, quien dio

tanto premio a tanta fe;

2700

partí, llegué, descansé,

dando a un justo porfiar

tiempo, ocasión y lugar,

que al fin vienen a tener

premio, descanso y placer,

2705

amar, servir y esperar.

  Gané tu favor amando

y tu voluntad sirviendo,

porque sirviendo y sufriendo

viví amando y esperando;

2710

hallé esperando y amando

el término de obligar,

a quien me pudo pagar,

porque no fuera razón

quedarse sin galardón

2715

amar, servir y esperar.

DOROTEA

  ¿Cómo o cuándo o quién ha sido,

Feliciano, el que ha pagado

lo que has servido y amado

con lo que me has referido?

2720

  Hoy he de ser de don Juan.

FELICIANO

No encubras por Celia aquí

lo que hoy has hecho por mí

hablando a aquel capitán.

DOROTEA

  ¿Qué capitán?

FELICIANO

Oye aparte.

(Salen DON SANCHO y el CAPITÁN .)

SANCHO

2725

Era forzoso traeros

a averiguar la verdad.

CAPITÁN

¿Es este aquel caballero

que con nombre de don Juan

viene a hacer el casamiento?

SANCHO

2730

Feliciano de Mendoza

es el que pensaba y pienso

dar a Celia, retiraos,

que don Juan llegará presto,

que ya fueron a llamarle.

CAPITÁN

2735

Aquí retirarme quiero

para ver cómo se juntan,

don Juan vivo y don Juan muerto.

(Salen DON DIEGO y FABIO .)

DIEGO

¿Qué es señor lo que me mandas?

SANCHO

Dilatar los casamientos

2740

siempre causa novedades,

siempre envidias, siempre celos.

Feliciano está presente,

que desengañar deseo

de pretensiones injustas.

DIEGO

2745

De Feliciano sospecho

que me pagará el amor,

que justamente le tengo.

FELICIANO

¡Ay triste esperanza mía!

Andrés.

ANDRÉS

Señor.

FELICIANO

Esto es hecho.

ANDRÉS

2750

Ya por la escalera subes.

FELICIANO

Ya doy los pasos postreros.

SANCHO

Dad la mano a Dorotea

don Juan.

ANDRÉS

Ya dices el Credo.

SANCHO

Dásela tú.

ANDRÉS

Ya el verdugo

2755

dio tamborilada al pueblo.

(El CAPITÁN sale.)

CAPITÁN

Tened, señores, las manos.

¿Qué es esto, señor don Diego?,

¿pues vos os fingís don Juan

y sabiendo vos que es muerto

2760

no menos que en vuestros brazos?

DIEGO

Mi error por amor confieso.

ANDRÉS

Albricias, perdonó el rey,

por muchos años y buenos

a vuesa merced le quiten

2765

el nudo ciego del cuello.

SANCHO

¿Pues cómo, no sois don Juan,

y con tanto atrevimiento

habéis entrado en mi casa?

DIEGO

Dejome, don Juan, muriendo

2770

el alma, con que he venido,

siendo de mi amor tercero,

un retrato desta dama.

Pero pues que soy tan bueno,

si no mejor que don Juan,

2775

más rico y más caballero,

como el capitán lo sabe,

pues sabéis que la merezco

por desatinado amor

que dora mayores yerros,

2780

os ruego que me la deis.

FELICIANO

Eso no, porque la tengo

ganada por más servicios

y por más justos deseos.

Fuera de estar la palabra

2785

de don Sancho de por medio,

si no fuésedes don Juan,

pues no siendo el verdadero,

¿por qué ha de ser vuestra acción

más justa contra derecho?,

2790

pues aun después de casados,

siendo engañoso el concierto,

se pudieran descasar.

SANCHO

En tan confusos estremos

yo lo dejo a su elección.

DOROTEA

2795

Pues a Feliciano quiero.

ANDRÉS

Cerró la plana.

DIEGO

Señora

lo que era justo habéis hecho.

Y yo, pues el capitán

sabe quién soy, si merezco

2800

a Celia, sus manos pido.

ANDRÉS

Yo a Esperanza solo un dedo.

CELIA

Yo soy dichosa en ser vuestra.

ANDRÉS

Y tú Cupido moreno,

¿qué dices?

ESPERANZA

Que soy retuya.

FELICIANO

2805

Aquí senado discreto,

amar, servir y esperar

tuvieron tan justo premio,

Roque os ama, Lope os sirve,

y yo vuestro aplauso espero.