"Los menores vuelven al delito porque la contención es cero"
01/07/2015 Fuente elancasti. Al mismo tiempo, cargó contra los padres de los adolescentes que son presos del consumo de drogas.
Para el Juez de Menores, Rodrigo Morabito, "los menores vuelven al delito porque la contención es cero”. Dijo que el Estado debe hacerse cargo de la situación.
El Juez de Menores, Rodrigo Morabito, admitió en declaraciones a Radio Ancasti que la falta de contención del Estado y la familia de los menores provocan que se conviertan en reincidentes.
Al respecto, aseguró que la mayoría de los internos del Centro Juvenil Santa Rosa terminan en el Servicio Penitenciario cuando son mayores.
"Estos chicos necesitan contención, porque son sujetos en desarrollo. Están formando su carácter, sus emociones. Hay que trabajar con su familia”, dijo.
"La contención es cero y vuelven a caer en el tema de consumo de drogas y otras sustancias. En este punto, el Estado debe ser constante y tenaz", puntualizó Morabito.
En este contexto, Morabito instó al Estado a profundizar su seguimiento de los casos de los menores judicializados.
"Tienen que hacer un seguimiento constante del menor con acompañamiento terapéutico, con programas, si no lo hacemos, no llegaremos a buen puerto”, advirtió.
Morabito dijo que es imprescindible que el Estado se haga cargo de la situación con acciones concretas.
"Desde la teoría todo es muy lindo, pero en la práctica nosotros tenemos al chico allí, pasado de drogas, con daños neurológicos importantes”, concluyó el Juez de Segunda Nominación.
Incidente en el Centro Juvenil
Con respecto a los incidentes ocurridos en el Centro Juvenil Santa Rosa, en el que tres internos intentaron prender fuego a colchones, Morabito explicó que el reclamo se debía a la situación procesal de los menores, pero se quejó de los controles.
"Hubo una falla, algo allí se filtró y los chicos pudieron disponer del producto para provocar el fuego. Se necesita un control más exhaustivo”.
El incidente se registró el martes 23 de junio pasado, al momento en el que tres adolescentes que se encontraban alojados en el Centro Juvenil Santa Rosa habían prendido fuego a uno de los colchones.
Sin embargo, dado que se trataba de un colchón ignífugo, fue solo un intento frustrado de los adolescentes, que no obstante dejó en evidencia las fallas en la requisa pertinente.