Suárez: crudo análisis sobre la droga

25/08/2015 Fuente lanueva. Referentes de la Iglesia abocados a la lucha contra las adicciones aseguraron ayer en Coronel Suárez que el problema de la droga se observa en el país “con solo caminar por las calles”, y advirtieron que los sectores más afectados por el flagelo son los más humildes, que no pueden acceder a las mismas oportunidades que el resto de la sociedad.

“Como dice el Papa Francisco, la droga y el narcotráfico son como una mancha de aceite que se extiende y que, por más que se la limpie, algo siempre queda”, enfatizó monseñor Fernando Maletti, obispo de la diócesis de Merlo-Moreno y presidente del área de Drogadependencia de la Comisión de Pastoral Social de la Conferencia Episcopal Argentina.

El sacerdote estuvo ayer en Suárez para presidir la Jornada sobre Drogadependencia y Adicciones, organizada por la Arquidiócesis de Bahía Blanca.

Con una mirada crítica, los religiosos presentes hicieron hincapié en que la única manera de combatir la droga es ir a los barrios y acompañar a los adictos en su recuperación.

“En el Conurbano habitan 17 millones de personas -remarcó Maletti- y son muchos los que han caído en la droga. Según lo que nos han dicho, acá en Coronel Suárez también está instalado el problema”.

El diácono Walter Helman, de la diócesis de Quilmes, dijo que cada lugar donde hay necesidades básicas insatisfechas o desprotección es “campo propicio para todo tipo de adicciones”.

“Sabemos que (la droga) no es solo un problema de las clases más bajas, pero sí son ellas las que menos recursos tienen para enfrentarlo una vez que se produce”, añadió el sacerdote Juan Olivera, de Merlo.