Condenados a cuatro años por vender droga
20/06/2015 Fuente elancasti. La pena se dictó en el marco de un juicio abreviado porque los imputados reconocieron sus culpas.
Por unanimidad los jueces del Tribunal en lo Criminal Federal condenaron ayer a Carlos Astuénaga, Cristina Alejandra Ponce, Luis Figueroa a sufrir la pena de cuatro años de prisión tras ser encontrados culpables del delito de tenencia de estupefacientes con fines de comercialización. El cuarto imputado, de apellido Contreras, pidió la probation.
El juicio se realizó bajo la modalidad de abreviado ya que todos habrían admitido su responsabilidad en el hecho. Por esto, tanto el fiscal subrogante Javier Merep como el defensor Víctor García pactaron una pena acorde a lo propuesto por ambos.
Los hechos por los que se juzgó a los tres comenzaron tras el inicio de actuaciones que la División de Drogas Peligrosas tomó de una denuncia anónima realizada a través de la línea 4434400 que publica diariamente El Ancasti. Ahí se daba cuenta de que la abuela de un adolescente de 14 años estaba sufriendo el flagelo en carne propia.
Así y tras casi un año de investigación se pudo comprobar que en los domicilios de los encartados se estarían comercializando distintos tipos de sustancias estupefacientes. El primer allanamiento se realizó en la casa de Astuénaga, quien ya tenía una imputación por un hecho similar. En su casa se halló cocaína, marihuana y dinero en efectivo. En el domicilio de la mujer, ubicado en el barrio Cristo Rey, el hallazgo fue similar.
Los mismos procedimientos se concretaron en la casa de Figueroa, ubicada en el mismo barrio donde encontraron además de marihuana y cocaína, otros elementos utilizados para corte y procesamiento de la sustancia.
En cuanto a Contreras, quien vivía en el mismo barrio, se pudo encontrar más cocaína fraccionada para la venta.
Los cuatro sujetos fueron detenidos y, con su detención, los padres pudieron observar que la venta de sustancias prohibidas en el populoso barrio del sur disminuía.
Todos estos hechos se concretaron entre marzo y junio de 2012 pero no se pudo comprobar una asociación entre todos los comercializadores. Ahora, deberán purgar una pena de 4 años en la cárcel.