Martín Fierro
de José Hernández

MARTÍN FIERRO. DE INTERÉS GENERAL

 

 

Fuente Wikipedia. El Gaucho Martín Fierro es un poema narrativo argentino, escrito en verso por José Hernández en 1872, obra literaria considerada ejemplar del género gauchesco en Argentina, Uruguay y Río Grande del Sur (al sur de Brasil). Debido a que tiene una continuación, La vuelta de Martín Fierro, escrita en 1879, este libro es también conocido como "la ida". Ambos libros han sido considerados como libro nacional de la Argentina, bajo el título genérico de "El Martín Fierro". En "la ida", Martín Fierro es un gaucho trabajador al que la injusticia social lo vuelve gaucho matrero (fuera de la ley).

 

Narra el carácter independiente, heroico y sacrificado del gaucho. El poema es, en parte, una protesta en contra de la política del presidente argentino Domingo Faustino Sarmiento de reclutar forzosamente a los gauchos para ir a la frontera contra el indio.

 

 

Aquí me pongo a cantar,

al compás de la vigüela

que al hombre que lo desvela

una pena estrordinaria,

como la ave solitaria

con el cantar se consuela.

 

 

José Hernández, primera estrofa del Martín Fierro.

 

 

Leopoldo Lugones, en su obra literaria El payador calificó a este poema como "el libro nacional de los argentinos" y reconoció al gaucho su calidad de genuino representante del país, emblema de la argentinidad. Para Ricardo Rojas representaba el clásico argentino por antonomasia. El gaucho dejaba de ser un hombre "fuera de la ley" para convertirse en héroe nacional. Leopoldo Marechal, en un ensayo titulado Simbolismos del "Martín Fierro" le buscó una clave alegórica. José María Rosa vio en el "Martín Fierro" una interpretación de la historia argentina.

 

Este libro ha aparecido literalmente en cientos de ediciones y fue traducido a más de 70 idiomas, entre ellos al esperanto y al quichua.

 

Argumento

 

En El Gaucho Martín Fierro ("la ida"), un gaucho trabajador de las pampas bonaerenses, que vive con su mujer y dos hijos, es reclutado forzosamente para servir en un fortín, para integrar las milicias que luchan defendiendo la frontera argentina contra los indígenas, dejando desamparada a su familia. Su vida de pobreza, es algo muy frecuente en la literatura de la época romantizada; sus experiencias militares no lo son. Al volver, su rancho se encuentra abandonado y su mujer y sus hijos se han perdido. Después, desesperado Martín Fierro mata a un negro en un duelo, lo que lo lleva a convertirse en gaucho matrero fugitivo perseguido por la policía, enfrentándose en batalla contra ellos, consigue un compañero: el sargento Cruz, que inspirado por la valentía de Fierro se une a él en medio de una batalla. Y finalmente huyendo, ambos se ponen en camino al desierto para vivir entre los indios, esperando encontrar allí una vida mejor. Así, concluyendo en que es mejor vivir con los salvajes, que en lo que la 'civilización' les preparaba, termina la primera parte publicada en 1872 con el título El gaucho Martín Fierro.

 

 

El que maneja las bolas,

 el que sabe echar un pial

 o sentarse en un bagual

 sin miedo de que lo baje,

 entre los mesmos salvajes

 no puede pasarlo mal.

 

Entre los momentos más destacados y conocidos de "la ida" se encuentran las desdichas en la frontera (los fortines de frontera con el territorio indio), el duelo con el negro, el enfrentamiento con la partida policial donde el sargento Cruz se pasa de su lado y se vuelve su compañero y la huida al desierto para vivir con los indios. Siete años más tarde, en 1879, José Hernández publicó "La vuelta de Martín Fierro". En su continuación, con el autor en una situación diferente, el perfil ideológico cambia y se aconseja al gaucho adaptarse a la civilización que antes se había despreciado. También aquí se encuentran varias estrofas conocidas por su defensa del gaucho y denuncia de la injusticia social:

 

 

Él anda siempre juyendo,

 siempre pobre y perseguido,

 no tiene cueva ni nido,

 como si juera maldito,

 porque el ser gaucho... barajo!

 el ser gaucho es un delito.

 

 

José Hernández, La vuelta de Martín Fierro, v. 1320

 

Martín Fierro. Es el prototipo del gaucho. Se presenta como cantor, hombre independiente, pacífico, valiente, conocedor del campo y sus actividades y ante todo libre:

 

 

Mi gloria es vivir tan libre,

 como pájaro en el cielo;

 no hago nido en este suelo,

 ande hay tanto que sufrir;

 y naides me ha de seguir,

 cuando yo remonto el vuelo.

 

Su carácter solitario es consecuencia de la pampa que habita, las injusticias que vive lo van transformando, a lo largo de la obra.

El gaucho Martin Fierro sería oriundo de la localidad de Tres Arroyos en la Provincia de Buenos Aires. Otros argumentan que hay documentación que habría vivido en el Pago de Monsalvo, en las zonas aledañas a la actual ciudad de Maipú.

 

[] Análisis

 

Los numerosos análisis del Martín Fierro han destacado, tanto las diferencias psicológicas del personaje, como los cambios del propio José Hernández entre los siete años que van de la publicación de "la ida" y "la vuelta" de Martín Fierro.

 

En cuanto al personaje de Martín Fierro, en la primera parte, luego de haber sido reclutado por la fuerza, aquel rompió completamente con la "civilización", asesinando a un gaucho negro, enfrentándose con la policía y finalmente excluyéndose totalmente de la sociedad premoderna de la Argentina de entonces, para irse a vivir con los indios pampas. En la segunda parte, en cambio Martín Fierro parece revalorizar una sociedad en transformación (en ese momento el país iniciaba su modernización capitalista, y el ingreso de millones de inmigrantes provenientes mayoritariamente de Italia), haber superado su rebeldía rupturista y orientarse más hacia el futuro de sus hijos.

 

[] Existencia histórica del personaje llamado Martín Fierro

 

Aún se especula si existió efectivamente un gaucho llamado Martín Fierro en el pago y hacia el tiempo en que Hernández sitúa su poema-novela. Algunos aducen que efectivamente, por la zona del Tuyú y de Monsalvo, habiendo documentación en la actual ciudad de Maipú e incluso de la entonces llamada Lobería Grande (actual ciudad de Mar del Plata), lugar en donde los Hernández llegaron a poseer una estancia y donde el autor pasó gran parte de su niñez y juventud, vivió un gaucho "matrero" (rebelde) con ese nombre y ese apellido (bastante comunes).

 

La mayoría de los críticos literarios y gran parte de los historiadores, sin embargo, suponen al personaje del poema como un sujeto ideal y paradigmático de los gauchos hasta los años 1880, teniéndose en cuenta que el gaucho Don Segundo Sombra existió realmente más allá de su literaturización; en todo caso en la Costa Atlántica bonaerense, entre los cardales, dunas y, sobre todo, los densos bosquecillos de curru mamil que se encontraban en torno a la que luego sería Mar del Plata; está documentado, sobre todo tras la batalla de Caseros y en tiempos de la Guerra de la Triple Alianza, que se refugiaban muchos gauchos tenidos por "vagos" (sin papeleta de conchabo) y "malentretenidos".

 

[] Peculiaridades lingüísticas

 

De la lectura de los prólogos que acompañaron a la obra se extrae la clara conclusión de que el autor pretendió reflejar el lenguaje de los gauchos. Esto derivó en un intenso estudio de la lengua de la obra por parte de la crítica en busca de emparentarla con el habla gauchesa. Autores españoles como Unamuno o Azorín se esforzaron en encontrar relaciones entre el habla del poema y la de los campesinos de la península. Por su parte algunos autores argentinos como Leumann dirigieron sus estudios hacia lo original de esa modalidad lingüística llegando a calificarla como genuino idioma nacional argentino. Especialmente polémica resultó la aportación de Américo Castro que defendía de modo radical la idea de que el habla gauchesca no era otra cosa que una prolongación del habla medieval castellana.

 

Más relevante resulta el interés del autor por tratar el habla rural de forma digna lo que le valió alguna crítica de sus contemporáneos que le reprocharon el uso de un habla inculta. Si bien este uso de la lengua entronca con toda la literatura gauchesca anterior, es Hernández quién la elevó a lengua literaria plena. Parte de la crítica ha señalado una cierta inestabilidad en la transcripción fonética de las palabras y un escaso dominio de la ortografía académica.3 Al margen de esta inestabilidad algunos de los rasgos característicos del poema son:

 

Reducción vocálica: pacencia por paciencia

 

Reducción de los grupos consonánticos vitima por víctima

 

En la terminación -ado se pierde la d.

 

Ante el diptongo ue f pasa a j: juego por fuego

 

d pasa a l (alquirir en lugar de adquirir

 

Frecuente aspiración de h; juir por huir

 

g en el grupo h+ue: güella.

 

Igualmente está generalizado el uso del voseo y de indigenísmos como bagual (caballo) o tape (hombre rústico)

 

[] Ediciones del Martín Fierro

 

En 1962, la Editorial Universitaria de Buenos Aires, a cargo de Boris Spivacow, decide hacer una edición especial del Martín Fierro con ilustraciones de Juan Carlos Castagnino. Se hicieron cuatros ediciones, una popular, a precios más accesibles para el público lector pero que conservara las ilustraciones (un total de 70), publicada en formato rústico y distribuida en kioscos; una especial, una de lujo y una edición para bibliófilos, de las que se imprimieron sólo 150 copias. La tirada total, de 50.000 ejemplares, se agotó en 25 días y llegó a vender un total de 250.000 ejemplares. Otras fuentes afirman que se vendieron 170.000 ejemplares en 3 meses.

 

El semanario Primera Plana comentaba la elección del pintor:

 

 

«El "operativo difusión" fue estudiado cuidadosamente. Los pintores destacadísimos son muy pocos; tal vez no superen la veintena. Descartadas las corrientes no figurativas o difíciles de asimilar por una mayoría de la población, el número se reducía más aún. (...) En la editorial explican el hecho de otro modo. Aseguran que el vehículo más propicio para entrar en contacto con el gran público, sin duda alguna, consistía en el "Martín Fierro", única poesía argentina a la vez popular y universal. Entre el pequeño grupo de pintores aceptables después de la ultraselección, se buscó quien estuviese más compenetrado del tema gauchesco. Las posibilidades convergieron en dos nombres: Alonso y Castagnino.». Semanario Primera Plana, 20 de noviembre de 1962.

 

[] Adaptaciones

 

Artículos principales: Martín Fierro (película de 1968) y Martín Fierro: la película.

 

En 1967 el Canal 7 de televisión de Buenos Aires transmitió una telenovela basada en el poema dirigida por David Stivel, con Federico Luppi como el gaucho Martín Fierro.

 

En 1968 apareció una versión cinematográfica del poema dirigida por Leopoldo Torre Nilsson, con Alfredo Alcón en el rol protagónico.

 

El 8 de noviembre de 2007 se estrenó una adaptación animada del poema dirigida por Norman Ruiz y Liliana Romero, con guion de Horacio Grinberg y Roberto Fontanarrosa, que también aportó sus dibujos. Con Daniel Fanego en la voz de Martín Fierro, Juan Carlos Gené como Juez de Paz, Damián Contreras y Roly Serrano como Gaucho Matrero.

 

En el 2010, Juan Carlos Stragouff produce, "Aventuras de Martucho", adaptación infantil de las desventuras del Gaucho Martín Fierro, estrenada en las vacaciones de invierno con una alta repercusión de la crítica teatral.