Diferencia entre Arqueología y Paleontología

30/07/2015 desumeraroma. Arqueología y Paleontología. Dos ciencias diferentes, pero que a muchos no se lo parece: si bien coinciden en el hecho de que ambas estudian el pasado antiguo de nuestro planeta, la Arqueología lo estudia a través del estudio de los antiguos hallazgos relacionados con el pasado del hombre, y estudia la Historia de las sociedades a través del tiempo. La Arqueología demuestra cómo se puede conocer el pasado del ser humano a través de los restos subterráneos que han ido quedando a lo largo del tiempo.

 No obstante, la Paleontología estudia el pasado geológico de nuestro planeta. Muchos años antes de la Prehistoria y de la existencia del ser humano, existieron una serie de etapas que actualmente se conocen como Historia Natural; la primera etapa fue el Precámbrico, seguida del Cámbrico y otros períodos más famosos como el Jurásico o el Cretácico, en los que el ecosistema natural de la Tierra pudo variar de unos momentos a otros, pasando por gélidas glaciaciones y cambios volcánicos de la superficie.

 Básicamente, los paleontólogos estudian dicho pasado de la Tierra a través del hallazgo de antiguas rocas, estudios del relieve o búsqueda de fósiles que demuestren la antigua existencia de plantas y seres vivos superiormente evolucionados, como los siempre tan bien conocidos dinosaurios.

 Debido a eso, podemos concluir que la Paleontología estudia el pasado natural, y la Arqueología estudia el pasado del hombre; es por ello que la primera se suele situar en el ámbito científico y la segunda, sobre la que este blog versa, se suele situar en el ámbito humanístico.

Y aunque sé que no tiene mucho que ver con esto, me gustaría nombrar a un amigo mío, llamado Carlos, que estudia la Paleontología; le encantan los dinosaurios y todo lo que tenga que ver con el pasado natural del planeta. Mientras, yo prefiero con mucho el estudio de la Arqueología; pueden parecer ciencias similares, pero lo cierto es que no lo son en absoluto.

Antiguas tumbas excavadas en roca en la localidad extremeña de Alburquerque, en Badajoz. No está muy claro aún el período exacto de su excavación en roca, por lo que a día de hoy siguen cubiertas por un halo de misterio.